Me dijeron
Y andaban por allá, cuentan que unos camellos.
Pausados, lentos, casi fatigados.
Contemplando sólo su aquel lejano cielo.
Saturados, dicen, de regalos.
Y cerca de ellos, la gente les seguía.
Hablando de entre si, llenos de gozo.
Venían de muy lejos, días tras días,
con sus andares cortos, como rotos.
Y al fin, allá lejos, una luz
amaneció de pronto, reluciente,
era el Niño Dios, era Jesús
que nacía, cuentan, que por Oriente.
AUTOR DESCONOCIDO
ADORNOS PEDRO LUIS DANSO
PEDROLUIS76@HOTMAIL.COM
F I R M A D O