"La Hipocresía de los Rabinos y el Nombre de Yahweh" - LOS DISCIPULOS DE YAHSHUA DE NAZARET

(El Dilema de la Ortodoxia y el Fariseísmo)

Algunas veces, la teología de las personas las lleva a encontrarse con infranqueables problemas de lógica y razón.   Sobretodo esto sucede cuando los hombres mortales y desprovistos del Ruaj Ja Kodesh tratan de imponer sus propios criterios por encima de la Verdad Kodesh de Yahweh.

Los "rabinos" y estudiosos ortodoxos confrontan un problema muy serio con Isaias 42:8, al tratar de suprimir el nombre verdadero de Nuestro Creador y Padre, Yahweh. Lo voy a exponer en forma muy breve....pero primero haré la aclaración que no todos los "rabinos" suprimen el nombre. Hay tal vez un 20% de los mesiánicos que no lo hacen---aunque esta cifra representa menos de un 1% de todos los rabinos del mundo. Veamos lo que hace y cree el restante 99%:

En Isaias 42:8 el Todopoderoso de Israel afirma lo siguiente:

"Aní YHWH, ju shemó, ukjevodí leajér lo-etén..."

"Yo [soy] YHWH, este [es] mi nombre, y mi gloria a otro no-daré..."

Ahora bien, ¿cuál es el problema con eso?   Pues el problema con eso es que los Rabinos Ortodoxos y no-ortodoxos en su mayoría se aferran todavía a la creencia supersticiosa de que es es blasfemo pronunciar y escribir el Nombre Sagrado de nuestro Padre Celestial.    Y para poner la Torah en armonía con su auto-justicia y temor supersticioso, han producido las siguientes traducciones tergiversadas del texto de Isaías:

1. "Yo soy Adonáy, este es mi nombre, y a otro no daré mi gloria..."

2. "Yo soy el Señor, este es mi nombre, y a otro no daré mi gloria..."

3. "Yo soy Ha-Shém, este es mi nombre, y a otro no daré mi gloria..."

Como ven arriba, los rabinos farisaicos/ortodoxos quitaron el nombre "Yhwh" y lo sustituyeron con tres epítetos paganos que heredaron de los babilonios, y así continúan enseñandolo hasta el día de hoy.

Pero lo absurdo y triste del caso es que los incautos que siguen a pié juntillas todas las antojadizas e irracionales interpretaciones de los rabinos y los ortodoxos se han dado a la tarea de eliminar de la faz de la tierra el bendito Nombre de nuestro Padre Celestial como buenos siervos de Ja Satán según Yahushua mismo los llamó... y tanto "talmidim como maestros" no sólo repiten mecánicamente la misma barbaridad de los rabinos y ortodoxos, sino que lo enseñan así a otros y persiguen a los que lo pronuncian.

(Encima llenan las páginas de internet con supuestos estudios "super-reveladores" de "raíces hebreas"---que no son otra cosa que raíces de tradiciones judaicas---y de estudios del nombre, con docenas razones por las que lo han suprimido, y de versiones alternas falsas del nombre kodesh de Nuestro Abba.)

¿Y por qué es eso una barbaridad?   Porque lo que tan aferradamente afirman es una insostenible contradicción. Por algo Yahushua Nuestro Amo, Soberano y Rabino los llamó "embusteros" e "hipócritas."

¿Y por qué es una contradicción?   Bueno, pues analicemos esto:

Primeramente, es claro, y todos lo saben, que el Tetragrama Sagrado se pronuncia Yahweh, ese es el Nombre del Creador, el Dios Verdadero. Pero si resulta que es malo o blasfemo pronunciar Su Nombre---como afirman sin razonamiento los rabinos farisaicos judaizantes y ortodoxistas---entonces, para entender el asunto, vamos a remitirnos a las tres maneras ortodoxas y rabínicas de traducir Isaias 42:8:

1. Si usted acepta la forma #1, "Yo soy Adonay, este es mi nombre," entonces usted no puede pronunciar el nombre "Adonáy" porque estaría cayendo en el mismo pecado y la misma "condenación" de los que pronuncian El Nombre. Ahí lo dice, "Adonáy es Su Nombre."

2. Si usted acepta la forma #2, "Yo soy el Señor, este es mi nombre," entonces usted no puede pronunciar el nombre "el Señor" porque estaría cayendo en el mismo pecado y la misma "condenación" de los que pronuncian El Nombre. Ahí lo dice, "el Señor es Su Nombre."

3. Si usted acepta la forma #3, "Yo soy Ha-Shem, este es mi nombre," entonces usted no puede pronunciar el nombre "Ha-Shem" porque estaría cayendo en el mismo pecado y la misma "condenación" de los que pronuncian El Nombre. Ahí lo dice, "Ha-Shem es Su Nombre."

De manera que esto es nada menos que una contradicción circular; 'palo si boga y palo si no boga.' Como quiera que lo ponga, cualquier nombre que usted inserte en Isaias 42:8, caerá en una gran contradicción si se aferra a la idea supersticiosa de que es blasfemo o prohibido pronunciar o escribir el Nombre de nuestro Padre Celestial, independientemente de cual sea.    Ya he tratado antes lo irracional de las razones que se ofrecen para abstenerse de pronunciar el Nombre Sagrado. Ahora, si usted es "Ortodoxista," ¿cómo va a resolver usted esta contradicción?

Otra contradicción y prueba mas de la mentira de los rabinos farisaicos y sus simpatizadores judaizantes es la siguiente. Muchas veces cuando son cofrontados y preguntados si el nombre de Nuestro Creador es "Yahweh," dicen rotundamente que no lo es.   Afirman categóricamente que Yahweh NO ES el nombre kodesh del Elojim de Israel.

Por tanto, si Yahweh efectivamente NO ES el nombre que está TAN superticiosamente prohibido decir, ¿por qué entonces no lo pronuncian? ¿Por qué, si es un nombre erróneo, no lo quieren decir? Esta es otra muestra mas de la hipocresía y lengua mentirosa de los fariseos y sus modernos descendientes los rabinos ortodoxos y no-ortodoxos.

Claro que si usted está entre los que pronuncian libremente el Nombre Sagrado de Yahwéh, entonces tiene un privilegio muy especial, porque el Profeta hebreo Malakiah dijo lo siguiente:

"Entonces los que temían a Yahwéh hablaron cada uno con su compañero, y Yahwéh prestó atención y escuchó. Y fue escrito un libro como memorial delante de él, para los que temen a Yahwéh y para los que toman en cuenta su nombre. En el día que yo preparo, ha dicho Yahwéh de los Ejércitos, ellos serán para mí un especial tesoro."    (MalakíYah 3:16-17,)

¡Qué hermosa promesa!   Y qué hermoso privilegio se pierden los que ocultan Su Nombre, los que falsifican Su Nombre, y los que mienten y substituyen Su Nombre por títulos comunes y sin sentido.

En cambio, para los que "toman en cuenta su nombre" para alabarlo y darlo a conocer correctamente, está escrito en el cielo un libro especial que los identifica como "un especial tesoro" para Yahweh.

De manera que Abrahjam está en ese Libro, Moisés está en ese Libro, Isaías, Jeremías, Ezekiel, y todos los profetas están en ese Libro; Yahushua, y todos sus seguidores originales están en ese Libro, porque todos ellos fueron paladines y pregoneros de la Verdad inadulterada de Yahweh y proclamadores de Su glorioso Nombre.

Si los Rabinos farisaicos y los Ortodoxos, y los rabinos del día moderno prefieren aferrarse a su tradición supersticiosa de esconder, ocultar, y sustituir el Nombre Sagrado, pues allá ellos; porque ellos son quienes se pierden la bendición!

"Pero en cuanto a y Mi y mi casa serviremos a Yahweh." (Josué 24:15 Texto Hebreo).