Yo quería encender tus ojos,
abrir el brillo de la hoguera,
ser refugio de primavera,
aprender de tus consejos,
y levantar el ánimo que se aleja.
Yo quería ser fragancia y destello,
el fin del día sin malos recuerdos,
el fruto de algún destino,
tal vez tu amor y el mío juntos,
caminando a un paso en un mismo rumbo.
Yo quería ser estrella y no amargura,
sentir tus brazos junto a los míos,
saborear con esmero la madrugada,
despertar junto a tu cuerpo con esperanza,
y no dejar nunca el placer de una nueva mañana.
Pero... tan sólo soy oscuridad y no belleza,
tan sólo mi mano busca con ardor tu mirada,
tan sólo soy una simple y llana palabra,
que dentro aloja en ella amor sin dejar rastro ni huella,
mas no soy mas que una vela que se apaga,
dejando sin rastro su tristeza y su mañana.
Autora: Rosa Mª Villalta Ballester