Creo que a estas alturas todos los que sigáis esta página conoceréis que aquí confluyen dos mundos que aparentemente no tienen nada que ver, y que son el reflejo de mi propio trabajo, mi propio objetivo, mi propia misión. Ambos dos tiran de mí con insistencia para que me vaya a un lado o a otro pero, en realidad, esa lucha es simbólica de lo que está sucediendo a nivel global, de las dos energías transformadoras que han de propiciar el cambio de Sistema en el Planeta Tierra.
A un lado del “ring”, los anarquistas, conspiranoicos, guerreros desencantados y luchadores por la justicia, demandando a Rafapal “caña” y que se deje de disquisiciones espirituales. Saben contra lo que luchan pero no saben a favor de qué. Están en la Tierra, preocupados por el asfixiante devenir de la situación y están dispuestos a elevar la voz, gritar y desafiar a quién sea. En su vida diaria, sin embargo, sus relaciones humanas son más bien desastrosas y su incapacidad para generar unión, compromiso y, sobre todo, un grupo que funcione. El origen está, por supuesto, en su vacío espiritual. Básicamente, es gente que dejó de creer en Dios bien por su comprensible horror ante el Estado del planeta (¿Qué hace que no actúa?) o bien por una huida de la Iglesia católica, a la que han identificado -erróneamente- con el Creador. El resultado es, como se ha visto en Stop secretS, y en otras asociaciones afines, como en general todo el ámbito conspiranoico, que son un ámbito de insidias, maledicencias, rumorología y, dicho pronto y claro, “mal rollo”.
¡Fijaos que a veces me solicitan mi colaboración INSULTÁNDOME! ¿Os lo podéis creer? ¿Iríais de la mano de alguien que os insulta como método para atraer la atención? Pues sí, así hay unos cuantos. ¿Resultado? No pasan de 4. Llega gente y gente con ganas pero no se quedan porque no encuentran cariño, respeto, unión. Amor, vaya.
Con esta gente no hay forma de ir a ningún lado: ¿escapas de Rockefeller y te vas a ir con una gente que sólo entiende las relaciones humanas desde el insulto, la traición y la maledicencia? No, ¿verdad?
Hace falta, urgentemente, un código ético en las filas conspiranoicas, desde la impecabilidad en el comportamiento humano, y el que no lo cumpla debería irse a otro sitio. Insisto, hay quien sabe contra qué lucha pero no sabe por qué (con qué objetivo): ¿vamos a repetir las relaciones humanas creadas por los Iluminati? Para eso, seguimos como estamos. Eso es lo que hace mucha gente que se acerca por estos lares.
Ahí va una pequeña propuesta.
Del otro lado, los espirituales, los new agers, los que han tomado el camino interior, la gente más sensible, lo perceptivos de las energías sutiles. La Fuerza que ha de impulsar esta Nueva Humanidad. Hartos, precisamente, de tanta insidia y de tanta traición (al otro y a uno mismo) han volcado su energía en la transformación en “lo pequeño”, lo que antes conocíamos como el mundo de “lo paranormal” (viajes astrales, sanación, telepatía, etc). Especialistas en el mundo de los abrazos, al final, para muchos de ellos el mundo espiritual es un escapismo para no afrontar el gran problema de las relaciones humanas, de manera que caminan solos en su búsqueda interior. A menudo se llenan la boca con las palabras “Paz” y “Amor” pero se les olvida que jamás podrá haber ni lo uno ni lo otro sin Justicia y sin Verdad (podréis decodificar fácilmente como Iluminatis una gran cantidad de movimientos y concentraciones que buscan la Paz sin hablar de Justicia). Ni pensar en afrontar una r-evolución social porque, para muchos de ellos, está condenada al fracaso (si antes no hay una transformación interior, lo cual, como he dicho arriba, es completamente cierto). Al huir del mundo de la transformación política, sin embargo, se pierde su conocimiento de las relaciones humanas, fundamental para estos cambios. Básicamente, son los que tiran de mí para que abandone el tema Iluminati y me vuelque en el desarrollo interior, por supuesto, son despreciados por los anteriores por considerarlos unos “blandos” y esos son los insultos que recibo por parte del grupo de arriba, en realidad, bien sé que no son para mí sino para esa parte de mí que represento en ellos ese “arquetipo”.
Por supuesto, queda un grupo cada vez más grande de personas que saben que no puede existir lo uno sin lo otro. Que no se podrá desarrollar un nuevo mundo sin esa revolución en el interior y que no se podrá propiciar el advenimiento de un Nuevo Mundo sin unirnos con unos lemas en un movimiento social. Son los guerreros del arcoiris y la gente que ha empezado a promover la creación de ecoaldeas. Muchos de ellos se encuentra, al llegar a ellas, que no es sólo Rockefeller y Rothschild el problema sino que en su interior hay algo que todavía no funciona, que no está limpio…
Llevo diciéndolo diez años: hasta que los guerreros no nos purifiquemos por dentro y los espirituales bajen a la tierra, el cambio no se dará.
En medio de la crisis y las noches sin dormir, me han venido algunas ideas rompedoras. Irán saliendo con el paso de las semanas. Hay una propuesta para realizar el 10-10-10 con pocos medios y gran impacto, pero se moverá sigilosamente…