lo que tengo no me pertenece aunque forme parte
de mí .
Todo lo que soy me fue prestado por el Creador,
para que pueda repartir con
aquéllos que entran en mí vida.
Nadie cruza nuestro camino por casualidad.
Y nosotros no entramos en la vida de alguien
sin ninguna razón, y no te lamentes de lo ocurrido
sin ninguna razón .
Hay mucho para dar y recibir.
Mucho para aprender, con experiencias positivas o negativas.
Es eso…
Intentá ver las cosas negativas que te pasan como
algo que sucede por alguna razón.
Y no te lamentes de lo ocurrido, además,
reclamar no te servirá
de nada, Y te vendará los ojos para continuar tu camino.
Cuando no conseguimos olvidarnos que alguien
nos lastimó, estamos reviviendo
la herida haciéndola, muchas veces, mayor que la que teníamos antes.
No siempre las personas nos
lastiman intencionalmente.
Muchas veces, nos sentimos heridos,
pero la otra persona ni siquiera se dio cuenta de esa situación,
y nos decepcionamos porque aquella persona no cumplió
nuestras expectativas. Nuestras expectativas!!!
¿Y sabemos cuáles eran las expectativas de la otra persona?
A nosotros nos decepcionan
y nosotros decepcionamos a los demás.
Pero, claro, es más fácil pensar en las cosas que nos duelen a nosotros.
Cuando alguien nos dice que nos lastimó sin intención,
créele! Te va a hacer bien. Y así, tal vez, te
entenderán cuando digas sinceramente, “fue sin querer.”
Da lo mejor que puedas de tí! Cuando te vayas,
la única cosa que dejarás es el recuerdo de lo que hiciste aquí.
Sé bueno, intentá dar siempre el primer paso,
nunca niegues una ayuda que esté a tu alcance,
perdoná y da lo mejor de tí mismo.
SE UNA BENDICIÓN!
Dios no viene en persona para bendecirnos.
Él usa a los que están dispuestos a cumplir la misión.
Todos podemos ser ángeles.
La eternidad está en nuestras manos.
Viví de manera que cuando ya no estés, gran parte de
tí continúe en aquellos que tuvieron la fortuna de encontrarte!!!
“ Voy a pasar por la vida una sola vez, cualquier cosa buena que yo
pueda hacer o alguna amabilidad
que pueda hacer a algún humano,
debo hacerlo ahora, porque no pasaré de nuevo por ahí… ”
Madre Teresa de Calcuta.