LA LIBERTAD
Las cadenas de la esclavitud solamente atan las manos:
es la mente lo que hace al hombre libre o esclavo.
El hombre nace libre, responsable y sin excusas.
No pido riquezas, ni esperanzas, ni amor, ni un amigo que me
comprenda; todo lo que pido es el cielo sobre mí y
un camino a mis pies.
La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a
los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse
los tesoros que encierran la tierra y el mar: por la libertad,
así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida.
La libertad es incompatible con el amor. Un amante es
siempre un esclavo.
La libertad de amar no es menos sagrada que la libertad de
pensar. Lo que hoy se llama adulterio, antaño
se llamó herejía.
Quienes son capaces de renunciar a la libertad esencial a
cambio de una pequeña seguridad transitoria, no son merecedores
ni de la libertad ni de la seguridad.
La libertad no tiene su valor en sí misma: hay que apreciarla
por las cosas que con ella se consiguen.
*Fondo por Vainica*
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