Desesperados los que sin dinero están,
aquéllos que ni rayo de amor encontrar,
aquéllos cuyo camino oscuridad hallar,
aquéllos que sin maldad tan solo dañar.
Desesperados los que vacío su corazón,
los que no dejan de escuchar palabras,
sin que ninguna sea ni acto ni veracidad;
los que sin saber tan siquiera el porqué,
se hallan aislados sin sentir humanidad.
Desesperados los que sobrevivir, existir;
los que no entienden lo de la amistad,
palabra que es tesoro si es todo sentir;
los que todo pierden por su fragilidad,
sin que se entienda cuál será su devenir;
los que el silencio es toda la fidelidad,
pues a nadie tienen con quien departir.
Desesperados los que sin ilusión pierden,
aquéllos que ni ánimo ni amor les mueve,
aquéllos que tan solo la soledad llueve,
aquéllos que, con voluntad, jamás vencen.
Autora: Rosa Mª Villalta Ballester