Nunca está de más recordar lo que Emmet Fox nos presenta en "El Zodíaco y la Biblia" (que aparece en "La Pluma Mágica de EMMET FOX") en cuanto al verdadero instructor. En estos tiempos en que hay tanta... digamos, "oferta" a este respecto, esta selección es como un llamado de atención al discernimiento que es menester utilizar, para luego no caer en el llanto y el crujir de dientes.
Y así el Gran Instructor Mundial de la nueva era no será ningún hombre o mujer, o ningún libro de texto, o ninguna organización, sino el Cristo Interno que cada individuo tendrá que encontrar y contactar por cuenta propia.
Hay una prueba muy simple mediante la cual cualquier persona puede diferenciar a un maestro verdadero de uno falso, y es la siguiente: Si los orienta a su propia personalidad; si hace reclamaciones especiales para sí mismo; si dice que él ha recibido privilegios especiales de parte de Dios que no están accesibles por igual a toda la raza humana por doquier; si -a nombre propio o de una organización- trata de establecer, bajo el pretexto que sea, un monopolio de la Verdad acerca de Dios, entonces, por más imponentes que sean sus credenciales, por más agradable que pueda ser su personalidad, él es un falso maestro, y es mejor no tener nada que ver con él. Por el contrario, si les dice que alejen su atención de él, que busquen la Presencia de Dios en su propio corazón, y que usen libros, conferencias e iglesias sólo como medios para lograr ese fin, entonces, por más humilde que sean sus esfuerzos, por más deficientes que puedan parecer sus demostraciones, él es empero un verdadero maestro y les está dando el Pan de Vida."