Te tengo que decir Gladiolos,
que defectos tenemos todos,
y que en la lucha por superarlos,
nos engrandecemos y errores superamos.
Te tengo que decir Gladiolos,
que para mí eres un espléndida mujer,
que abres las puertas de tu compañía,
con todo cariño y con todo tu querer.
Te tengo que decir Gladiolos,
que no te he visto llorar, no;
y me gustaría, si ese momento llega,
que mi hombro te sirviera de seguridad.
Te tengo que decir Gladiolos,
que a mí si me has ayudado,
con tu confianza y tu amistad sinceras,
con tu compañía, con tu alegría inmensas.
Te tengo que decir Gladiolos,
que te considero una gran mujer,
que no dejes de ser quien eres y luches,
pues tienes gran valía y mucho querer.
Besos. Rosa.