Acepto la abundancia de Dios que fluye en mí ahora.
Prosperidad
La tierra bíblica donde “fluye leche y miel” representa abundancia de todo bien y libertad espiritual para disfrutarlo. Representa una vida rebosante de bendiciones y de potencial divino.
La verdad es que vivo en una tierra donde “fluye leche y miel” aquí y ahora. Afirmo que en mi vida existe un fluir constante de bien. Mi prosperidad incluye la seguridad de que la salud, la sabiduría y la fortaleza son mías. Al reconocer esta verdad, mi espíritu cobra nuevo valor y entusiasmo.
Estoy consciente de que tengo el potencial divino para llevar la vida de mis sueños. Acepto la abundancia de Dios, la cual siempre fluye hacia mí y por medio de mí. Doy y recibo con gozo y gratitud.
“Nos trajo a este lugar y nos dio esta tierra, tierra que fluye leche y miel.”—Deuteronomio 26:9