Uno de los grandes problemas psicológicos de la actualidad es la soledad.
¡Cuántas personas actualmente sufren de soledad! Dios no creó al hombre para que viviera en soledad, al contrario: le dió una mujer para que fuera su compañera.
La soledad es una condición que da lugar a sentimientos, no solamente sentimientos de deseo por estar acompañados, sino también por sentirse rechazados y no queridos.
Este problema (la soledad) no es algo que podamoms ignorar, pues son muchas las personas que declaran sentirse solas. Entre las personas que se sienten solas podemos encontrar viudas o viudos, personas de avanzada edad que no se han realizado en la vida o no han alcanzado su meta en la vida y por eso se sienten solos y defraudados, quizás porque no han encontrado su ayuda idónea. Otras personas se sienten solas y tristes porque no las escuchan, piensan que se les ignora, y eso hace que se sientan rezagadas. También hay personas que se encuentran lejos de su país y de su familia, y eso hace que sientan soledad porque no tienen a los suyos a su lado. En definitiva, por diferentes y variados motivos hay muchas personas que dicen sentirse solas y la mayoría de estas personas son mujeres.
La soledad no hace acepción de personas, y muchas inclusive han perdido la salud mental a causa de ella. Debemos tener mucho cuidado con este sentimiento ya que por pensar o creerse que están solos son muchas las personas que buscan refugio en el alcohol o las drogas, cayendo así en el alcoholismo o la drogadicción y muchos acaban encontrando la muerte.
Pero por qué sentirnos solas o solos cuando tenemos en nuestras manos la solución:
La Biblia dice en Daniel 3:25 que cuando los jóvenes hebreos fueron arrojados en el fuego ardiente no estaban solos; con ellos estaba un varón con aspecto del Hijo de Dios. Elías cuando creía estar sólo en la cueva, vio a Dios acercándosele y hablándole de un modo apacible y delicado. En la Biblia podemos ver que ninguno de los hombres que caminaron con Dios estuvieron solos.
Según el diccionario, la palabra soledad es: falta de compañía, lugar desierto, falta de quién nos tenga cariño.
Pero amiga o amigo que lees esta reflexión, te diré que si te acercas a Dios, si buscas de él nunca más te sentirás soledad, porque así lo prometió Dios. A través de la Biblia podemos leer esas promesas, las cuáles bendicen nuestra vida. En Génesis 28:15 leemos: "He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que fueres, y volveré a traerte a esta tierra; porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho"; y en Isaías 43:4: "Porque a mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable y yo te amé." Son muchas las promesas de Dios para nuestras vidas pero tenemos que buscarlas en la Biblia y apropiarnos de ellas.
El hombre y la mujer fueron hechos por Dios y para Dios, y sin él estarán solos. Pero hoy Jesús está llamando a la puerta de tu corazón y te dice: Deseo entrar, ¿me permites? Si le dejas, él entrará para siempre, y nunca más sentirás soledad.