¡Me declaro vivo!
Saboreo cada acto. Antes cuidaba que los demás no hablaran mal de mí, entonces me portaba como los demás querían y mi conciencia me censuraba.
Menos mal que a pesar de mí esforzada buena educación siempre había alguien difamándome. ¡Cuánto agradezco a esa gente que me enseñó que la vida no es un escenario! Desde entonces me atreví a ser como soy.
El árbol anciano me enseñó que todos somos lo mismo.
La montaña es mi punto de referencia: ser invulnerable, que cada uno diga lo que quiera, yo sigo caminando indetenible.
Soy guerrero: mi espada es el amor, mi escudo el humor, mi hogar la coherencia, mi texto la libertad.
Si mi felicidad resulta insoportable, discúlpenme, no hice de la cordura mi opción.
Quizás solamente teníamos que ser humanos.
El que tú no veas los átomos, no significa que no existan. Por eso es muy importante que sea el Amor lo único que inspire tus actos
Sin Amor nada tiene sentido, sin Amor estamos perdidos, sin Amor corremos el riesgo de estar de nuevo transitando de espaldas a la luz
No soy un sabio, sólo un enamorado de la vida.
El silencio es la clave, la simplicidad es la puerta que deja fuera a los imbéciles.
No es suficiente querer despertar, sino despertar.
Es más importante amar lo que hacemos y disfrutar de todo el trayecto.
La meta no existe, el camino y la meta son lo mismo. No tenemos que correr hacia ninguna parte, sólo saber dar cada paso plenamente.
No, no te resistas, ríndete a la vida.
La mejor manera de ser feliz es: 'ser feliz’. Reconstruye tu raíz y saborea la vida
Disfruta de lo que tienes, recibe lo que venga, crea e inventa lo que necesites, haz sólo lo que puedas, y fundamentalmente celebra lo que tengas.
La vida es un canto a la belleza. El viento será tu amigo, el árbol se tornará en maestro y el amanecer en ritual.
La noche se vestirá de colores, las estrellas hablarán el idioma del corazón y el espíritu de la tierra reposará otra vez tranquilo.
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