Cristianismo - LOS DISCIPULOS DE YAHSHUA DE NAZARET

Deuteronomio XXXII, 21: "Ellos me movieron a celos con lo que no es Dios; me provocaron a ira con sus ídolos; Yo también los moveré a celos con pueblo que no es pueblo, los provocaré a ira con una nación insensata".
Apoyo la creencia que el monoteísmo es la misión de Israel.
Para cualquier lector del Tanaj, son evidentes todos los genocidios provocados por los celos de Yahveh Dios y su culto exclusivo. Celos provocados por la idolatría del pueblo de Israel.
Esa idolatría no es otra cosa que el politeísmo o monolatría del pueblo.
Politeísmo, pues como narran los libros históricos (Torah, Josué, Jueces, Samuel, Reyes) y Profetas (Nebbim), el pueblo no solo admitía la existencia de su dios Yahveh, además también la existencia de los dioses de las otras naciones.
Monolatría, pues en ocasiones, aunque admitía la existencia de otros dioses, consideraba y admitía como superior al dios de sus padres, Yahveh.
Este politeísmo, esta monolatría, es la idolatría que fue denunciada y lamentada por Moisés y los profetas.
Este politeísmo, este henoteísmo, es la idolatría que fue siempre lamentada y severamente castigada por la ira de Yahveh.
Moisés y los profetas predicaron celosamente el culto exclusivo a Yahveh Dios, y atestiguaron la manifestación de la ira de Yahveh sobre los idólatras.
Esa idolatría, ese politeísmo tiene sentido social: el pueblo de Israel surgido en Egipto olvidó o desconocía la existencia del Dios de sus padres: Abraham, Isaac y Jacob. Y fue mediante Moisés que el pueblo re-conoció su Dios y su Nombre. Sin embargo acostumbrados por largos siglos al politeísmo la inercia causó siglos de decaídas.
Moisés y los profetas siempre pregonaron monoteísmo, el pueblo fue el que tambaleaba entre el burdo politeísmo y el henoteísmo, donde admitía la existencia de los dioses extranjeros pero aceptaba la superioridad del suyo.
Al principio el vengativo Yahveh asesinaba, siglos después como profetiza Dt XXXI, 18; Yahveh ocultó su rostro por la persistente idolatría. Ya no más matanzas, sino un claro espaldazo.
Muchos siglos después de los profetas y las matanzas, fue que en general el pueblo rechazó la monolatría asimilando completamente el monoteísmo. Les dolió perder su Vengador y Protector por excelencia.
Más precisamente desde la repatriación desde Babilonia y más exactamente desde el helenismo, que el remante del pueblo, Judá y los exiliados que admitieron completamente el monoteísmo en sus vidas.
Es curioso pero más lógico, que desde la implementación de la Sinagoga, desde que la religión se hizo secular o polpular, con la lectura de un canon ya establecido, que el pueblo se despojó completamente del politeísmo naciendo a partir de entonces el judaísmo.
El judaísmo no es otra cosa que la materialización del monoteísmo en el (resto) pueblo hebreo.
¿Coincidencia? Yahveh enmudece, oculta su rostro, ya no más asesinatos y despojos, solo enmudece; sus profetas ya no existen más; y es entonces que el pueblo se adhiere absolutamente al monoteísmo.
Peor, no solo enmudece, los deja solos, son apaleados por los babilonios, después por los macedonios y finalmente por los romanos, hasta que son expulsados de su "tierra prometida"; al exilio, la llamada "segunda diáspora".
Lo peor de lo peor, de lo peor; el espaldarazo se completó: así como los padres ignoraron a Yahveh con lo que no-es-Dios (idolatría), los hijos ahora son ignorados con un pueblo que no-es-pueblo. Y que nace la Iglesia, el cristianismo.
Religión que presume ser "pueblo", el "nuevo pueblo de Dios (Yahveh)". Pueblo que le ha robado identidad a Israel como los ídolos le robaron identidad a Yahveh Dios.
Los judíos no ha hecho otra cosa que rechinar sus dientes, ante tal despojo, espaldarazo, y más progromos.
Pues el cristianismo, la Iglesia, es un pueblo espiritual, no material, que ha "sustituido" al histórico Israel.
El kerygma parecía no querer despegarse del judaísmo, pues seguían asistiendo al Templo y la sinagoga.
Muchos no dudan, incluyendo su servidor, de un desdén que marcó el futuro cristianismo y judaísmo: desdén entre los discípulos de Pablo y los de Jacobo "el hermano del Señor". Entre la iglesia gentil y la iglesia judía.
Jacobo el Justo parece haber sido el moreh de la iglesia o sinagoga de Jerusalén. Quien aparentemente favorecía las obras sobre la fe, a diferencia de Pablo.
"Cristiano" (Hch XI, 26) surge aparentemente como término despectivo hacia los gentiles creyentes. Como ahora, máxime el católico, usa el término "aleluyo". Que después se tornó a una acepción un tanto orgullosa.
El "cristiano" parecía identificar solo al creyente gentil, pero con la diáspora terminó por absorver a todos los discípulos de Jesús.
Diáspora que independientemente castigaba al pueblo de Israel (judíos), perjudicó y transformó las congregaciones fieles a Jesús en lo que hoy es en día.
Al caer Jerusalén cae consigo la iglesia judía, que termina por asimilarse a las congregaciones gentiles.
La destrucción de Jerusalén y con ella la iglesia judía, impidió que fuera asimilada por los judíos y los partidos religiosos como otra forma de judaísmo.
Ebionitas y nazarenos, perduraron varios siglos como judíos fieles a Jesús de Nazaret como Mesías, o al menos como profeta.
Pero el judaísmo que prevaleció por lógicas razones históricas, el fariseo, (al morir el Templo murió el saduceísmo; los esenios fueron exterminados en las guerras judías; parece que el remanente esenio se adherió a la sinagoga y a la iglesia), no congenió con la nueva secta, no solo no la admitió dentro de la oficialidad, peor aún la condenó a la blasfemia eterna.
Y por el lado gentil tampoco le fue muy bien a esa seudosecta judía, ese "pueblo", historiadores y pensadores gentiles como Tácito, Suetonio, Porfirio, catalogan al cristianismo como una superstición abominable.
Soy de los que apuesta que si el cristianismo, como sincretismo judío-gentil, no hubiera recibido la manita de gato que le dió Saulo de Tarso, no hubiera sobrevivido en en el imperio romano.
Pablo es el segundo mesías del "pueblo", de la iglesia. Pues la dimensionó hasta convertirla en la religión más grande del mundo.
El cristianismo como sincretismo judío-gentil, y no como partido religioso judío, patenta su naturaleza espuria en su divisionismo. El judaísmo está dividido, pero la división del cristianismo es abominable; más de 10 mil sectas!!!!
Esto es el cristianismo, pueblo espiritual o seudopueblo que vino a usurpar el lugar de Israel. Como Israel usurpó el lugar de Yahveh con dioses falsos.