LA MADUREZ
La madurez no es una cuestión de edad, tiene que
ver más con las aptitudes de la vida y con tus
actitudes como persona.
El cómo nos enfrentamos
cada día a nuestro espejo, cómo vemos la vida
desde nuestra edad, nuestra perspectiva y nuestra
percepción.
Saber aceptar lo inevitable que es el
tiempo, los años y saber que no sólo es edad
biológica, sino edad florecida, rica en méritos y
experiencias propias, llenas de sabiduría.