Así como el tablero de mi carro tiene indicadores que me señalan la temperatura del carro, la carga de la batería, la cantidad de combustible que tengo, de la misma manera mi vida tiene indicadores que me indicarán el estado y condición de mi corazón y de mi mente.

Hoy quiero atender tales indicadores, porque ellos me motivaran a corregir cosas internas.   Estos son los indicadores que me ayudarán a continuar con la ruta correcta de mi corazón.  Pensar libremente, me indica que nadie me está manipulando.

Practicar la paciencia me muestra que el Espíritu Santo tiene control interno.  Sonreír frecuentemente determina el grado de paz y gozo en mi se interno. Sazonar los momentos  especiales me indica que estoy apreciando cada momento de mi existencia.

Un nuevo indicador que debo observar es el hacer amigos, porque ellos me indica que mantengo las relaciones  en las perspectiva correcta.    Decirle a otros que amo lo que ellos hacen por mi es un indicador del nivel de mi agradecimiento en el corazón.

Sentir profundamente lo que otros sienten es un indicador de mi sensibilidad, sin la cuál no podré desenvolverme efectivamente.      Desechar la preocupación es un indicador del grado de mi confianza en el Señor.  Olvidar el problema tras buscar soluciones es un indicador de mi disposición de vivir en paz y en progreso.

Perdonar al enemigo, es un indicador del nivel de perdón en mi corazón, elemento esencial para desenvolverme en un mundo lleno de resentimientos.   Mantener una promesa es un indicador de la seriedad que le doy  al compromiso.  Aprovechar las oportunidades es un indicador de cómo veo las puertas que Dios abre.  Estos indicadores necesito observarlos en mi corazón en este día.

Otros indicadores que debo notar en mi corazón en este día son:  Tratar algo nuevo ya que me indique el nivel de creatividad y ruptura de la rutina.   Tener nuevas ideas es el indicador de una mente renovada y transformada por el Señor.

Aceptar las equivocaciones y aprender de ellas es un indicador del nivel de mi  aprendizaje constante de la vida.  Contar las bendiciones del Señor a otros es el indicador de mi anhelo de compartir con otros lo recibido de mi Padre celestial.  Observar los milagros y ser canal para que fluyan ellos es un indicador de mi entendimiento del poder claro y diáfano del Señor.

Señor, Gracias por los indicadores que operan en mi corazón. Ellos me enseñan cual es el estado interno de mi ser.  Hoy quiero atender estos indicadores para que así mi corazón pueda honrarte y servirte con devoción y entrega.  Gracias por permitirme vivir para ti en este día con alegría.,  Amén.