Relación entre dientes y emociones
La relación entre dientes y emociones ha estado observada desde la Antigüedad y en este artículo os mostramos la relación que existe con todos ellos.
Los dientes nos hablan, cuando están enfermos, de nuestros miedos y emociones no digeridas o trascendidas.
Esta vida es una escuela donde venimos a aprender que somos perfectos y nada nos falta. Como dicen los grandes sabios, somos el Alma, eterna paz y amor.
Pero en este aprendizaje lleno de movimiento y vivencias nos pasan cosas que nos despiertan emociones escondidas y que, a veces, no somos capaces de procesar. Es entonces cuando nuestro cuerpo se expresa y nos habla.
Nuestros dientes, siendo parte de nuestro cuerpo nos hablan y nos dicen qué está pasando y qué guardamos estancado en nuestro campo emocional. A continuación veremos la relación entre dientes y emociones, por grupos de piezas.
Los incisivos
Los incisivos nos hablan de nuestra relación con nuestros padres, y los sentimientos de supervivencia y necesidad de ser amados. De nuestra sexualidad con la pareja y nuestra capacidad de amar a los demás como “padres y madres” universales, aceptando nuestra parte femenina como nuestra parte masculina.
Los caninos
El canino está relacionado con nuestros deseos de poseer, así como nuestros deseos sexuales. Dentro de la relación entre dientes y emociones, los caninos enfermos nos hablan de que la persona puede estar sufriendo sensación de escasez: "¡necesito más!" Las infecciones en estos dientes se manifiestan en forma de ira y rabia, así como amargura por no poseer aquello que deseamos.
Premolares superiores
El primer premolar superior nos habla de nuestros deseos de “ser” en relación a los demás. Este premolar expresa el deseo individual de diferenciarnos de los demás. Cuando este diente está enfermo podría deberse a cambios en la vida que nos hacen sentir como que morimos, que una parte nuestra muere. Así, emociones como la tristeza y la melancolía son típicas de este diente.
El 2º premolar, en cambio nos habla de poner en acción ese “yo” y crear algo mío en el mundo. Cuando este diente está enfermo puede deberse a un sentimiento de frustración y desconfianza con uno mismo. “¿Estoy haciendo aquello para lo que estoy hecho?”
Premolares inferiores
Los premolares inferiores suelen ir relacionados con sentimientos de haber sido víctimas de injusticias en la vida.
Sentimientos como la desconfianza en el futuro, desilusión y descontento pueden ser algunas de las emociones expresadas.
Molares superiores
El 1er molar superior nos habla de nuestro deseo de crecer en la vida, de crear nuestra propia vida. Cuando este diente está débil las emociones de miedo o desconfianza en el futuro nos acechan. Suelen ser épocas que vivimos faltos de dicha, sin darnos tiempo para divertirnos y para el placer.
El 2º molar superior nos habla de cómo nuestros deseos son recibidos por nuestro entorno y relaciones. Está relacionado con las emociones de ilusión o desilusión, desapego y codicia.
Molares inferiores
El 1er molar inferior está relacionado con nuestro apego al pasado y a las experiencias vividas. La emoción resultante es la melancolía.
El 2º molar inferior nos habla de la flexibilidad que necesitamos al enfrentar los golpes de la vida. Así, un 2º molar débil nos hablará de emociones relacionadas con la humildad y la capacidad de reajustarse ante nuevas situaciones.
Infecciones o problemas en estos molares denotan problemas en el manejo de nuestras relaciones. Dentro de la relación entre dientes y emociones estas piezas son también un caso muy a tener en cuenta.
Cordales o muelas del juicio
Las muelas del juicio son las muelas que nos hablan de nuestro destino. Recogen todos nuestros deseos y nos muestran si realmente andamos en la dirección correcta.
Las emociones que suelen manifestarse cuando existe alguna patología en estos molares son el enojo y la infelicidad, con un sentimiento de que todo va demasiado deprisa y no siempre en la dirección que nuestro corazón anhela. La persona suele sentir que es incapaz de encontrar su identidad en este mundo.
Espero que este breve artículo les haya ayudado un poco a ver la relación entre dientes y emociones.