Si pudiéramos ver en reversa tan sólo unos segundos, sin
juzgar, sin tener miedo ni rencores, si pudiéramos ver lo que
es nuestra vida por unos segundos, con la cabeza fría, ¿qué
se nos viene a la mente? ¿Qué es lo primero que pensamos?
Pensamos en esos momentos súper pequeños que llegaron
inesperadamente, sin ser planeados que nos llenaron
de felicidad, y nos hicieron sentir vivos...
La vida se basa de los recuerdos y de los pequeños
momentos de felicidad, nosotros mismos somos nuestros
recuerdos, porque somos lo que en un pasado lejano o
cercano
nos marcaron, entonces en ciertas palabras somos nuestro
pasado, pero hay que diferenciar entre serlo y vivir en él.
Somos nuestro pasado y siempre recordamos lo felices que
fuimos en él, pero hay que pensar que hoy es el pasado de
mañana, así que hoy se tiene que vivir, crear momentos para
que un día cuando nos detengamos digamos, no desperdicio
mi vida, fui, soy y estoy seguro de que en mi futuro también
seré feliz.