MIS NAVIDADES
Quizás sea alguien raro, pero ahora no siento nada especial por ser Navidad. Siento nacer día a día, agradecer que estoy despierta y con vida, sentir el sol que me acaricia, …, pero sinceramente no siento nada especial estos días.
No acabo de entender porqué sólo las buenas intenciones, incluso los nuevos retos se hacen ahora, porqué los buenos deseos, las buenas intenciones surgen tan solo estos días.
Me considero tal vez rara, extraña, distinta. Tal vez sea porque cuando la gente está en verano disfrutando de las vacaciones estivales, yo, entonces, recuerde las frías navidades. Quizás sea por mi falta de creencia o fe o tal vez por su presencia, considero que las buenas intenciones, la buena navidad, la verdadera navidad, se da en cada uno de los días del año.
No comprendo tanta compra, tanta comida por ser Navidad como si los demás días del año no fuese necesario un buen plato de comida, como si el banco de alimentos solo fuera necesario durante estos días.
No, no lo comprendo ni lo comprenderé. Todo el mundo se regocija en dar las Felices Fiestas, Próspero Año Nuevo; sin embargo, en el tercer o cuarto día del año, desaparece toda buena intención.
Una nueva navidad nace del corazón diariamente, independientemente del mes y día del año.
Creo en la constancia de intenciones, en la voluntad de continuación y no en frases preciosas que ninguna verdad llevan.
¡Ojalá que la navidad se celebre no tan solo en diciembre sino en cada día del año y sin tanta comercialización ni gasto añadido!
¡Que sean todos muy felices!, es algo que deseo siempre de corazón y con constancia aunque no esté en cada uno de sus hogares, aunque no esté físicamente a su lado.
Abrazos.