NUESTRO ESPACIO
Muchos tenemos un lugar especial en algún lugar aislado, muy profundo,
donde vamos para aislarnos del mundo, para pensar, para alejarnos de lo real.
Este lugar, donde abrimos ante nosotros mismos nuestros más profundos
pensamientos.
El refugio de nuestros deseos y de nuestros miedos, donde pasamos en un
instante de la cima al abismo.
El lugar puede ser físico o simplemente imaginario y él guarda secretos de
lo que hemos sido, de quienes a través del tiempo nos hemos convertido y
de lo que nos proponemos ser en cada aniversario.
Pero por muy escondido que esté ubicado, por muy profundo que lo
queramos situar, a veces, fortuitamente alguien encuentra ese lugar que era
sólo nuestro. Y nosotros, sin saber como ni por qué, le permitimos a esa
persona estar, sentir y compartir nuestras razones, y ver como poco a poco
nos descubre.
Esta persona añade nuevos colores a nuestra guarida, y muy despacio,
sin hacer ruido... nos redecora nuestro espacio sin pedir permiso y una
parte de ella pasa a ser ya parte de nuestra vida...
D/A
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