Las luces del crepúsculo engalanan
la desnudez serena de los senos,
y son mis ojos, de tus formas llenos,
manos fantásticas que la profanan. |
Brevería de Francisco Alvarez Hidalgo
Dos manos
- Tan inmensa tu piel, y accidentada,
- y dos manos tan sólo para ella:
- para la Vía Láctea, una estrella,
- para el mar, una lágrima salada.
-
- Qué insuficiente soy, qué limitada
- mi maniobra en ti; cómo atropella
- mi forma a mi energía, y corta y sella
- la actividad que nace arrebatada.
-
- Sólo dos manos a escalar tus montes,
- en pérdida de cauces y horizontes,
- en descuido de grutas y mesetas.
-
- Manos que a espacio y tiempo desafían.
- Si fueran diez tampoco lograrían
- permanecer en tu presencia quietas.
| |
| | | |
|