Empiezo a conocerme ahora, precisamente ahora, que no contaba con vivir.
Empiezo a sentirme ahora, precisamente ahora, que no conocía su sentir.
Empiezo a confiar ahora, precisamente ahora, que no sabía ya existir.
Empiezo a querer ahora, aunque mi corazón, siempre quiso de por sí.
Ya no sé quién soy, pues todas mis estructuras han sido derrumbadas,
ni sé tan siquiera a qué puerto deseo con certeza arribar,
sé que mi corazón late y que mi cuerpo siente y que yo necesito amar.
Ya no sé con certeza si deseo amar o ser amada, si flaqueo o es mi resurgir,
ni sé tan siquiera cuál es mi destino ni porqué este mi pensar,
sé que mi alma siente vida y que yo ... pequeña ante ella, no dejo de mirar.
Empiezo sí una nueva vida, aunque no sepa sus primeros pasos seguir.
Empiezo a ver colores diferentes, cuando el negro y el gris eran su decir.
Empiezo a cambiar si es que puedo, aunque el cambio suponga resistir.
Ya no sé si el deseo es lo que me mueve o el temor a quedarme en el sufrir,
ni sé tan siquiera si es la forma o el fondo lo que mueve mi alma a salir,
sé que es la vida quien me llama y yo, ... apagada ante ella, tengo un fin.
Ya no sé si es el miedo o la incertidumbre lo que me mueve el vuelo alzar,
ni tan siquiera si es la fantasía y no la realidad lo que me lleva a volar,
sé que ahora, en mi existencia, algo fuerte e intenso ha de salir sin cesar.
Empiezo a ver unas alas que, cortadas, quiero de nuevo volver a utilizar.
Empiezo a creer, a esperar, a pensar que la vida está para poderla realizar.
Empiezo sí, a necesitar, a anhelar, a fantasear quizás, para no volver a atrás.
Autora: Rosa Mª Villalta Ballester