Menos mal que ya te he visto, amigo Juanito,
pues me estaba empezando a preocupar,
ya que tu santoral hoy no ha salido,
a la misma hora a que nos traes acostumbrados.
Menos mal que ya te he visto, amigo Juanito,
pues cierto es que una nueva vida comienzo,
y sin tu presencia tan grata y cotidiana,
empezaba a preocuparme por mi amigo.
Ahora que ya has aparecido amigo mío,
sólo te deseo que te cuides mucho,
que la vida es una belleza contigo,
y contigo, voy caminando despacito.
Con cariño, Rosa.