CRISTIANO POR LA GRACIA DE DIOS - LOS DISCIPULOS DE YAHSHUA DE NAZARET

Así dice El Señor:
Maldito quien se fía del hombre, y hace de la carne su apoyo. (Jeremías 17:5)

He comenzado este comentario, con las palabras dichas por Dios al profeta Jeremías, debido a un listado que pude ver en un foro que se hace llamar: Librepensador sin censura, en el cual, un tal "Temisto", me incluye como un seguidor de nuestro hermano y amigo Tito Martínez. Existe un aforismo el cual reza: El ladrón juzga por su condición. Ese Temisto, parece ser que ha sido o es seguidor de algún "pastor", "maestro o gurú espiritual", y no ha captado o acatado la revelación que Dios le dio al profeta Jeremías, que nuestra confianza no debe estar apoyada en hombres carnales. Entonces, viene con su mente e inteligencia corrompida a etiquetarnos como Titianos. Solamente un obtuso de mente, desconocedor de Las Santas Escrituras, sigue a un dirigente religioso o filósofo y a sus doctrinas o dogmas. Mi gran y único Pastor es Jesús el Cristo. Del único Tito que yo me guío, fue del consejo que el apóstol Pablo le dio a Tito, en su epístola titulada con ese nombre el cual le dice: Mas tú enseña lo que es conforme a la sana doctrina. (Tito 2:1)
Una exhortación a Temisto (Si es cristiano) y a todos los foristas, prediquen a Cristo sin contiendas, pongamos en práctica sus mandamientos y preceptos hasta su gloriosa y bienaventurada manifestación, porque los tiempos no están para estarnos injuriando unos a otros (trato de no hacerlo).

Gracia y paz en Jesús el Cristo.

Jesucristo no es, no fue y jamás será cristiano.

Pagan justos por pecadores. No dejan de existir ejemplares cristianos.

¿Por qué no soy cristiano? Por 2 razones:

Por hipócritas. "El árbol por sus frutos se conoce", y la historia del cristianismo patenta un gusto enfermizo por el divisionismo y cazería de brujas. Contrariando sus creencias y mandatos de su piadoso maestro. Hasta parece que Jesús les hubiera mandado: "ódiense los unos a los otros como yo los he odiado". "En esto se reconocerán mis discípulos, en que se odian los unos a los otros". Mc III, 24 autodestrucción y gasmoñería es su naturaleza. Y en la vida contidiana, no predican lo que según profesan, inclumpiendo los mandatos judeocristianos: no aman a su prójimo, lo detestan por no simpatizar con sus creencias; mienten, hurtan, codician, adulteran, lo que los lleva no solo a deshonrar a sus padres, peor aún, deslindar a Dios en su vida, pues el que lo ama, cumple sus mandamientos.

Por falaces. Jesús no es un ángel, ni mucho menos Dios. De acuerdo al punto anterior, no necesito levantar ni un dedo, ellos mismos hacen el trabajo sucio contradiciéndose y desmintiéndose así mismos. Y peor, no conformes con su fratricidio, están sitiados por la milicia islámica, judaica, académica, etc.

Jesús no nació un 25 de diciembre, ni 7 de enero; ni mucho menos de una virgen.

No hay ninguna evidencia histórica que apoye estas fechas. Por el contrario...

Sabemos que Dionisos, Atis, Adonis, Mithras (Sol Invictus), y Osiris, principalmente, son la advocación de un hombre-dios que nació de una virgen, natalicio festejado cada 25 de diciembre.

La concepción y natalicio de Jesús recogidos por Lucas en sus 2 primeros cápítulos, son de dudosa procedencia: 1) Según Mc III, 20-21 y Jn VII, 2-5, Lucas no pudo haber usado como sus fuentes a los "hermanos" de Jesús, pues ni creían en él y hasta lo tacharon de loco. 2) María, José, Isabel y Juan Bautista murieron antes de la conversión de Lucas al cristianismo, al menos antes de aparecer en escena según los Hechos XX, 13. ¿Quién pudo entonces ser su fuente, y más aún confiable?

Los cristianos están mal acostumbrados a creer y hasta ver evidente, que el dios hebreo del cielo es el Dios-natural. Y que los atributos del Dios-natural son los esgrimidos en la Biblia. Minimizando el valor de los hagiógrafos no judeo-cristianos, los Veda, Upanisads... en el brahamanismo; Zend Avesta en los parsis, etc.

Antes de admitir esta supuesta identidad (entre el dios revelado y el Dios natural), el culterano cristiano debe demostrar la naturaleza monoteísta y existencia de Dios en una teología objetiva sin textos sagrados; e inmediatamente demostrar que el Dios natural corresponde, o es el dios hebreo, y no el dios brahamánico, mazdá, sintoísta, etc.

Estudiosos y carismáticos cristianos no católicos, creen que con su exégesis bíblica e histórica, colapsarán la iglesia católica. Jaaa no frieguen!! Una institución así, necesita mucho más que estudios bíblicos e históricos personales para abolirla. Quizá la adición sinérgica de todos esos estudiosos logre hacerlo, conforme los puntos anteriores.

Es ingenuidad manifiesta creer que un teólogo católico es ignaro o estúpido, serán arrogantes paridos por Zeus, pero no tontos.

La Historia muestra que estadísticamente quien ha golpeado con más fuerza a la iglesia católica, es un mismo católico (Hus, Wiclef, Lutero, Calvino, Enrique VIII, Jansen).

Y lo más inquietante y hasta gracioso, es que al momento de argumentar, el cristiano cree sin titubear que el opositor admite la validez de sus textos sagrados. Antes de discutir o dialogar con un no-cristiano, debería convenir qué textos son válidos en la argumentación y por qué. Tan simple que los apóstoles y el cristianismo primigenio NO usaron el NT para fundamentar su fe. Si Pablo no usó sus cartas ni mucho menos el evangelio según Juan en las sinagogas para disertar, ¿por qué los cristianos se aferran absurda y tautológicamente al NT?

El cristianismo es tan complicado que los mismos creyentes han escrito más de un millar de obras para poder explicarlo. Algo que evidencia su escaza solidez y confusa naturaleza.

Demostrando así, que más que pretender seguir al buen Jesús, se inclinan más por el culteranismo, los debates teológicos y las fiestas.

El cristianismo se autodestruye y descalifica así mismo, que sarcásticamente sorprenderá que no hay 2 mil millones de cristianos en el mundo como se creé, para cada iglesia solo puede haber solo un-cristianismo-verdadero, pues son mutuamente excluyentes, el resto de comunidades son doctrinas diabólicas. En consecuencia y para nuestra sorpresa burlona, o no hay cristianismo, o solo son unos cuantos.