Porquè no ? no hay que perder la esperanza.
Precisamente de eso se trata la celebraciòn de Navidad y el recibimiento del nuevo año.
Es para renovar todo en nuestro interior...
borrar de nuestro corazòn la tristeza, la amargura,
los rencores, los resentimientos por todo lo malo
que nos haya sucedido en lo personal, o por mirar
lo que le sucede a otros pueblos menos afortunados
que nosotros.
Muchos nos preocupamos tambièn por
el futuro de la Humanidad y del planeta.
No perdamos la Fe y la Esperanza en nuestras propias fuerzas. Imagìnense esa fuerza multiplicada por millones y millones de personas en el mundo;
què no podriamos lograr entre todos ?
Dios tiene Fè en nosotros...
dejèmos que esa semillita dè frutos.
Me encantò tu regalo,
Gilda