A LA SOMBRA DEL ÁNGEL - la casa del gnomo madrid

A LA SOMBRA DEL ÁNGEL

Hoy cruzo mi palabra con las sombras adormecidas del encanto
en las luces escasas. Soy la efímera repetición de un nombre tardío
invocado por seres rebeldes en la dimensión desconocida de mi alma.
Hoy soy el verbo desnudo y la cruz sobre la espalda de la soledad,
la puerta abierta a los signos de la noche, el fantasma que te busca
para besar tus alas cansadas.

He poblado los mares donde el tiempo se deshace en el corazón
de las rocas fuertes, palpé la orilla de la ternura cuando asomó la tormenta
y el naufragio fue un pretexto para que acudieras en mi auxilio.

Así recé por tus labios aventureros que esconden en sus bordes
los misterios blancos de la luna, así comulgué en silencio cuando
la esencia de tu perfume, clamó junto a los vientos al sur de mi pecho.

Ángel rebelde, aparición descontrolada entre la espuma:
¿Dónde descansas tus alas cuando te antojas de venir a sucumbir bajo mis huesos?

Te he esperado, paciente con mis islas y tu ausencia, marcando signos
en las escamas doradas de los peces muertos .Quiero un instante frente a tus ojos,
robarme la distancia que ronda en la brisa y edificar un reflejo que sea suplica
al final de mis manos temblorosas.

Te propongo un encuentro entre mi lengua y la cruz que oscila en tu vientre,
soy el monje de las horas que elijas, el altar adornado a tus antojos,
el asta de carne donde te ancles y flotes como bandera.

Desordéname entre tus muslos de fuego eterno, ángel sin piedad
que arrastras la lujuria desde los centros de los bosques prohibidos,
déjame duende sin vestimentas, no controles tu rabia lívida, vaga en mi piel
como los insectos hambrientos, devora la demencia en los quejidos
incontrolables de mi cintura.

Yo, seré la calma después de tu llegada al olimpo,
un fósil desenterrado, en la entrada desquiciante
de la caverna de tus delirios.