|
General: LAS TRES PRINCIPALES RESURRECCIONES
Elegir otro panel de mensajes |
|
LAS TRES PRINCIPALES RESURRECCIONES
¿Sabe usted lo que ocurrirá después que Usted muera? Muchas personas se preguntan esto y no saben responder conforme a la Torah. Veamos que realmente revela.
Cada cultura y religión de todos los tiempos ha ideado sus propias respuestas a esta y similares interrogantes. Los ritos tradicionales de sepultura a menudo han reflejado los conceptos sobre una vida en "el más allá" que han imperado en las diferentes culturas y sociedades.
Por ejemplo, los antiguos egipcios veían el más allá como una simple y lógica prolongación de su existencia corporal terrenal. Prestaban gran atención para preservar el cuerpo y sepultarlo junto con todo lo que---a su opinión--- pudiera serle útil en el otro mundo. Sus costumbre fúnebres, incluidas las pirámides (quizá los monumentos más grandes jamás construídos a los muertos) reflejan la convicción de que la existencia personal continúa después de la muerte.
En cambio, los budistas tradicionalmente creman a sus difuntos. Prevén no una vida del más allá sino una serie de renacimientos hasta alcanzar el nirvana, o sea la condición en que la conciencia individual deja de ser y se reabsorbe en el “alma universal”. La cremación ilustra su concepto de que el alma se va transfiriendo por cuerpos innumerables (re-encarnación continua) sin que estos cuerpos tengan importancia alguna para aquella.
Las costumbres hebreas reveladas en la Torah indican un concepto muy distinto de la vida después de la muerte. Tomando literalmente la afirmación de Yhwh Elojim a Adán: "Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás" (Génesis 3:19), los hebreos tradicionalmente sepultaban a sus muertos sencilla y rápidamente y dejaban que se produjera la descomposición natural. Según la Palabra de Yhwh, la esperanza de los muertos no es que se libere un alma aprisionada ni que se preserve el cuerpo. Job hizo una pregunta retórica: "Si el hombre muriere, ¿volverá a vivir?" (Job 14:14), sabiendo que un día, Yhwh llamaría a la humanidad a salir del sepulcro (v. 15). Claramente, las Escrituras Kodeshim muestra que la resurrección es la única esperanza de todos los que mueren.
¿Es sana doctrina "la inmortalidad del alma"?
Es hecho muy conocido que la mayoría de quienes profesan el cristianismo creen que el cielo es el premio de los piadosos y que hay un infierno correspondiente para los impíos. Sin embargo, muchos sienten rechazo ante el concepto protestante tradicional del infierno, ya que supone que miles de millones de seres se retorcerán de dolor para siempre por el simple hecho de no haber oído hablar de Yahushua. Si el Mashiaj es "el único camino al cielo", como de hecho enseñan los evangélicos, entonces la mayoría de quienes han vivido y muerto no pueden estar allí. Billones de seres humanos vivieron y murieron antes de que Yahushua siquiera naciera. Los católicos han adoptado una imagen distinta, agregando destinos adicionales para las almas después de la muerte. En su tradición hay un purgatorio correctivo y hasta hace poco, que el actual papa Benedicto lo rechazó, también había un limbo sin tormentos para los niños sin bautizar y para los paganos "buenos".
El problema con todas estas ideas diversas es que no provienen de las Sagradas Escrituras sino de la imaginación humana y de conceptos enteramente paganos. Todas esas ideas comienzan con la premisa de que la humanidad posee una inmortalidad inherente y que, por tanto, el alma inmortal tiene que ir a alguna parte después de la muerte. ¡Pero la Palabra de Yhwh no enseña una doctrina sobre el alma inmortal ---ni siquiera se encuentra mencionada en la Torah una sola vez! En el Tanakj, la palabra hebrea "nephesh" suele traducirse como "alma” pero lo que significa es simplemente un “ser viviente”. Así se traduce en Génesis 2:7, donde aprendemos que Yhwh Elojim sopló en Adán el aliento de vida y de ahí en adelante se convirtió en un ser viviente. Es interesante notar que un nephesh—un alma—no tiene nada de inmortal. Al contrario, leemos en Ezequiel 18:4 que el alma que peca, morirá.
En el Pacto Renovado , la palabra griega "psuche" se traduce como "alma”. Tampoco un psuche tiene nada de inmortal. Apocalipsis 8:9 emplea esta palabra al explicar que murieron un tercio de "los seres vivientes que estaban en el mar”. De igual modo, Apocalipsis 16:3 afirma que “murió todo ser vivo que había en el mar”. La expresión “ser vivo” en Apocalipsis es la misma palabra griega que se traduce como “alma” en otros pasajes: alma significa vida y se puede referir a cualquier criatura viviente, sea humana o animal. Esta palabra griega psuche es el origen de nuestra palabra psiquis, que se refiere a la mente. Se emplea a veces para describir aquellas cualidades mentales que distinguen a un individuo de otro y NO enseña la inmortalidad del alma! Es más: la expresión también se emplea en Génesis 1, para describir la vida de los peces (v. 20) y de otros animales (v. 24).
En Mateo 10:28, Yahushua dijo: "Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma [psuche] no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno”. Notemos que el "infierno" que Yahushua describe destruirá tanto el cuerpo como el alma! El alma no es inmortal, ya aquí hemos visto que se puede destruir. En este contexto, psuche se refiere a la mente o a la individualidad de la persona. Si bien cualquier otra persona puede quitarnos la vida física, Yhwh nos puede resucitar. Él guarda nuestra individualidad, incluídos nuestra memoria y carácter. El hombre no puede quitarnos la oportunidad de ser restaurados en cuerpos espirituales y de vivir de nuevo en el futuro, pero es claro que Yhwh sí puede hacerlo. Y en ciertos casos como con todos los impíos y los malakjim rebeldes, lo hará.
Son tres las palabras griegas traducidas como "infierno" en el Tanakj/Pacto Renovado y cada una describe algo distinto. "Tartaroo" se emplea una sola vez, en 2 Pedro 2:4, y se refiere a un lugar de confinación para los espíritus demoníacos. "Hades," que simplemente significa "sepulcro,” se emplea con frecuencia para describir el lugar de los muertos hasta la resurrección, es decir el sepulcro o la tumba. Jamás se emplea hades para indicar un lugar de castigo futuro ni un lugar donde haya fuego. Pero hay otra palabra griega que se traduce como “infierno” y que sí se refiere a un lugar donde los malos reciben el castigo de la muerte. La palabra es "gejenna" y toma su nombre del valle de Hinóm (Jinóm) en las afueras de Jerusalém, donde solían quemarse los cadáveres de criminales junto con las basuras de la ciudad y los animales muertos. Yahushua se valió de este lugar conocido para todos sus oyentes contemporáneos para describir cómo se quemarían los impíos incorregibles para siempre.
Una vez mas, la Torah no dice ni revela por ninguna parte que el estado natural del hombre sea la inmortalidad. Lo que sí enseña la Palabra Kodesh es que somos mortales por naturaleza y estamos destinados a morir porque "la paga del pecado es la muerte" y "todos hemos pecado."
En 1 Timoteo 6:16, el apóstol Shaul afirmó que solamente Yhwh Elojim posee una inmortalidad inherente. Le dijo a la kejilah/iglesia de Corinto que los justos van a revestirse de inmortalidad en la resurrección (1 Corintios 15:53-54). Entonces, si una persona no es básicamente un alma inmortal, ¿qué le sucede realmente al morir?
La Torah compara la muerte con el sueño. Los muertos están inconscientes, sin saber nada, hasta el momento de su resurrección (Eclesiastés 9:5). El apóstol Shaul/ Pablo describió a los cristianos fallecidos como dormidos en el Mashiaj (1 Tesalonicenses 4:14-15). A sus discípulos, Yahushua les dijo que su amigo fallecido, Lázaro, "dormía" (Juan 11:11-14). El profeta Daniel habló de un día futuro en el cual “los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua" (Daniel 12:2).
Si bien los humanos son mortales y carecen de vida mortal natural o inherente en ellos, el antiguo patriarca Yob declaró que Yhwh tendría afecto a la obra de sus manos y al final la llamaría—y Yob supo que él respondería a ese llamado (Job 14:15). ¿Cuándo iba a ocurrir? Si la enseñanza del cristianismo tradicional sobre el cielo y el infierno es incorrecta, entonces ¿de qué manera y cuándo tratará el Creador con la humanidad?
Habrán varias resurrecciones, pero existe una mejor resurrección
La Escritura Kodesh enseña en varios lugares que habrá más de una resurrección a vida espiritual eterna. Y nos revela que estas resurrecciones ocurren en distintos momentos e incluyen a distintos grupos de personas. El libro de Apocalipsis aclara el tiempo que corresponde a cada una de estas dos resurrecciones.
La primera resurrección es una resurrección de los llamados y "hallados FIELES hasta el fin" de esta era, a la inmortalidad e incorruptibilidad, y ocurre antes del arribo del Milenio. Durante el milenio ocurre el reinado de los kodeshim/santos en la Tierra con Yahushua durante mil años.
En adición, la primera resurrección se lleva a cabo mediante dos cosechas. Veamos lo que escribió el apóstol Juan en Apocalipsis 20:6: "Bienaventurado y santo/kodeshy el que tiene parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad sobre éstos, sino que serán sacerdotes de Yhwh y de Yahushua, y reinarán con El mil años.” Juan/Yahjannan describe aquí a la "élite" de los resurrectos: los de la primera cosecha de la primera resurrección. Obviamente, esta primera cosecha se lleva a cabo antes que la segunda.
El apóstol Shaul dió detalles adicionales sobre la segunda cosecha de esta primera resurrección diciendo que sucederá "en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados. Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad" (1 Corintios 15:52-53). Tengamos siempre en cuenta que cuando Shaul dice "los muertos" y "nosotros (los vivos)" se refiere exclusivamente a los fieles, a los que obedecen la voz de Yahushua y guardan sus mandamientos. Shaul no está hablando aquí de garantizar la resurrección por igual a todo ser impío o recto, vivo o muerto! Yhwh es un Elojim justo y de orden, y no va a trasladar a Su Reino y vestir de inmortalidad a todos los seres humanos desobedientes junto con los obedientes que hayan vivido desde la fundación de este planeta, para crear un nuevo caos en el Reino! Está de mas decir que Shaul y Mattityaj y los demás siervos fieles de Yahushua se están dirigiendo en sus cartas a la Kejilah, no a las naciones impías.
¿Qué quiere decir "la final trompeta”? El libro del Apocalipsis describe una serie de siete trompetas sobrenaturales que van a sonar en el tiempo del fin. Estos sonidos de trompeta señalan la intervención de Yhwh el Elojim Creador y Todopoderoso y anuncian su juicio sobre los habitantes rebeldes de la Tierra. Las mismas son tocadas durante la Gran Tribulación y tanto a las naciones inconvertidas del mundo como a los hermanos de la Kejilah profética de Laodicea, quienes por su tibieza e indiferencia espiritual hacia Yahushua tienen que lavar sus vestimentas y blanquearlas durante la Tribulación.
El Libro de Apocalipsis Captítulo 8 presenta el sonar de las primeras cuatro trompetas angélicas y las increíbles catástrofes naturales que siguen a cada una. Apocalipsis 9 habla de las trompetas quinta y sexta y de la terrbile guerra mundial y la destrucción que viene enseguida. En Apocalipsis 11:15 leemos: "El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Adón y de Su Mashiaj; y él reinará por los siglos de los siglos." La séptima y última trompeta anuncia el regreso de Yahushua y la resurrección de los humanos llamados y piadosos que ya murieron, junto con todos los hermanos que hayan quedado vivos y estén obedeciendo a la Ley y a Yahushua hasta ese momento, y hallan como leeremos a continuación.
El apóstol Shaul así lo recalcó en 1 Tesalonicenses 4:16: "Porque el Adón mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Yhwh, descenderá del cielo; y los muertos en Mashiaj resucitarán primero”. En los siguientes versículos nos explica que los fieles kodeshim que aún estén con vida cuando ocurra aquel acontecimiento también se convertirán en inmortales y se levantarán a reunirse con Yahushua Ja Mashiaj y el resto de los santos/kodeshim antes muertos que serán en ese mismo momento resucitados.
Esta primera resurrección es un levantarse a la gloria y la inmortalidad eterna y en ella participan solamente los que sean de Mashiaj en el momento de su segunda venida (1 Corintios 15:23). Hebreos 11:35 la llama una "mejor resurrección.” Cuando Yahushua resucitó después de estar tres días y tres noches en el sepulcro, se convirtió en las primicias (o primeros frutos) de los que durmieron (1 Corintios 15:20). Los que genuinamente acepten a Yahushua como Adón y Salvador cuentan con una promesa maravillosa: que por cuanto Él vive, ¡nosotros también podemos vivir (Juan 14:19)!
La segunda resurrección
Sólo una pequeñísima minoría de los humanos que han vivido aquí en la Tierra ha llegado a conocer a Yahushua Ja Mashiaj y al Padre Yhwh Elojim y a depender y a confiar en ellos. ¿Qué pasará con todos los demás?
En el Libro del Apocalipsis en Cap. 20:5 se deja en claro que los demás muertos, los que no entraron en la primera resurrección al toque de la Séptima Trompeta, no volverán a vivir hasta que haya terminado el reino milenario de Yahushua y sus kodeshim/santos. Luego, nuestro amado hermano el apóstol Yahjannan/Juan describe una vasta multitud "incontable" que volverá a la vida en ese momento y estará de pie ante Yhwh (versículo 12).
También curiosamente nos revela que el Libro de la Vida se abre nuevamente al fin del milenio. ¿Para qué se abrirá otra vez, si las mismas Escrituras explican que aquellos cuyos nombres ya estaban escritos en el Libro de la Vida (Apocalipsis 3:5) ya se habían levantado a la inmortalidad al regreso de Yahushua 1,000 años antes? Todos aquellos---los de la Kejilah---ya han sido juzgados para bien o para mal. La mitad de la Kejilah entró a las bodas con el cordero y fueron transformados a seres espirituales en ese momento. Ellos vencieron. Participaron de la primjera resurrección. La otra mitad que según programado no entró a las bodas (según ya hemos estudiado en la parábola profética de las 10 vírgenes), esperan su juicio para muerte eterna en la tercera resurrección descrita mas abajo.
(Por este motivo el Ruaj le advierte incansablemente a la Kejilah, a través de sus siervos y atalayas, que los llamados a la Kejilah están siendo juzgados en estos momentos y por tanto deben procurar andar en total rectitud y arrepentimiento.)
¿Pero por qué se re-abre el Libro de la Vida al final de los mil años? Yhwh no tendrá necesidad de reabrir el Libro para ver si ha cometido algún error—ó para ver si dejó a alguien excluído! Este reabrir del libro representa un nuevo juicio para otros seres humanos en ese momento indicado en el libro de Revelación --- otros seres humanos que no fueron levantados a inmortalidad al regreso de Yahushua, ni aún lo han sido hasta ese momento.
Yahushua habló de una resurrección a juicio, momento en el cual la gente de las ciudades antiguas se hallaría de pie junto a muchos judíos de su época (Mateo 12:41-42). También dijo que muchos habitantes de aquellos pueblos antiguos se habrían arrepentido si hubiesen visto sus obras y escuchado su mensaje (Mateo 11:21-23). ¿Habrá personas que se pierdan eternamente porque nunca tuvieron tal oportunidad? De ninguna manera, Yhwh es un Elojim justo, y no puede condenar a nadie que nunca vió sus obras ni escuchó su mensaje! El no puede destruír a nadie a quien El mismo ha rehúsado darle la oportunidad de conocerle! Recordemos que Nuestro Padre Yhwh no hace acepción de personas (2 Crónicas 19:7) y no desea "que nadie perezca sino que todos vengan al arrepentimiento" (2 Pedro 3:9).
Entre los que escucharon la predicación de los apóstoles, ¿por qué hubo tantos que no veían ni entendían? Porque como nos contesta la misma Palabra de Yhwh, eran espiritualmente ciegos! (Romanos 11:25). Las doce tribus habían sido entregadas a ceguera espiritual debido a su desobediencia, incluso diez de ellas estaban totalmente dispersas entre los gentiles, y también muchos judíos vivían en lugares paganos (en Roma, en Asiria, en Asia Menor, en Egipto---y para los tiempos de Yahushua eran relativamente pocos los que entendían. Recordemos: Yahushua señaló claramente que "nadie puede venir a mi si mi Padre no lo trajere" (Juan 6:44). No obstante, Shaul previó un futuro en que "todo Israel sería salvo" (Romanos 11:26). Había una nueva esperanza para aquel "ciego" y desobediente Israel. Obviamente, todo con condiciones, pero indudablemente Yhwh había extendido nuevamente Su misericordia y por Su gracia había concecido otra oportunidad para el futuro. (El sabía que El mismo los había arrojado fuera de la eretz de Israel, aunque justamente lo había hecho provocado por su desobediencia y como cumplimiento de sus promesas de maldición sobre los desobedientes). El profeta Ezequiel describió en una visión aquel tiempo de salvación futura para Israel.
Ezequiel vió un valle de huesos secos y le dijeron que este valle de huesos representaba toda la casa de Israel. Luego vió cómo los huesos se juntaban de forma extraña y milagrosa para formar esqueletos y luego vió que se cubrían de carne. Por último, en este enorme ejército de cuerpos reconstituídos entró el nuevamente el aliento y volvieron a la vida! El mensaje de Yhwh fue: "He aquí yo abro vuestros sepulcros, pueblo mío, y os haré subir de vuestras sepulturas, y os traeré a la tierra de Israel. Y sabréis que yo soy el Eterno, cuando abra vuestros sepulcros, y os saque de vuestras sepulturas, pueblo mío" (Ezequiel 37:12-13).
En ese momento futuro, que ocurrirá 1.000 años después del retorno de Yahushua, todos los "ciegos" o "espiritualmente muertos" ya habrán conocido a Yhwh Elojim. Al fin habrán tenido su oportunidad de conocerle y a Su Hijo Yahushua. Esta no es una segunda oportunidad para nadie, sino una primera oportunidad para los miles de millones que nunca antes supieron del plan de Yhwh ni de su propósito en esta era.
Este será un período de juicio futuro para la gran mayoría de los seres humanos, pues la mayoría de la humanidad viva ahora mismo momento no ha sido aún llamada por Yhwh y permanecerá sin ser llamada hasta el milenio. Ni tampoco la vasta mayoría de los que ya murieron fueron llamados. Casi todos ellos murieron sin haber conocido.
Isaías 65:20 indica que esta restauración a la vida física durará 100 años. Durante ese tiempo que estos humanos resurrectos vivan en cuerpos físicos, se les quitará la ceguera espiritual en su totalidad, para que puedan conocer y aprender los caminos de Yhwh. (Aclaro que esta resurrección a vida física no es la segunda resurrección a espíritu de la que se habla aquí. Ya discutimos la primera resurrección a espíritu, ahora estamos aclarando cuando ocurrirá la segunda). Cuando finalmente se re-abra el Libro de la Vida, todos estos muertos que fueron resucitados a vidas físicas y enseñados en la Ley por Yahushua y sus 144,000 "maestros y oficiantes a favor del pueblo kodesh," serán juzgados por los libros de la Torah y según lo que cada uno de estos humanos haya hecho con la oportunidad que le fue concedida.
|
|
|
Primer
Anterior
2 a 2 de 2
Siguiente
Último
|
|
Repito, al regreso de Yahushua Ja Mashiaj, se renovará la faz de la Tierra y se preparará para que todos los humanos que nunca lo conocieron (NO los que lo conocieron y lo rechazaron) vuelvan a la vida física y sean instruídos. Tengan en cuenta que esto se trata de una resurrección a vida fisica, no a vida espiritual eterna. Nuevamente, al éstos "resurrectos a vida física" ser instruídos en la Torah, y "graduarse" y ser aprobados, obtendrán también sus cuerpos espirituales incorruptibles al igual que los que les antecedieron. Esta ahora sí es es la segunda resurrección de la que nos hablan Mattityahj, Shaul, Yahjannan, Yahushua y otros, y que ocurre durante el milenio. Luego veremos que no todos estos resurrectos se "gradúan" y obtienen sus cuerpos espirituales inmortales, pues a pesar de que fueron instruídos directamente por Yahushua, David, los 24 ancianos y los 144,000 kodesim, algunos increíblemente al final escojen el camino del mal y se pierden.
Los 144,000 reyes y sacerdotes o "primicias de Yahushua" reinarán sobre la tercera parte de la humanidad que haya quedado viva tras la Gran Tribulación, y sobre los resurrectos a vida física durante el milenio y que nunca antes tuvieron la oportunidad de haber conocido a Yahushua.
Una tercera resurrección
¿Qué ocurrirá al final de aquel período de juicio, cuando la mayor parte de la humanidad haya regresado a la vida física y haya recibido la oportunidad de aprender la verdad por primera vez?
Hemos hablado de las personas que confiaron en Yahushua y que se levantaron a la inmortalidad a Su regreso en la primera resurrección. Y luego hemos visto la gran bendición que les ocurre a los millones que han sido enceguecidos espiritualmente durante los seis milenios de esta era de gobierno humano y que luego vuelven a la vida mortal 1,000 más tarde, con su primera oportunidad para ver su nombre inscrito en Libro de la Vida.
Pero... ¿y qué pasará con los que hayan rechazado a sabiendas la salvación de Yhwh, o rechazado a Yahushua, o blasfemado contra el Ruaj Ja Kodesh? ¿Y que sucederá con los resurrectos a vida física durante el milenio que mas tarde lo rechacen?
Hay quienes en esta era en definitiva sí han tenido ya la oportunidad de recibir la salvación de Yhwh y la han rechazado deliberadamente. El Apóstol Kefas/Pedro se refirió a ellos en 2 Pedro 2:21: " Porque mejor les hubiera sido no haber conocido el camino de la justicia, que después de haberlo conocido, volverse atrás del santo mandamiento que les fue dado.” El apóstol Shaul/Pablo explicó: " Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados, sino una horrenda expectación de juicio, y de hervor de fuego que ha de devorar a los adversarios" (Hebreos 10:26-27). Este juicio de Yhwh es muy MUY diferente del fuego infernal producto de la imaginación tradicional, que para la mayoría de los "cristianos profesos" consiste en una tortura infligida a los pecadores por toda la eternidad.
Veamos la descripción dada en Malaquías 4:1: "Porque he aquí, viene el día, ardiente como un horno, y todos los soberbios y todos los que hacen el mal serán como paja; y el día que va a venir les prenderá fuego--dice el Elojim de las huestes--que no les dejará ni raíz ni rama". El fuego infernal descrito en las Escrituras Kodeshim es un fuego que no tortura a los malos eternamente sino que los destruye.
Apocalipsis 20:15 describe el momento de aquella futura destrucción de los incorregiblemente malos. A la conclusión del período del juicio, cuando los que habían sido enceguecidos hayan podido ver sus nombres escritos en el Libro de la Vida al ser re-abierto, los que no tuvieron su nombre en el Libro serán lanzados a un lago de fuego para aniquilarlos! Luego, los que en nuestra actual era rechazaron su oportunidad de salvación resucitarán a la vida para sufrir la segunda muerte. Esta es la "tercera resurrección". La tercera resurrección a vida es una resurrección cortísima en la cual solamente los impíos participan y termina en la muerte en el lago de fuego. Respecto a esto, hay otros detalles adicionales que ya hemos tocado en otros estudios. (Para información mas detallada de este aspecto, pueden leer "Comentarios acerca de quiénes seran arrojado al lago de fuego y azufre.")
En la parábola de Lázaro y el rico, Yahushua describió a alguien que se despierta en el sepulcro ("hades"), no a la gloria y a la oportunidad de salvación sino a afrontar la ira divina (Lucas 16:23). Tal persona sentirá el tormento de verse excluida del Reino de Yhwh y de sufrir la aniquilación, y perecerá junto con todos los que terminen por rechazar su oportunidad de salvación individual. En ese punto, perecerán todos los humanos cuyos nombres no se encuentren escritos en el Libro de la Vida.
Pedro también describe el mismo hecho en el momento futuro cuando Yhwh impondrá su juicio final sobre el pecado: “Los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas" (2 Pedro 3:10). A ello seguirán los "cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia " (v. 13). Juan también describió este acontecimiento en Apocalipsis 21, pintando la creación de nuevos cielos y una Tierra nueva así, como el descenso de la Nueva Jerusalém del Cielo. En ese momento glorioso, Yahushua entregará el reino al Padre (1 Corintios 15:24). El Padre yel Hijo morarán en la Nueva Jerusalén, junto con los kodeshim/santos inmortalizados, en una eternidad sin dolor ni carencias, sin penas ni lágrimas. Todo esto será posible porque, finalmente, el pecado y todo lo contaminado con pecado, se habrá purificado o habrá sido destruido (v. 26). La Palabra de Yhwh termina con esta imagen, que señala el final del comienzo... ¡y el umbral de la eternidad al comenzar el Octavo Milenio---simbolizado en las Fiestas Anuales/Moedim de Yhwh con el Octavo o Ultimo Gran Día!
Nuestro Adorado Padre Yhwh tiene planeado un futuro maravilloso para sus Hijos los creyentes fieles. Tengan en mente que la Kejilah está siendo juzgada AHORA y que para nosotros los llamados de este tiempo, NO HAY OTRA OPORTUNIDAD. Continúen fieles hasta el fin, poniendo todo lo que aprendan en obediente práctica y sometiendo todo pensamiento al Mashiaj para que seamos kodeshim. Excelente garantía y promesa tenemos al decirnos Yahushua Ja Mashiaj que El estará con nosotros hasta el fin ... hasta que Yhwh haya terminado la obra purificadora en nosotros aquí en la Tierra y nos reunamos con Yahushua para siempre! Benditos sean por siempre el Padre y el Hijo!
|
|
|
|
|
|
|
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados | |
|
|