Es tiempo de aceptar las derrotas,
de seguir viviendo y rechazar negación;
es tiempo de aumentar ilusiones, esperanzas,
es tiempo de cantar una humilde y simple canción.
Es tiempo de curar todo tipo de heridas,
de sanar la mente y caminar hacia la relación;
es tiempo de realizar nuevos proyectos, ideas,
es tiempo de notar el corazón lleno de vibración.
Es tiempo de corregir amargas huellas,
de hallar la paz y buscar siempre el amor;
es tiempo de sembrar semillas que dejen belleza,
es tiempo de olvidar aquello que no deja crecer la ilusión.
Es tiempo de creer, de soñar, de vagar en un sueño,
de sentir que el corazón palpita para encontrar calor;
es tiempo de dar pasos hacia delante que abran senda,
es tiempo de tratar de alcanzar la fe y la delicadeza.
Es tiempo de no tener miedo al presente, de luchar,
de saber que hasta el último día todo es vida y nada más;
es tiempo de crear una nueva forma de pensar,
un nuevo nido, una nueva casa, un nuevo hogar.
Es tiempo de acceder a vivencias no realizadas,
de aprender de los errores y volver a empezar;
es tiempo, sí, aunque cueste, aunque sea difícil,
pero es tiempo para no perder ninguna oportunidad.
Es tiempo de desmontar un puzzle y comenzarlo,
desmontar aquello que nos hizo algún día mal;
es tiempo sí, es tiempo de vivir y no llorar,
pues tu sonrisa y la mía harán que el sol pueda brillar.
Autora: Rosa Mª Villalta Ballester