Del latín Domínicus, derivado de Dóminus, El Señor. Es un nombre que al igual que el respectivo día de la semana, significa "propio del Señor", "dedicado al Señor". Al igual que los demás nombres recuerdan la memoria de algún santo, el nombre de Domingo quiere recordar directamente a Dios.
Santo Domingo, llamado también Ciudad Trujillo, capital de la República Dominicana, es el más importante de una larga serie de lugares geográficos dedicados a Santo Domingo.