LA AUTOINDULGENCIA.-
¿Qué es indulgencia? Es una actitud de compresión, la capacidad de estar pronto a perdonar y a no recriminar, ni culpar a los demás ni mostrar conductas inclementes. Y hay que aprender a ser indulgente con uno mismo; no inmaduramente autocomplaciente, pero si indulgente. También uno es humano, o precisamente porque uno es humano comete errores, equivocaciones y faltas. Hay que aceptarse conscientemente a uno mismo no resignarse y desde esa aceptación comenzar a poner los medios para mejorar y hallar madurez interior. Pasar por alto todos los defectos de uno mismo es nocivo y frena el proceso de evolución; no pasarse ninguno y recriminarse, también es perjudicial.
La autocomplacencia se muestra de muchas maneras, justificando conductas impropias, minimizando los hechos, haciendo mea culpa no sentida, victimizándose y con otros medios de evasión, que en vez de generar un espacio de reflexión y cambio, registra mayor mediocridad y pocas posibilidades de transformación.
Es frecuente escuchar gente decir: “es que yo soy muy exigente conmigo mismo” y lo dicen con orgullo, y ciertamente hay quienes pueden pasar años flagelándose por un error cometido que los inutiliza, y no toman acciones para perdonarse, para cambiar la conducta y evolucionar a una vida más plena. Recuerdo el caso de alguien que se dio el permiso de tener una aventura amorosa muy corta, y no volvió a ver a esa pareja nunca más, pero esta persona no se perdonaba el hecho de haber faltado a sus valores, y durante 11 años de su vida se negó la oportunidad de volver a enamorarse y tener una nueva relación.
Para entender y conseguir una Autoindulgencia equilibrada y bien medida, se debe saber y hacer lo siguiente:
Somos imperfectos, pero tenemos capacidades infinitas para ser mejores cada día.
Cuando hagas un acto de “mea culpa” pregúntate: más allá de los otros ¿Cuál fue el verdadero detonante de mi conducta?, ¿Qué tengo que aprender para no repetir de nuevo esta acción? Identifica si estás viviendo el dolor o te encuentras emocionalmente en el sufrimiento. El sufrimiento es la forma nociva de relacionarse con el dolor. Has chocado más de una vez con “la misma piedra”, será eso un mensaje de la vida para anunciarte que no estás aprendiendo lo que te corresponde, o que estás desestimando la importancia de una situación. “La práctica debería ser producto de la reflexión, no al contrario”; frase que consigo prudente como para uno de 5 artículos dedicado a la interpretación de los “antídotos contra la infelicidad” de Ramiro Calle, confieso que fue muy placentero y desafiante interpretar de manera práctica al autor y, por los comentarios recibidos ha servido de mucho.
SALUDOS…ADRY