Cuantas veces no hemos oído al locutor que habla con un de sus oyentes pedirle que por favor apague o se aleje de su receptor. Esto se debe a que al crearse un doble circuito de comunicación entre locutor-oyente, se produce un fenómeno llamado “realimentación”; es decir la señal que llega al receptor del oyente es captada por el micrófono de su teléfono y vuelve a la emisora, donde nuevamente es captado por el micrófono del locutor, provocando que algunas frecuencias sonoras comiencen a moverse a distinto ritmo y a superponerse a sí mismas, creando esa característica distorsión de las señales sonoras llamada en la jerga técnica “acoplamiento”.