El Ghee
El ghee es una especie de mantequilla que tiene, según la tradición de la medicina Ayurveda, múltiples usos tanto culinarios como medicinales.
A modo de introducción se puede decir que el ghee es la mantequilla clarificada, es decir, sin la proteína ya que mediante el proceso de ebullición a que se la somete hace que se separe la proteína que lleva y sea mucho más digestivo y esté libre de grasas.
Para hacer el ghee se recomienda, a parte de los ingredientes necesarios, un poco de paciencia a la hora de ponerse ya que es un proceso lento.
Ingredientes para el ghee
Mantequilla ½ Kg. o 1 Kg. (al final del proceso queda bastante reducida por ello cuanto más cantidad mejor)
Una gasa esterilizada (de venta en farmacias)
Un colador.
Una olla de acero inoxidable o de hierro colado (nunca de aluminio)
Un recipiente de vidrio preferentemente con tapa hermética. Si no es posible también puede utilizarse un recipiente de plástico tipo tupperware.
Una cuchara de madera.
Elaboración del ghee
Se pone la mantequilla en la olla a fuego lento y se va removiendo para derretirla. Durante todo el proceso se deberá ir removiendo constantemente y evitar que la mantequilla se queme.
Cuando empiece a hervir se formará una espuma que NO se ha de retirar en ningún momento, sino que hay que esperar a que esta se evapore.
Se mantendrá hirviendo hasta que la mantequilla se haga más líquida y alcance un color dorado. En las paredes de la olla quedará la proteína a medida que se vaya haciendo el ghee y cogerá un color tostado y tendrá un olor a galleta *.
Para comprobar que el ghee está hecho se ha de hacer "la prueba del algodón". Se retira la olla del fuego y se coge un trocito de algodón o un bastón de algodón de los oídos. Se moja un poquito el algodón en el ghee y se comprueba directamente en el fuego si chisporrotea. Si ya no chisporrotea es que ya no hay agua y está hecho.
Acto seguido se coge la gasa y se pone en el colador, se coloca encima del recipiente de vidrio y se vierte el ghee para que así quede retenida toda la proteína.
Se deja enfriar sin tapar y a medida que se va enfriando cogerá consistencia y se solidificará (en verano quedará menos consistente y en invierno quedará completamente frío como la mantequilla aunque la textura siempre será granulada) Se conserva fuera de la nevera durante un año.
*Nuestro consejo
Se ha de ir con sumo cuidado a partir de que empieza a cambiar el color del ghee, ya que si dejamos que se haga mucho cogería un color demasiado oscuro. Sería un ghee pasado o quemado. Por ello, es recomendable ir probando con el algodón y si no está hecho continuar. De todas maneras si esto ocurre no tirarlo, ya que puede servir como hidratante para la piel (entre otros muchos remedios)
Utilidades del Ghee
Es un sustituto de la mantequilla, por lo que se puede comer en tostadas para el desayuno o en recetas de cocina.
Se puede sustituir por el aceite a la hora de cocinar.
Es un buen hidratante de la piel, así como un buen protector. También sirve para las quemaduras del sol.
Es un buen lubricante para los ojos y un potenciador de la vista, por lo que se puede utilizar cada mañana directamente en lo ojos (se pone con la yema del dedo en el lagrimal y se extiende)
No engorda aunque las personas obesas deben tomarlo con prudencia.
El Ghee equilibra los fluidos/residuos corporales (heces, orina y sudor)
Es un buen vehículo de transporte a nivel celular.
Es Tridosha (es bueno para todos los Doshas, Vata, Pitta y Kapha, pero en exceso provoca obesidad, por lo que no se debe abusar)
Aumenta el Agni (ayuda en la digestión)
Anna Gonzalo
Diplomada en Nutrición y Alimentación Ayurveda. Diplomada en Masaje ayurvédico