Hacer afirmaciones es cómo sembrar semillas en la tierra.
Primero germinan, después echan raíces y después crecen
y salen a la luz.

Le lleva su tiempo a la semilla convertirse en planta hecha
y derecha.
Lo mismo ocurre con las afirmaciones.
Transcurre un tiempo desde que se hace la primera declaración
hasta que ésta se concreta.
De modo que hay que tener paciencia.
Todo está bien
Louise Hay