Ovnis Aparecen en Todos los Rincones del Planeta
02/04/2011

Artículo tomado de: http://www.cronica.com.py/articulo.php?ovnis-aparecen-en-todos-los-rincones-del-planeta&edicion=2&sec=1&art=4178

La última oleada de “platos voladores” comenzó el mismo día que ocurrió el movimiento sísmico con tsunami en el Japón. Oficialmente, sólo hay silencio.

Una vez más los avistamientos saltan al tapete. La gran pregunta que queda en el aire ya no es si son reales o no, sino cuál es el origen de estos objetos que vuelan a velocidades y alturas inalcanzables para la tecnología humana. Y sobre todo, ¿qué buscan? Pero lo cierto y lo concreto es que ahí están. Acaparando la atención mundial. Casualmente, en forma masiva y en varios puntos del mundo después de una serie de terremotos y movimientos.

La última oleada de avistamientos arrancó el pasado 11 de marzo, cuando un terrible terremoto y un devastador tsunami le dieron un feroz golpe de karate al Japón. Una de las filmaciones más intrigantes captó el preciso momento en que, de las embravecidas olas que golpeaban la costa Noreste de ese país, repentinamente, un objeto volador emergió de las aguas, realizó un sobrevuelo rasante sobre el campo y luego desapareció del foco de la cámara.

La citada filmación fue captada por la NHK, la televisión estatal japonesa y hasta hoy solo los aficionados al fenómeno Ovni se ocuparon de discutir al respecto, ya que los pobres japoneses todavía no se recuperan de la catástrofe sufrida.

Avistamientos. Además del mencionado en el día del terremoto en el Japón, hubo avistamientos en lugares tan distintos como el propio Japón (Fukushima, 16 de marzo), Perú (Cusco, 18 de marzo), Estados Unidos (Kansas, Lafayete, 21 de marzo), Inglaterra (Londres, 24 de marzo), Noruega (Oslo, 24 de marzo), Australia (30 de marzo, Melbourne) y hasta en la Argentina (Colonia Dora, Santiago del Estero, 31 de marzo).

Como no hay agencias estatales que hablen oficialmente del tema, los avistamientos caen directamente bajo la etiqueta de rumores, chismes o bolaterapias. Sin embargo, a pesar de todo, no se puede negar que en estos últimos días se sucedieron una verdadera ola de “platos voladores”.

Shhh. Mientras gran parte de los fanáticos de Ovnis (Objetos Voladores No Identificados) sostiene que los “platos voladores” son visitantes del espacio exterior, otro sector señala que se podría tratar de máquinas voladoras de las propias potencias.

El interés del público choca siempre contra el más absoluto silencio de las agencias gubernamentales de los países con capacidad espacial, como Estados Unidos, Rusia o los europeos cuando son divulgadas filmaciones mostrando los avistamientos de los Ovnis. Inclusive, los aficionados al fenómeno son ridiculizados cuando exhiben las “pruebas” de los avistamientos.

Por otro lado, no se puede negar que con la tecnología disponible para captar imágenes, coincidencia o no, siempre después de un terremoto catastrófico, los “platos voladores” son filmados o fotografiados en lugares cercanos al lugar del hecho. Ya después se los ve por sitios remotos, aun cuando estos lugares se encuentren -unos respecto de otros-  al otro lado del mundo.

Teoría de la conspiración señala a proyecto secreto

Realmente no se puede negar la existencia de sistemas de armas que están en fase de pruebas

Otro aspecto de la discusión en torno a estos fenómenos, ahora ligados a catastróficos terremotos, señala que los Estados Unidos tendría una tecnología capaz de producir movimientos de tierra a voluntad. Inclusive, se levanta el dedo acusador y charlatán contra el proyecto HAARP, una iniciativa de los yanquis que hace experimentos con radiaciones dirigidas hacia partes elevadas de la atmósfera y que se encuentra en Alaska, algo que los rusos y el propio parlamento europeo denunciaron en su momento.
 
Interrogante

La pregunta ya no es si existen los Ovnis, sino ¿de dónde vienen y qué buscan?  ¿Los illuminati?

El medio tucumano El Diario 24.com publicó una nota citando las declaraciones del periodista canadiense Benjamín Fulford quien, a su vez, aseguró que “el ex ministro de Finanzas de Japón, Heizo Takenaka, le confió que si su país no se sometía a las exigencias de los “Illuminati” (una secta que busca dominar el mundo), estos los atacarían con una “máquina para hacer terremotos”. Estas versiones tienen amplia difusión en Internet, pero, lógicamente, no pueden ser comprobadas.