Y los siervos del rey dijeron al rey: He aquí, tus siervos están listos a todo lo que nuestro señor el rey decida” II Samuel 15:15.
Si hoy realmente estoy listo a hacer lo que el Señor y Rey de mi vida decida, entonces todas las luchas, vejaciones, burlas o indiferencias de la gente que se levantan por yo querer obedecerlo, realmente son pequeñas o simplemente no existen. Si él me ha llamado a hacer lo que estoy haciendo entonces simplemente no podré quejarme, porque estoy haciendo lo que él me ha señalado de antemano.
Si él decide que en estos días realice un trabajo de puertas para adentro, donde no voy a ser visto, ni aclamado ni siquiera reconocido, entonces no estaré enojado porque a otros si les ha tocado un trabajo de puertas para afuera y sin son reconocidos.
Si hoy me he propuesto a hacer algo dentro de mis planes personales y él me envía alguien que va interrumpir ese trabajo, pero que en los planes del Señor está que le dedique tiempo a esa persona necesitada y atribulada, necesito estar dispuesto a hacer un lado mi trabajo y entonces hacer el trabajo que a ultima hora el Señor decidió enviarme. Al fin y al cabo lo más importante para vida no es llevar a final termino mis planes, si no los planes del Rey.
Si hoy necesito caminar por el camino de la obediencia y estar listo para lo que el Señor me pida entonces hoy también necesito comprender que mi primer paso es estar listo para obedecer sin discutir. Es el Señor quién decide en ultima instancia el trabajo que haré y estar dispuesto a modificar mis planes personales para realizar los planes el Señor.
Gracias Señor, porque hoy has tocado mi alma con tu poder y con tu amor. Hoy estoy listo para hacer cualquier cosa que me indiques. Sé que mi vida pretende a ti, yo solo soy tu siervo y un siervo no decide, quien decide es su Señor. Quiero aceptar las misiones que me encomiendes hoy con gozo, satisfacción y entusiasmo. Se que hoy estoy aquí y estoy haciendo lo que estoy haciendo por que este es tu plan. Amén.