¿Qué es?
Un absceso cerebral es una colección de pus dentro del tejido cerebral, causada por una bacteria o infección por hongos. Un absceso cerebral puede desarrollarse como una complicación de una infección, traumatismo o cirugía. Son poco frecuentes, aunque las personas con sistemas inmunológicos débiles (como personas con VIH o aquellos que han recibido un trasplante de órganos) son más propensos a sufrir de abscesos cerebrales.
Este tipo de infección generalmente comienza de una de estas maneras:
Se disemina desde un lugar cercano, como una infección del oído medio, infección de los senos para nasales o absceso dental.
La sangre que transporta la infección desde algún lugar del cuerpo hacia el cerebro.
Los organismos infecciosos entran al cerebro desde una lesión penetrante, como una herida de bala o una intervención neuroquirúrgica o traumatismo facial.
Síntomas
Los síntomas varían según el tipo y la ubicación de los abscesos. Más del 75% de las personas con abscesos de cerebro tienen dolor de cabeza. Este es el único síntoma es muchas personas.
El dolor generalmente se ubica del lado del cerebro donde está el absceso y el dolor por lo general empeora hasta que se trata el absceso.
Las aspirinas y otros medicamentos no alivian el dolor.
Alrededor de la mitad de las personas con absceso cerebral tiene fiebre. Otros síntomas pueden incluir nauseas y vómitos, rigidez en el cuello, convulsiones y cambios en la personalidad y debilidad muscular de un lado del cuerpo.
Diagnóstico
Diagnosticar un absceso cerebral no es fácil porque los primeros síntomas son generales. Por ejemplo, el dolor de cabeza se origina por varias causas. Por está razón, el diagnóstico del absceso cerebral no aparece hasta semanas después de que se desarrollan los primeros síntomas. En algunos casos, las personas con abscesos cerebrales desarrollan convulsiones o cambios neurológicos, como debilidad muscular de un lado del cuerpo antes de que se diagnostique la enfermedad.
Si su médico está preocupado por su absceso cerebral, este le preguntará acerca de su historia clínica e historia de viajes para determinar su riego de contraer ciertas enfermedades. El médico también le preguntará si tiene cualquier síntoma de absceso cerebral. Si tiene, le preguntará cuando comenzaron, cómo progresaron y si ha tenido una infección reciente o cualquier tratamiento que predisponga la formación del absceso cerebral.
Para diagnosticar un absceso cerebral, usted necesitará un examen de diagnóstico, como una tomografía computada TC o imagen por resonancia magnética (IRM). El absceso aparecerá como una o dos manchas. Pueden analizar la sangre y otros líquidos para encontrar la fuente original de la infección. Si el diagnóstico sigue siendo incierto, un neurocirujano puede extirpar una porción del absceso cerebral con una aguja fina.
Duración
Un absceso cerebral puede crecer muy rápidamente, típicamente se forma por completo en cuestión de dos semanas. Su médico comenzará el tratamiento de inmediato luego de que usted tenga el diagnóstico. La pronta atención médica es la clave para el alivio de los síntomas más rápidamente y para minimizar el daño a su salud a largo plazo. El drenaje quirúrgico de los abscesos es a menudo también necesario.
Prevención
Algunos abscesos están relacionados con una higiene dental pobre o una infección compleja de los senos paranasales. Usted debería usar hilo dental a diario, cepillar sus dientes de manera adecuada y visitar a su dentista regularmente. Trate las infecciones de los senos paranasales con descongestivos. Si la infección no desaparece pronto, pregunte a su médico si necesita antibióticos.
Si su sistema inmunitario está debilitado por el VIH, usted probablemente desarrollará un absceso cerebral debido a muchas razones. Evite contraer VIH al no tener relaciones sexual o practique sexo seguro.
Tratamiento
El tratamiento de un absceso cerebral típicamente requiere un enfoque bien claro.
tratar la infección con antibióticos; si se conoce el tipo específico de la bacteria, se usa un antibiótico específico; de lo contrario, se recetan antibióticos de amplio espectro para matar un gran número de agentes de infección posibles. Los antibióticos deben tomarse durante un mínimo de seis a ocho semanas para asegurarse de que se elimine la infección.
Drenar o eliminar los abscesos; si se puede acceder fácilmente a ellos y hay poco riesgo de daño cerebral; el absceso puede eliminarse quirúrgicamente. En otros casos, se drena el absceso, cortándolo o insertando una aguja.
Para asegurar un tratamiento exitoso, usted será monitoreado mediante una imagen por resonancia magnética (IRM) o una tomografía computada (TC) para visualizar el cerebro y el absceso. Si tiene problemas de convulsión, quizá necesite anticonvulsivos, que pueden continuar aún hasta después de que el absceso se extirpe con éxito.
Cuándo llamar a un profesional
Visite a un médico si tiene un dolor de cabeza constante que empeora con el paso de los días o semanas. Si también tiene náuseas, vómitos, convulsiones, cambios en la personalidad o debilidad muscular, busque asistencia médica de inmediato.
Pronóstico
Sin tratamiento, un absceso pude ser mortal. La mayoría de los pacientes con un absceso cerebral se trata de inmediato. Desafortunadamente, son comunes los problemas neurológicos prolongados aún después de que se extirpa el absceso y la infección se trata. Por ejemplo, pueden existir problemas persistentes relacionados con el funcionamiento del cuerpo, cambios de personalidad o convulsiones debido a las cicatrices o a otros daños en el cerebro.