Era un ladrón que estaba robando en una casa pero con tal mala suerte que llegaron los dueños de casa y lo vieron, entonces, el ladrón dice: Como ya me vieron, los voy a tener que matar, pero antes quiero saber sus nombres, y le pregunta a la muchacha su nombre y ella dice: Isabel. A ti no te puedo matar porque así se llama mi mamá. Luego le pregunta al muchacho y él le dice: Me llamo Juan, pero mis amigos me dicen Isabel.