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General: SANTORAL DE HOY MARTES 8 DE DICIEMBRE DEL 2015
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De: campitos0 (Mensaje original) |
Enviado: 09/12/2015 21:03 |
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La Inmaculada Concepción de la bienaventurada Virgen María
Solemnidad, 8 de diciembre
Fuente: Archidiócesis de Madrid
SOLEMNIDAD
Martirologio Romano: Solemnidad de la Concepción Inmaculada de la bienaventurada Virgen María, que, realmente llena de gracia y bendita entre las mujeres, en previsión del nacimiento y de la muerte salvífica del Hijo de Dios, desde el mismo primer instante de su Concepción fue preservada de toda culpa original, por singular privilegio de Dios. En este mismo día fue definida, por el papa Pío IX, como verdad dogmática recibida por antigua tradición (1854).
Todo lo que se refiere a la Santísima Virgen María es un maravilloso misterio. Como la primera y más importante de las prerrogativas suyas es su condición de ser Madre de Dios, todo lo que deriva de ello-el caso de ser Inmaculada, por ejemplo- es una consecuencia de su especialísima, impar e irrepetible situación en medio de los hombres.
De hecho, en un tiempo concreto, justo en 1854, el papa Pío IX, de modo solemne y con todo el peso de su autoridad suprema recibida de Jesucristo, afirmó que pertenecía a la fe de la Iglesia Católica que María fue concebida sin pecado original. Lo hizo mediante la bula definitoria Ineffabilis Deus donde se declaraba esa verdad como dogma de fe.
Poco a poco fue descubriéndolo en el andar del tiempo y atendiendo a los progresos de la investigación teológica, al mejor conocimiento de las ciencias escriturísticas, a lo que era realidad viva en el espíritu y vida de los católicos y después de consultado el sentir del episcopado universal.
No es en ningún momento un gesto debido al capricho de los hombres ni a presiones ambientales o conveniencias económicas, políticas o sociales por las que suelen regirse las conductas de los hombres. No; es más bien la fase terminal y vinculante de un largo y complejo proceso en que se va desarrollando desde lo más explicito y directo hasta lo implícito o escondido y siempre al soplo del Espíritu Santo que asiste a la Iglesia por la promesa de Cristo. Por tanto, la definición dogmática no es la creación de una verdad nueva hasta entonces inexistente, sino la confirmación por parte de la autoridad competente de que el dato corresponde al conjunto de la Revelación sobrenatural. Por eso, al ser irreformable ya en adelante, asegura de manera inequívoca las conciencias de los fieles que al profesarla no se equivocan en su asentimiento, sino que están conforme a la verdad.
El libro del Génesis, la Anunciación de Gabriel trasmitida en el tercer evangelio, Belén donde nace el único y universal Redentor, El Calvario que es Redención doliente y el sepulcro vacío como triunfante se hacen unidad para la Inmaculada Concepción.
Los Santos Padres y los teólogos profundizaron en el significado de las palabras pondré enemistades entre ti y la mujer, entre tu descendencia y la suya reveladas y en los hechos; relacionaron las promesas primeras sobre un futuro Salvador, descendencia de la mujer, que vencería en plenitud al Maligno con aquellas palabras lucanas llena de gracia salidas del ángel Gabriel. Compararon a la Eva, madre primera de humanidad pecadora y necesitada de redención, con María, madre del redentor y de humanidad nueva y redimida. Pensaron en la redención universal y no podían entender que alguien -María- no la necesitara por no tener pecado. Con los datos revelados en la mano se estrujaron sus cabezas para entender la verdad universal del pecado original transmitido a todo humano por generación. Jugaron con las palabras Eva -genesíaca-, y Ave -neotestamentaria-, ambas del único texto sagrado, viendo en el juego maternidad analógica por lo común y lo dispar. Vinieron otros y otros más hablando de la dignidad de María imposible de superar; el mismo pueblo fiel enamorado profesaba la conveniencia en Ella de inmunidad, pero aún quedaban flecos sin atar. Salió algún teólogo geniudo diciendo ¡imposible! y otro sutil, que hilaba muy fino, afirmó que mejor es prevenir que curar la enfermedad para afirmar que la redención sí era universal y María la mejor redimida.
Solucionadas las aparentes contradicciones de los datos revelados que ataban todos los cabos sueltos y comprendido cuanto se puede entender en la proximidad del misterio, sólo quedaba dar la razón de modo solemne a la firme convicción de fieles y pastores en el pueblo de Dios que intuía, bajo el sereno soplo del Espíritu, que por un singular privilegio la omnipotencia, sabiduría y bondad infinitas de Dios habría aplicado, sin saber cómo, los inagotables méritos del Hijo Redentor a su Santísima Madre, haciéndola tan inocente desde el primer instante de su concepción, como lo fue después y para siempre, por haberla amado más que a ninguna otra criatura y ser ello lo más digno por ser la más bella de todo lo que creó. Así lo hizo, aquel 8 de diciembre, el papa Pío IX cuando clarificó para siempre el significado completo de llena de gracia, el Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre.
Mientras los teólogos estudiaban y discutían todos los pormenores, los artistas les tomaron la delantera, sobre todo los españoles Murillo, Ribera, Zurbarán, Valdés Leal y otros; también no españoles como Rubens o Tiepolo. Ponían en sus impresionantes lienzos a la Inmaculada con túnica blanca y manto azul, coronada de doce estrellas, que pisaba con total potestad y triunfo la media luna y la humillada serpiente.
Para saber más consulta Fiesta de la Inmaculada Concepción de María
¡Virgen María, Madre Inmaculada, ruega por nosotros! himnos y oraciones
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Paul Yun Ji-Chung y 123 compañeros, Beatos
Mártires, 8 de diciembre
Por: Xavier Villalta | Fuente: Catholic.net
Mártires de Corea
Martirologio Romano: Beatos Paul Yun Ji-Chung, laico, coreano y de otros 123 compañeros, asesinados por odio a la fe en Corea. († entre 1791 - 1888)
Fecha de beatificación: 15 de agosto de 2014 por S.S. Francisco.
Breve Biografía
Paul Yun Ji-chung nació en el año 1759 en el seno de una renombrada y noble familia de Janggu-dong, Jinsan, Jeolla . Su nombre adulto era "Uyong". Francis Yun Ji-heon, quien fue martirizado en Jeonju durante la Persecución Shinyu de 1801, era su hermano menor.
Paul Yun, era inteligente y digno de confianza, se dedicó a estudiar desde muy pequeño Aprobó el primer examen del estado en la primavera de 1783. Fue en alrededor de esa época en la que Paul Yun conoció sobre la fe católica por medio de su primo John Jeong Yak-yong, hijo de la hermana de su padre.
Comenzó a leer libros acerca de la fe y finalmente fue bautizado por Peter Yi Seung-hun en 1787, luego de haber estudiado la doctrina católica por tres años.
Paul Yun le enseñó el catecismo a su madre, a su hermano más joven Francis Yun y a James Kwon Sang-yeon, hijo de la hermana de su madre, introduciéndolos así a la Iglesia Católica. También, junto con Augustine Yu Hang-geom -un pariente político- intentó proclamar el Evangelio.
El Obispo de Pekín, A. Gouvea, en 1790, publicó un decreto prohibiendo la práctica de los ritos ancestrales, Paul Yun y su primo James Kwon quemaron la tableta ancestral. Cuando su madre -tía de James Kwon- murió en el verano del año siguiente, se realizó la ceremonia fúnebre según el rito católico en vez del rito confuciano. Esto fue también deseo de su madre.
Very soon, a rumor was spread that Paul Yun did not offer the funeral ancestral rite and, that he had burned the ancestral tablet. When the rumor reached the royal court it was furious. After a while the royal court ordered the magistrate of Jinsan to ´arrest Yun Ji-chung and Kwon Sang-yeon.´
Muy pronto se exparció la noticia de que Paul Yun no había ofrecido el rito fúnebre ancestral y que había quemado la tableta ancestral. Cuando el rumor llegó a la corté real causó enojo. Al cabo de poco tiempo la corte real ordenó al magistrado de Jinsan arrestar a Yun Ji-chung y a Kwon Sang-yeon.
Al conocer la noticia Paul Yun se ocultó en Gwangchoen, Chungcheong-Hace y James Kwon en Hansan, Chungcheong-Hace. Entonces, el magistrado de Jinsan ordenó arrestar al tío de Paul Yun en lugar de a ellos. Cuando Paul Yun y James Kwon oyeron estas noticias, dejaron sus escondites, y se entregaron al magistrado de Jinsan. Esto ocurrió alrededor de mediados de octubre de 1791.
Inicialmente el magistrado de Jinsan trató de persuadirlos de renunciar a su fe. Pero ellos contestaron que eso era bajo ninguna circunstancia lo harían, enfáticamente afirmaron que la verdad tan sólo la doctrina católica era la verdadera. El magistrado, al ver que no podía hacerlos cambiar de opinión, ordenó que ellos fueran transferidos a la oficina del gobernador de Jeonju.
Paul Yun y James Kwon fueron interrogados al día siguiente de su llegada a Jeonju. El gobernador usó todos los medios posibles para conseguir que ellos le diera nombres de otros católicos, pero su esfuerzo fue en balde. Defendieron su fe con determinación y no pronunciaron palabra alguna que pudiera dañar a la Iglesia o a otros católicos. Paul Yun, en particular, indicó -artículo por artículo- la irracionalidad de los ritos ancestrales confucianos, explicando a la vez la doctrina de la Iglesia Católica. Esto enfureció al gobernador y ordenó que los sean severamente castigados.
Paul Yun and James Kwon were already prepared to die for God. Their only answer was; "We serve God as our ´Great Father´, therefore, we cannot worship Him by disobeying His Commandments."
Paul Yun y James Kwon estaban listos para morir por Dios. Su única respuesta fue; "servimos a Dios como nuestro "Gran Padre", por lo tanto, nosotros no podemos venerarlo desobedeciendo Sus Mandamientos".
El gobernador de Jeonju por último los hizo escribir sus declaraciones finales y se los sometió a la corte real. Allí los ministros de la corte exigieron que "Yun Ji-chung y Kwon Sang-yeon debían ser decapitados". El rey aceptó la opinión de los ministros, y por último autorizó la ejecución.
El 8 de diciembre de 1791 (13 de noviembre según el calendario lunar), fueron decapitados por odio a la fe mientras oraban a Jesús y María. Paul Yun tenía 32 años.
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