Ahora la Pena es Tuya.

Yo… la Arena. Tú…la Mar
Yo se bien que tus pesares
Los vas dejando en mí Arena
Para alivio de tus males.

Tengo que hacer, un rompeolas
entre tu Mar y mí Arena,
no quiero que sepa el Mar
que por mí alma corren penas.

No quiero que tu Mar duerma
en la orilla de mí Arena,
que son canales mis ojos
cuando tus olas la besan.

No quiero que llore el viento
penas de amor en mí puerta,
que los ojos de mí cara
Ya te lloraron por muerta.

No quiero que tú Mar arribe
a la orilla de mi Arena;
no quiero que me consueles,
que de tu maldito amor
ya terminó mí condena.

Ya sació su sed mí pena,
se ha pagó tu luz de luna
Y tú voz se hizo silencio,
Ahora la pena es tuya.


Diego Díaz.