Nuestra Señora de los Dolores es la más universal de las advocaciones de la Virgen, pues no está vinculada a una aparición o a una imagen, sino que arranca del mismo Evangelio, que nos presenta a María al pie de la cruz: Estaban junto a la cruz de Jesús su madre y la hermana de su madre, María, mujer de Cleofás, y María Magdalena (de aquí viene la expresión de "las tres Marías"). Al ver Jesús a su madre, y a su vera al discípulo que más amaba (Juan), dijo dirigiéndose a su madre: "Mujer, aquí tienes a tu hijo". Y después, dirigiéndose al discípulo, dijo: "aquí tienes a tu madre". Y desde entonces el discípulo la tuvo en su casa." (Juan 19 25-27).
Sonrisa
|