AMATISTA 
Su nombre viene del griego amethystos, que significa remedio para la ebriedad; o amethyein, ser inmune a ella. Con su capacidad de restaurar el equilibrio, puede poner en armonia a aquellos que estén ebrios de cualquier mezcla. Griegos y romanos en tiempos antiguos para evitar las resacas del alcohol, bebian de un vaso o copa de amatista.
Los obispos la llevaban en su anillo para evitar que el poder eclesiástico se les subiera a la cabeza. En tiempos más modernos utilizamos la amatista para recibir sus vibraciones calmantes y curativas.
Especialmente útil en los desequilibrios de la sangre y de los sistemas nervioso y endocrino. Alivia la diabetes y la hipoglucemia por medio del páncreas, la pituitaria, el timo y las tiroides.
Fortalece los glóbulos rojos. Y es valiosisima para el tratamiento de dislexia o insuficiencias nutritivas. En la mesita de noche, nos auyentará pesadillas. Nos ayuda a transformarnos, tal como vamos evolucionando tanto espiritual como fisicamente. Cargada al Sol, amplia y purifica las energías curativas y espirituales. Cargada en la Luna beneficia la mente, la educación y el espíritu.
Transforma la estructura molecular de la materia, y lleva salud y bienestar a todo el planeta, poniendo en armonías las esferas mental, fisica, emocional y espiritual. Inspira virtudes y altos ideales: Justicia, Valor, Autoridad y Perfección. Controla los pensamientos malignos y calma las malas pasiones; estimula la inteligencia, preserva a quien la lleva de enfermedades contagiosas Da protección y victoria en todos los asuntos de trabajo, pleitos, enemigos, etc.. En drusa, nos servirá para limpiar y cargar otras piedras o joyas. Podemos hacer un elixir del que pondremos 7 gotas en el agua del baño y nos servirán para limpiar los cuerpos sutiles y el aura que forma parte de nuestro ser.
ELIXIR: En un tarro de cristal, colocar 100 cl. De alcohol de 60º (pedirlo en la farmacia), con 150 cl. De agua mineral sin gas. Dejarlo en una ventana o terraza durante 3 dias y 3 noches, para que reciba la energía solar y lunar. Luego lo traspasaremos a un frasco de cristal con cuentagotas, y lo utilizaremos para limpiar el aura o el chakra ajna (tercer ojo)
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