En la búsqueda de nuevas formas de mejorar la rentabilidad de su negocio los hoteles han desarrollado una tecnología que impide que te afanés la toballa.
Un nuevo sistema antirrobo utiliza etiquetas de radio frecuencia, cosidas en el interior de la tela y que además son lavables. Según la empresa norteamericana que las desarrolló un hotel en Hawaii pasó de perder 4.000 toallas por mes a sólo 750. Lo cual equivale a un ahorro de 16.000 dólares mensuales.
Según William Serbin, de la firma Linen Technology Tracking, "un hotel puede perder de un 5 a un 20% de sus toallas, sábanas y batas por mes. Este gasto se hace muy oneroso considerando el precio ascendente del algodón".
La pequeña etiqueta de identificación por radio frecuencia (RFID) permite ubicar cada pieza de blanquería cuando se lleva a la lavandería, a la piscina del hotel y detectar cuando alguien quiere retirarla del perímetro del edificio. Un detalle a tener en cuenta: envía una señal cuando se la intenta arrancar.