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♥ 「 cαяdιиαl de lα тιeяяα 」: { мιssιиԍ }
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De: Lyricalia (Mensaje original) |
Enviado: 22/01/2011 11:15 |
Lo iba a quemar todo.
"Lulú." Susurra Klagen, su tono desesperado. Sus rojizos ojos abiertos de par en par, su cabeza
inclinada hacia atrás, mirada fija en las ardientes llamas que quemaban los hogares sin compasión.
El viento se agita, las ropas de Klagen danzando al compás sobre el cuerpo famélico y maltrecho,
no habiendo probado bocado desde que Lücheln desapareció.
"Lulú." Parece sollozar el demonio, su ira alta y brillante como la luna sobre su cabeza, fiel espectante.
Camina por los techos de las casas, Dante a su lado escupiendo fuego cual bestia poseída. Su amo
apestaba a dolor, dolor dolor, y quería que acabase. Ya.
"Lulú! Lulú! Lulú!" Grita hecho una furia Klagen, deteniéndose en un punto estratégicamente alto, sus
puños blancos, su postura tensa. Todo dolía. Se sentía tal como fue convertido en demonio por Él,
un dolor más allá, una pérdida más allá--y si bien los gritos de los habitantes desesperados tratando de
huir normalmente lo llenarían de gozo mientras saborea su terror, esta vez, no ayudaban en absolutamente
nada. Sus emociones hechas un lío, la desesperación de ellos solo acrecentaban la propia, y Klagen cerro sus ojos y con un apretón de dientes ordenó a Dante
continuar; mirada fría, enloquecida.
Lo iba a quemar todo. Hasta la última hoja del maldito Cardinal hasta encontrar a su Lulú. Arrasaría con todo el Imperio de ser necesario.
"He. He--ahaha!"Ríe, colmillos brillando bajo la anaranjada luz. Rasguña su mejilla, dejando marcas, tratando de distraerse. No lo consigue. "Bastardos--"
Cubriendo su boca ante las violentas arcadas que le atacan, Klagen se mantiene de pie. "Sé que lo tienen aquí." Sonríe, un tinte de locura manchando
sus labios."--y lo quiero de vuelta. Soy un demonio, y lo mejor que sé hacer, es tratos."
Ríe. Y todo se quema.
"Su Cardinal por Lulú." Grita a los vientos, seguro de que un Lebenmaske o un Científico, los escuchará. Baja a la calle, y camina entre los gritos, la gente despavorida
huyendo de él. "Bastardos." Entrecierra sus ojos, y las chispas enloquecen a sus pies, calor abrazador.
Sonríe afectado, abrazando su pecho con sus aún más delgados brazos, sus uñas clavándose en su blanca piel.
"Todo se quemará. Que arda, que arda, que arda!"
No fue más que un susurro. Y el hellhound gruñó cual muerte al acecho, escupiendo fuego y rasguñando todo a su paso. Su nariz no encontraba al Lulú de su amo, pero
el niño volvería a los brazos de Klagen. Hacer esto estaba en su naturaleza. Destruir. Esa era le esencia de todo demonio. Luego vería si el amo le dejaba comerse
algunas almas. Acercándose Dante a su amo en un sprint, alcanzó justo a frenar la caída del debilitado demonio. Ese niño volvería. Él, mismísimo hijo de cancerbero,
lo haría realidad--por su amo.
"Lulú..."
O si no.
Waaah! Ya está la primera historia! +w+ Como muchos ven, tiene lugar en el Cardinal de Tierra, pero toda marioneta, independiente del lugar que sea, se puede unir.
Lebenmaske! Defiendan su cardinal. Marionetas de buen corazón, guíen por el camino correcto.
Marionetas que solo buscan el mal--
--bienvenidas, he he. |
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No dijo ni hizo nada cuando atacò a Ezra, desviando la vist;, sabia que lo haria de todos modos, ahora o mas tarde, pero el Licht no tenia por què saber eso. Luego, lo mirò, ojos pequeños, miraba con detenimiento... El Teufel asentia incluso luego de haber dicho todo lo que tenia que decir, y era odioso, es odioso que te pasees como si fuera tu casa...
"Su stern." Los ojos se le abrieron como plato y los labios en una fina linea, tensos. Desde cuando que no oia ese apodo? Muchos dias habian pasado ya. "Tenías que ser tú. Tú, tú, tú--quien tuviese el primer pensamiento sensato." Intento recomponerse del asombro lo mas rapido que pudo, y luego se cruzò de brazos, sonriendo en una mueca que no mostraba sus dientes, escuchandolo con detenimiento, sin dejar de mirarlo. Miente. "Vine por una cosa. Por Lulú--Lücheln para ti, licht. Y no me iré sin ella. Lo destruiré todo, absolutamente todo." 'Y no podremos evitarlo', pensò, como si el joven Licht le pudiera oir tambien. Queria decirles que era un caso perdido desde un comienzo el siquiera intentar hacer algo... Que Ezra se fuera a otro lugar a buscar a su Lebenmaske y Eiko desapareciera tan de pronto como apareciò, era lo mejor que podian hacer.
"Dime, su stern. Donde está lulú?" Stern, maldita sea. Su stern. Frunciò el ceño, los ojos pequeños otra vez y los labios tensados... El rostro de una niña con rabia e impotencia. Riò quedamente y se irguiò, mirandolo fijamente. 'Pues no lo sè, puede estar jugando con su conejito, quizas con algunos Lebenmaskes (o ambos), o quizas esta admirando entretenido desde alguna casa como la gente baila en las llamas y las cabezas vuelan', dijo, fingiendo ignorancia y llevando ambas manos a las caderas. Hizo una pausa y añadiò con voz tranquila y calmada, finalmente, sin pensar bien lo que decia. 'No lo sè, dime, dònde lo haz abandonado, Klagen?'
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"No haz pensado en que se allá ido a jugar con Yuiko por allí, recuerda que esa chica siempre mete sus narices en nuestro asuntos, es como todos los LICHT y siempre sabe como llamar su atención"Pero la manera en que dijo "Licht"..enfatizandolo, entre dientes..sonaba como un insulto. Había dicho aquel nombre, apodo en voz alta. Pero no se había dado cuenta de lo que esto implicaba hasta que volteó a ver a Hoshi, quien tenía un dedo sobre los labios, indicando silencio mientras negaba con la cabeza lentamente. Después de eso todo ocurrió demasiado rápido. El demonio cargó cons sus delgados brazos la hoz, y la lanzó con una fuerza increible en su dirección. El filo de esta pasó a tan solo unos milímetros de su cuello, abriendo una herida y cortando algunos de sus cabellos de plata. Klagen, que había parecido poco interesado en ellos, ahora caminaba directamente hacia él, sus ojos destellantes de pura furia."Qué has dicho?" le susurró, viendo directamente con sus ojos rojos, rojos como las llamas que les rodeaban a los azules de Ezra. "Cómo te atreves, licht." De nuevo, desprecio en la manera en que pronunciaba Licht. El golpe de la hoz le tomó completamente por sorpresa, había estado demasiado distraído por el Teufel como para escuchar el vuelo del arma mientras regresaba a la mano de su amo. Klagen atrapó la hoz y con un hábil giro apuntó el filo al cuello del muchacho, justo sobre la herida que le había hecho previamente.
"Nadie puede llamar a Lulú así, más que yo. Ni siquiera uno que dice ser de su clase." Opciones, opciones...¿Darle una descarga al
Teufel? Podía ser muy fuerte con Lichts en entrenamiento, pero dudaba realmente que le sirviera de algo con Klagen, mas que para enfurecerlo aún más. Como para confirmarlo, Klagen lanzó nuevamente su hoz, ahora contra mraionetas Lebenmaske cuya única falta había sido estar presente en el momento inadecuado, degollándolas al instante. "Su stern. Tenías que ser tú. Tú, tú, tú--quien tuviese el primer pensamiento sensato." El joven ahora le hablaba a Hoshi, quien extrañamente parecía saber bastante bien qué era lo que ocurría. "Vine por una cosa. Por Lulú--Lücheln para ti, licht. Y no me iré sin ella. Lo destruiré todo, absolutamente todo." Ezra cerró los ojos al ser aludido....Lücheln ¿Dónde podía estar? Sabía que este Teufel era perfectamente capaz de cumplir sus ame- nazas. "Dime, su stern. Donde está lulú?" ¿Su stern? ¿Porqué le llamaba así? ¿De dónde conocía la chica a este demonio? ¿Demonios! no Entendía nada. La chica río mientras se erguía, reacción que en definitiva, no esperaba. 'Pues no lo sè, puede estar jugando con su conejito, quizas con algunos Lebenmaskes (o ambos), o quizas esta admirando entretenido desde alguna casa como la gente baila en las llamas y las cabezas vuelan' La joven hizo una pausa, antes de agregar, tranquilamente No lo sè, dime, dònde lo haz abandonado, Klagen?' El demonio estaba furioso, tanto que era casi palpable desde el lugar donde se encontraba. Ezra siempre había sido especialmente sensible para detectar emociones, pero no se necesitaba ser un genio para deducirlo. Pero detrás de toda esa ira estaba la verdadera causante de todo: tristeza. ¿Qué relación tenía el Wissen con aquel Teufel? No tenía manera de saberlo de seguro, pero sabía que el pequeño wissen era alguien muy importante para Klagen. Se aferró a ese tímido sentimiento, que pasaba casi desapercibido entre las rampageantes ira y furia. Se aferró a él y lo hizo crecer, en lo que podía ser su movimiento más arriesgado hasta el momento. ¿El demonio creía que había estado trsite? No tenía ni idea.
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Sonrió malévolo hacia Hoshi ante su pensamiento. Se lo devolvió con un ligero empujón mental, más bien un soplido provocador. Es odioso que te pasees por una casa que no
es tuya tampoco...tsk, tsk...¿quién es el mentiroso aquí? Sus ojos brillaron y su sonrisa
se ensanchó. He, he, solo ganarán tiempo, pero de no aparecer, haré su Imperio caer...
Prácticamente mordió la última palabra, todo rasgo de entretención ido, su voz sonando
fría como eco en la mente de Hoshi.
"No lo sè, dime, dònde lo haz abandonado, Klagen?'
Y perdió la razón. Total y completamente; perdiendo todo dominio de sí mismo. Sus ojos
brillaron de un rojo furia, la mataría, no importaba los que Nichts dijera, o le amenazara,
o le hiciese o dejase de hacer. Les mataría, uno por uno, quemaría a toda marioneta del
imperio, partiría por los hijos, haría a los padres observar, sumiría en desasosiego todo
el infeliz lugar y luego--
--alguien se estaba metiendo con sus emociones; y un dolor abrasador recorrió su pecho,
haciéndolo caer en una rodilla, su mano rasguñando sobre las ropas en el lugar, sus ojos apretados; su respiración agitada. No lo podía soportar!
Ya estaba cargado de ira, de furia, del temor y desesperanza de la gente del lugar, no podían ensanchar su tristeza! Sentía que se iba a morir,
a morir, no podía aguantar sus propias emociones, las de los demás era un cosa, pero las suyas propias..las suyas...
"Lanthánides" Convoca con un gruñido, sus manos agarrando su rostro, rasguñándose,, moviendo su cabeza de un lado a otro y con movimientos
espasmódicos y discontínuos logro ponerse de pie. Su rostro perdió toda emoción, y miró a través de sus dedos a Hoshi. Las ramas de árbol y
liana se dispararon hacia la chica, aprisionándole las extremidades, torso y cuello. Delgados dedos se clavaron en propias mejillas, mostrando
colmillo afilados clavarse en su labio inferior. Sonrió desquiciado, cabeza ladeada, y con un tronar de sus dedos, tack, tack, del sueño surgió
una marioneta frente a Hoshi, de forma masculina, se rasgos quebrados y rostro marcado por el dolor.
Era el padre de Hoshi, pedazos de su cuerpo cayendo y tronando en el piso. Parecía a medio morir.
"Su stern, su stern, su stern." Cantó, voz baja y seductora, bestia cruel y fría, cargada de tristeza."Te regreso a tu padre." Dijo, ahora voz plana,
cerrando sus ojos mientras más marionetas aparecían, y los mismos cadáveres que había obtenido esta noche se levantaban ahora como su
ejército."Medio muerto, pero ahí está. Sé que lo amabas. Él lo sabe, y sabe que intentaste salvarle, y fallaste. Y sabe que obtuviste venganza, pero
se pregunta, oh, Hoshi, como se pregunta el porqué no lo escogiste a él antes que esa venganza. No buscaste otros medios. ¿Sabes, Su stern, que
hay otros medios, si tu corazóon y almas siguen puros? Por supuesto que no lo sabes. Oh, no lo sabes. Si lo quieres de vuelta, solo debes tocarlo
y ---ah. Licht." Cortó, socarrón, de adrede no continuando su frase.
Y entre las ardientes llamas, Klagen se giró marcadamente hacia Ezra, al temperatura del lugar pareciendo disminuir bajo cero.
"Licht, licht, licht." Negó con la cabeza, expresión del rostro triste, llena de compasión. "Oh Ezra. Nadie puede curarle. Ningún lebenmaske te puede
ayudar. Dime, marioneta, porqué no le pides a tu Diosa-" Escupió el nombre, dejando en claro qué pensaba sobre ella."--que te lo devuelva?"
Ríe, y las ramas del árbol comienzan a tirar de las extremidades de Hoshi en distintas direcciones, atrapando ahora también a Eiko.
"No. No lo hará. Y lo sabes-por eso estás aquí. Vaya Diosa a la que sirves, Licht." Ríe y ríe con seguridad y burla, sus emociones absolutamente
destrozadas por dentro."Pero Licht. Hay una forma. Quieres saber cuál es?"
Le preguntó, acercándose, su pecho ardiendo de dolor y a punto de sollozar, emociones que simplemente odia.
"Lástima que no la sabrás. Yo podría haber sido tu salvación, Licht. Lücheln lo sabe." Sus ojos se tornaron brillantes con lágrimas que se rehusaba a
dejar car, ocultando su mirada tras su cabello."Y le enseñé, también, que si no sabes jugar con fuego, te vas a quemar."
Gritó, y todas las emociones que sentía, la furia, la desesperación, el dolor, la tristeza, oh demonios la tristeza, se las devolvió a Ezra, dejando un
vacío en su interior, y una bomba de tiempo en el Licht. Resopló, sudando, ahora de rodillas por el esfuerzo, pero calmo, con la cabeza fría como no
había estado hace días.
"Mi querida Kayla." Dice, voz vacía pero firme, una sonrisa afectada congelada en su expresión. "Puedes deshacerte de las otras dos. Éste lo dejaremos
de postre. He, he, he."
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Con sorprendidos se quedaban cortos. Atónitos era más la palabra, de haberla ellos sabido.
"Son niños malos~! No ven como dejaron a las pobres personas?!
Se miraron el uno al otro, gestos exageradamente horrorizados. Se juntaron, tomándose de
las manos, y mirando como Rinne limpiaba el lugar.
"Es la última vez que dejamos a un extraño con vida, Spiege!" Le mordió su hermana, diciendo
entre dientes y ojos rojos entrecerrados, descontentos.
"Fue tu idea, Elbid!" Le reprochó, reflejando su expresión y tono de voz. Se pusieron a discutir
de quién fue la idea, luego gritaron de que qué rayos iban a hacer, claramente había algo mal
con la machina! Que seguramente venía defectuosa de fábrica! Esos científicos eran unos
imbéciles! O parece que la tierra había tomado mucha lluvia la noche anterior!
"Arggggggggg" Se desordenaron ambos el cabello, tomando sus cuernos, completamente frustrados.
Y ellos no soportaban la frustración.
"Tsk. Si no coopera--" Dice Elbid, rostro deformado con molestia, levantando su tridente.
"--se elimina." Termina asintiendo su cabeza Spiege, lanzando su arma hacia la nuca de Rinne. Y lo
sienten, sus rostros palideciendo tres colores aún rodeados de tanto calor. Se miran el uno al otro,
horrorizados, machina olvidada, y se abrazan, el rostro de Spiege escondiéndose en el pecho de su
hermana, ambos temblando. Pasó lo que no querían! Lo que tenían que evitar! Pero ¿cómo, cómo?
Si Dante le había tranquilizado un poco, les había ganado un poco de tiempo.
Klagen había perdido los estribos. Y si había una frase que aplicaba a Klagen, es que después de la calma, viene la tormenta. Y las tormentas de
ese demonio estaban bañadas en sangre, desde hace más de 600 años. Por algo era el favorito de Él.
Se pusieron a llorar, aterrados. Mirando de un lado a otro, posándose en Rinne, en los cadáveres, solo para sollozar más fuerte.
No sabían que hacer.
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Viò en los ojos de Klagen un odio que sintiò removerse en su pecho, y que le causò temor, y en su mente sus manos la despedazaban, pero simplemente cayò, como si sufriera, como si algo le quemara desde adentro...
De pie. Y ahora si que la despedazaria, apretando los puños para prepararse. No se arrepentia de nada dicho, aunque puede ser verdad. Viò en sus ojos a un desquiciado lleno de dolor, y las ramas la atraparon con fuerza, sin poder moverse. Y apareciò su padre, destrozado... Apretò los dientes, sin mirarlo, mirando a Klagen con infinita impotencia. "Te regreso a tu padre. Medio muerto, pero ahí está. Sé que lo amabas. Él lo sabe, y sabe que intentaste salvarle, y fallaste. Y sabe que obtuviste venganza, pero se pregunta, oh, Hoshi, como se pregunta el porqué no lo escogiste a él antes que esa venganza. No buscaste otros medios. ¿Sabes, Su stern, que hay otros medios, si tu corazón y almas siguen puros? Por supuesto que no lo sabes. Oh, no lo sabes. Si lo quieres de vuelta, solo debes tocarlo y -" 'Con mi padre no', dijo, mordiendose el labio inferior y diò un grito ahogado al sentir como sus extremidades eran tiradas. Lo escuchò gritar y sus ojos se pusieron llorosos al ver a su padre asi. Impotencia. Riò, sin medirse. 'Al menos esta ahi', hizo una mueca de desagrado. 'Sè que lo amabas, ël lo sabe, y que sabe que... sabrà que intentaste encontrarlo?', dijo, emulando sus palabras. Apretò los dientes y mirò abajo, no queria ver su cuerpo otra vez. 'Y se pregunta, Klagen, quizas se pregunta por que estas destruyendo todo antes de encontrarle, antes de BUSCARLO...', escupiò las palabras y las lagrimas finalmente asomaron sus ojos. 'Claro... No lo sabes', dijo, con voz dura. Mirò a Kayla y luego a Ezra. Debe haber alguna forma... quizas...
Uuh Tammy mori, condene a mi pobre Hoshi xDu |
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No pude evitar sonreir hacía tal estupidez, así que aún quedaban con vida marionetas que no sabían valroar su vida, en el fondo, muy en el fondo era gracioso. De no ser por la tristeza que esa frase causaba a Klagen. Verlo así a el era tan deprimente pero el shock fue más grande de lo que me esperé y ahora si la situación realmente me exitaba, no ardería en llamas, no volarían cabezas, sería mucho peor, el traera el infierno a la superficie.. pues ¿Qué parte de "Él ha matado por cosas menores" no quedo clara?, esa frase, "No lo sè, dime, dònde lo haz abandonado, Klagen?' eso en definitiva es una sentencia de muerte...
Y Tal como lo esperaba Klagen no enfureció, enloqueció. Porque no exisistía otra explciación para esa expresión tan lujuriosamente demente. Y es que la verdadel era una persona realmente tranquila, pero ha de conocer el poder que esconde.
Incluso los gemelos se asustaron, los pequeños llorones... hemos visto este ataque repetirse muchas veces durante la historia, pero jamás con provocando una calamidad tan atroz como esta. ¡¡Sangre, Sangre Sangre!!!! que maravilla mas grande encontraba aquí. Una fiesta carmsi.. podría danzar de felicidad pero no estaría correcto, no si Klagen sufría la ausencia de Lucheln, ¿donde demonios se había metido el pequeño?
"Mi querida Kayla." Dice, voz vacía pero firme, una sonrisa afectada congelada en su expresión. "Puedes deshacerte de las otras dos. Éste lo dejaremos de postre. He, he, he."
Por fin Klagen volvía en si.
_ Encantada_ le respondí acercandome por fin, no me gustaba interrumpir...
Lleve mi mano hacia mi espalda y desenvaine mi arma, una gran espada negra, creada particularmete de maldad, brillaba impecable pese a la cantidad de sangre que ha corrido por ella. Me acerque de primera a Eiko, "Esto sera rápido para ti" dije con una sonrisa complaciente, atravezandole la espada por todo el toraz, definitivamente había destrozado un par de sus organos vitales, claro que rápidamente me corrí hacia atras no quería que me escupiera sangre en el rostro.
'Y se pregunta, Klagen, quizas se pregunta por que estas destruyendo todo antes de encontrarle, antes de BUSCARLO...', escupiò las palabras y las lagrimas finalmente asomaron sus ojos. 'Claro... No lo sabes'
Y entonces me acerque a Hoshi, tome un mechon de su cabello, mm suave que asco... lo jalé y luego la abofetee. razgando su labio separandolo de la espina que le atravezaba. "Eso por no saber cuando callar" y esto dije atravezando mi espada en todo su hombro, eso la paralizaría y al mismo tiempo la dejaría inutil, "Y esto porque te lo mereces" me voltee aleejandome pero me arrepenti, volvi a girar hacia ella y atravece nuevamente la espada a la altura de la cadera justo en el centro. "Y este último solo por entretención, ya que Klagen hizo un gran trabajo dejandolas inmovil y resulta algo aburrido pelear asi"
_Ahora si he acabado, ¿No pensarían que realmente las iba a matar o si?_ dije agachandome para recoger un par de trapos rasgados de uno de los cadavares, entonces me puse a limpiar mi espada, no pude evitar lamer un poco de la sangre que había en ella. La vida es el mejor castigo que se les puede dar, morir solo les quitaría el dolor, solo las haría dejar de suffrir como dicen muchos. Ahora podre escucharlas gemir de dolor, sufrir. Dejarlas con vida hara que aprendar a temer, a respetar. Dejarlas con vida me hara gozar con sus llantos, dejarlas con vida podra fortalecerlas, pero también fortalecera su deseo de vengaza ¿o no Hoshi? y una vez que su alma este completamente negra les dejare morir cometiendo el peor pecado: suicidarse.. Porque esa es la única opcion de ser liberada de las cuerdas que te atán, morir. Asi que no sere yo quien las libere. Ya las he castigado. Y si sobreviven, sera mejor así podre jugar con ustedes nuevamente en el futuro.
Eso fueron sus ultimas palabras antes de envainar nuevamente su espada. _Ah si casi olvidaba algo, las llamas se han alejado un poco sería una lastima que no apreciaran lo bellas que son. Entonces estire mis manos hacia adelante y prendí fuego justo bajo sus pies, que divertido sera verlas tratar de escapar.
ME acerque a Klagen sin llegar a tocarlo, estaba satisfecha de su gran acto, sobre todo cuando aparecipo al padre de aquella arpía. "Padres, todos los nuestros han sido pura escoria" pense mirando de reojo a los gemelos. Pero Klagen era un buen padre, o no más bien un gran hermano, por lo que entendía su dolor por la desapareción de Lucheln para ellos las marionetas que siempre han vividos rodeados de "amor" y "luz" palabra que incluso en pensamiento suenan con repudio no comprenden el dolor de perder a alguien a quien proteger. _Esta bien, esta vez lo encontraremos, pero no hagas que sea más dificil, recupera tu templante Klagen.
__________________________________________________ Okei Mary adoro tus bombas siempre me inspiraaan muchiio. Tammi no se preocupe que te dije que trabajaria en mi lado oscuro y KAyla me esta quedando demsiado malvada :D ademas es cosa de acostumbrarse numas a su nuevo nombre.
EDITO porque mari posteaa al mismo tiempo que yo, te dije que me esperaras ;___;
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Seguía barriendo los escombros en el mismo lugar cuando paf, sintió como si hubiese sido picada por un mosquito (si es que pudiese sentir). Y chispas empezaban a salir de donde estaba clavado el tridente junto con un liquido rojizo (sangre? aceite?). Solo se enteró de lo ocurrido por sus alarmas internas en caso de fallos. "Ah." emitió, ya no con voz alegre y chillona si no con una voz distorsionada; su caja de voz se había roto.
Se acercó a los gemelos ahora sollozantes, y sin ningún ritual retiró el tridente de su cuello y lo deja caer, y del agujero que quedó brotaban pequeñas chispas y cables y tuercas y trozos de piel falsa y metal. "Se los de-ue..vo" su voz se escuchaba monótona, pero su rostro tenia la misma sonrisa de siempre, la cual cambió al ver a los pequeños desesperados.
"Ya y-..." se agachó hacia los pequeños y los abrazó casi maternalmente "n- l..or-n..." su voz distorsionada era casi insoportable y arruinaba cualquier sentimiento. Y de la nada se sobresaltó, como si una idea le llegase en una descarga eléctrica.
Se levantó de donde estaba, con Elbid en un brazo y Spiege en el otro. "Ls ll--ar.. do..d ss ..m-go" apenas se le entendía, y avanzó con ellos no hacia la copa del arbol, mas bien todo lo contrario. Y aunque los dos teufels se movieran, pataleen y tratasen de liberarse lo más fuerte que podian, Rinne los tenia fuertemente agarrados.
Y al llegar al borde de la rama, Rinne no avanzó más y quedo contemplando el panorama que se le presentaba: el mar de llamas y la enorme humareda que llegaba hasta casi su altura, la horda de marionetas caidas que se levantaban aunque estuviesen cayendose a pedazos, un par de marionetas a punto de ser descuartizadas, alguien más...; todos ellos brillando en medio del fuego y las cenizas.
Y la machina quedó boquiabierta, casi olvidando los pesos extras en sus brazos. Y extrañamente sonrió: El color rojo tiene un brillo bonito, pareció pensar, antes de lanzarse al vacío.
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me disculpo por la falta de tildes m(_ _)m
ahora que recuerdo, en la peli de avatar(el verdadero e_e) sufria al ver como los barcos de la nacion del fuego tiraban esas enormes cantidades de ceniza yo ahi toda "nnooo calentamiento globaalll *twitches*"
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La Teufel se le acercò y le tomò el cabello, Hoshi frunciendo el ceño y luego, la bofeteo, dejandole su mano marcada en la mejilla. Habia logrado luego de mucho patalear que una de sus piernas se soltara de las ramas, y asi sujeta como estaba, tenia suficiente fuerza, la que utilizò en darle una patada a Kayla en el estomago. No le dejaria nada facil... A nadie.
Pero esa patada era una cosquilla para Kayla comparado con lo que le hizo luego. Primero su hombro y luego, su cadera. Diò una bocanada de aire aguantandose el dolor como pudo, rechinando los dientes y sus lagrimas cayendo al fin. Estaba aturdida por el dolor, que al comienzo no era nada, pero se hacia mas agudo con el paso del tiempo. Y la oia, oia su molesta voz e hizo una mueca de desagrado, mirandola, queriendo callarla. 'Como si... si fuera a darte... en el gusto, querida...', dijo con ironia en la ultima palabra y dificultad al respirar, mordiendose el labio inferior ensangrentado y apretandolo para no soltar sonido alguno. Estupida niña, la harè pedazos...
Luego, fuego. Y su padre la veia morir tal cual como ella lo vio, herido a muerte y mas tarde quemado. Habian varias diferencias esta vez: el estaba muerto aunque su, cuerpo?, se encontrara ahi, y nadie vengaria nada por ella. Llorò en silencio; estaba sola, desangrandose sin poder hacer practicamente nada, llorando y a punto de ser quemada, intentando morir dignamente al oponerse a toda idea de la insoportable Teufel, pero despues de todo, solo los arboles mueren de pie.
No habian intentos, era hacer algo o hacer nada, y preferia lo primero. Empezò a mecer lentamente su pie con las pocas energias que le quedaban, y de la sombra deformada en las llamas, naciò una silueta difusa, que caminò hasta desatar parte de las enredaderas de su otro pie antes de esfumarse. Un profundo gemido escapò de sus labios, mientras apretaba los ojos e intentaba pensar en otra cosa aparte del dolor.
Si tan solo un milagro apareciera o sucediera... Pero no, solo las buenas estrellas cumplen los deseos cuando se lo pides, y no sabia de ninguna. Entrecerrò sus ojos con los labios apretados firmemente, intentando pensar entre el dolor, esperando que no la dejara inconsciente demasiado pronto. Sus esperanzas se habian vuelto cenizas hace mucho tiempo... |
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¿Dolor? Solo habia visto como aquella Teufel habia clavado su espada en mi, la sangre empapaba mi cuerpo, estaba arrodillada, tapando mi abdomen Mi kimono, se ensuciara... con la fuerza que me quedaba, comenze a sacarlo, para quedar vestida en el Nagajuban, el cual ya estaba empapado de sangre, pase un dedo sobre la herida, el cual quedo completamente teñido en rojo, lo acerque a mis labios para lamerlo, y luego sobre el kimono, comenzando a dibujar una mariposa entre su tela. Me intente poner de pie, sujetando la espada que ahun permanecia oculta, veia a aquella joven a mi lado, pero parecia, como si sufriese mas, seguro ella tenia algo por que luchar, yo solo, he sido una cobarde que he uido, y no he podido enfrentar a mi padre. Todos tienen algo por que luchar, pero, ellos tienen la valentia y lo hacen por su propio honor. Hice aparecer mi espada, y volvi a cortar donde sangraba, donde se inicio una llama que cubrio la herida, siempre me habia gustado la sensacion del fuego rozando mi piel, poco a poco, el fuego comenzo a extingirse, y al mismo tiempo, la herida, pero, el dolor permanecia ahi, pero no aumentaria al menos. Volvi a colocarme el kimono, que se habia manchado un poco de barro. Vi a la chica con la cual habia estado, una silueta se acerco a ella, para desatarle su pie. Me acerque a ella, gire la cabeza y veia al chico ahun herido, ¿Que se supone que haria por ellos? |
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Vio como la expresión del Teufel cambiaba. Ya no se le veía más esa sonrisa sádica, llena de furia y pudo ver también, triunfante, como se desmoronaba. La tristeza, ese sentimiento que tanto odiaba, le consumía, su dolor manifestándose también físicamente. Cayó sobre una rodilla, incluso su respiración había cambiado. Ezra dio un paso atrás, observando la cadena de emociones que había liberado en Klagen. No pudo evitar sonreír.
"Lanthánides" . Gimió, manos en su rostro, desgarrando, y sacudiendo la cabeza como para de esta manera también sacudir aquellos pensamientos. Pero la sonrisa se borró de su rostro en cuanto el Teufel se puso una vez en pie y atacó, esta vez Hoshi era su objetivo. Los látigos de madera aprisionaron a la chica y con un tronar de dedos se materializó una marioneta. El porque no huyó en ese mismo momento, en el que toda la atención de Klagen estaba bien en el dolor o en la chica, no lo sabría decir. Le fascinaba/asqueaba la demostración de poder, la invocación de una marioneta que claramente no pertenecía más entre los vivos. "Su stern, su stern, su stern. Te regreso a tu padre” y al igual que esa marioneta rota, muchas más se levantaron, la mayoría de ellas sobre su propia sangre y pedazos. Klagen se había armado un ejército. Aún débil por la carga de la desesperanza era capaz de obtener las fuerzas para despertar a tantas marionetas. “Medio muerto, pero ahí está. Sé que lo amabas. Él lo sabe, y sabe que intentaste salvarle, y fallaste. Y sabe que obtuviste venganza, pero se pregunta, oh, Hoshi, como se pregunta el porqué no lo escogiste a él antes que esa venganza. No buscaste otros medios. ¿Sabes, Su stern, quehay otros medios, si tu corazóon y almas siguen puros? Por supuesto que no lo sabes. Oh, no lo sabes. Si lo quieres de vuelta, solo debes tocarlo y ---ah. Licht." Estaba casi en un trance, un trance entre ver las marionetas destrozadas volver a moverse, el espectáculo frente a Hoshi y las sádicamente dulces palabras del demonio. Súbitamente toda la atención de Klagen regresó a él. "Licht, licht, licht." Negaba con la cabeza, su rostro casi compasivo –¡como si eso fuese posible!- "Oh Ezra. Nadie puede curarle. Ningún lebenmaske te puedeayudar. Dime, marioneta, porqué no le pides a tu Diosa que te lo devuelva?" ‘Aún no está con ella’ pensó desesperadamente, pero se dio ceunta que no había manera de saberlo realmente. ¿Podía ser que hubiera muerto mientras estaba el aquí? No, cuando abandonó el Templo del Cielo la enfermedad no estaba tan avanzada, tomaron meses para que avanzara tanto como la de su madre. Klagen rió y las ramas aprisionaron también a Eiko. Estaba por su cuenta ahora "No. No lo hará. Y lo sabes-por eso estás aquí. Vaya Diosa a la que sirves, Licht." No, Gaia no intervenía en los males carnales, Gaia no tenía que…la risa de Klagen mofándose resonó por sus pensamientos. Si hubiese tenido un poco más de control habría notado como esta risa estaba hueca, contraria a lo que sucedía dentro de él Pero Licht. Hay una forma. Quieres saber cuál es?" El Teufel estaba ahora peligrosamente cerca.Casi inconcientemente asintió con la cabeza. No estaba admitiendo nada ante el demonio, pero si había una forma…"Lástima que no la sabrás. Yo podría haber sido tu salvación, Licht. Lücheln lo sabe." De nuevo Lücheln! ¿Qué le había ofrecido este demonio? Pero a esta distancia Ezra pudo ver, aunque sea por una fracción de segundo, las lágrimas que se habían asomado en los ojos de Klagen. Pero tan rápido como habían aparecido se fueron, ocultas por los mechones de cabello rojo que caían sobre su rostro. Y le enseñé, también, que si no sabes jugar con fuego, te vas a quemar." Luego de la relativa calma, la tempestad. Klagen gritó, todo el aire escapándose de sus pulmones. Y junto al aire, las emociones, la tristeza, el dolor. El demonio se había quedado vacío y Ezra se había convertido en el receptor. El golpe súbito de la suma de todas estas emociones lo derribó al momento. Le ardía el pecho, le punzaba la cabeza ¿Cómo había podido Klagen pararse, hablar siquiera en ese estado? Quería arrancarse aquello que le dolía, se llevó las manos al pecho y permaneció así, retorciéndose en el suelo. Odiaba, odiaba tanto ¿A quién? ¿En quién podía descargar esa furia? No no no, no odias, amas. Debes recuperarlo. Todas esas emociones ajenas se hacían lugar en su cabeza, confundiéndose con las propias y alimentándose entre ambas. La cura, Lulú…Gaia, muerte, odio, furia, temor, tristeza… En ese momento algo dentro de él se había roto. Quería llorar, gritar, quería desaparecer, quería fundirse, simplemente dejar de existir. Pero no podía llorar, no esa era una forma de catarsis, una manera de liberar todo lo que tenía adentro y por más que intentara esta liberación no llegaba.
El demonio ahora estaba vacío de emociones, y Ezra se había convertido en su catarsis. ¿Cómo sanaría él? ¿Morir? No, aún tenía que recuperar a Lulú ¿Porqué a Lücheln? Ni siquiera le conocía tanto. Pero lo quería, lo quería, era lo único que importaba. Por primera vez su mente razonó contra su delirio: sentía lo mismo que Klagen. No sólo le había devuelto la tristeza, sino todo lo que iba con ella. Comprendía al demonio, -no…comprender no es la palabra..más bien sabía lo que sentía- ahora que lo vivía en carne propia. Si, Lücheln sería su catarsis. Debía encontrarlo, sólo eso calmaría a Klagen –y con ello a sí mismo. Pero ¿porqué ayudaría al demonio? No, debía matarlo, así se hundirían ambos. No, no lo haría. Le quería demasiado, se mataría antes de hacerle daño…'Y se pregunta, Klagen, quizas se pregunta por que estas destruyendo todo antes de encontrarle, antes de BUSCARLO...' alcanzó a escuchar, apenas, la voz de Hoshi. Su mente aplaudió el valor de la chica, el Teufel debía aprender a medir lo que dice. Pero su corazón, su corazón sufrió una nueva onda de tristeza. Su único consuelo era que a Klagen le había dolido tanto el comentario como a él.
"Mi querida Kayla.” Dijo, refiriéndose ahora a la Teufel que estaba parada tras él “Puedes deshacerte de las otras dos. Éste lo dejaremos de postre. He, he, he." Ezra abrió los ojos de par en par, comprendiendo que su tortura apenas había comenzado. Encantada contestó simplemente, al tiempo que se aproximaba a su primer objetivo. La chica del parche. La primera persona que conoció en el Cardinal, que su mente admiraba pero su corazón había aprendido a resentir. Kayla le dio una estocada en el hombro y en la cadera, no sin antes recibir una patada por parte de ella. Siempre luchando, no importa qué.
Su siguiente blanco; Eiko. Embistió contra ella tan rápido…al instante siguiente se le formaba una mancha de sangre en el kimono. Eiko se despojó de la prenda, casi con tranquilidad y se sanó la herida con un extraño fuego… La vida es el mejor castigo que se les puede dar, morir solo les quitaría el dolor, solo las haría dejar de suffrir como dicen muchos. Ahora podre escucharlas gemir de dolor, sufrir. Tenía razón. En este momento, lo que más deseaba era terminar con todo. ‘No, primero debo encontrar….’ Pero Kayla al parecer no había terminado, pues las llamas que habían cedido terreno habían sido re animadas por la Teufel.
Miró a Hoshi, y a Eiko. Ambos cuerps extenuados por el maltrato, sus ropas manchadas por su propia sangre y la de otros. Miró a Kayla y al ejercito de marionetas que se habían levantado del barro. Y miró a Klagen, quien observaba todo casi con una sonrisa.
Definitivamente, si se iba a hundir, se llevaría al demonio consigo.
Se puso de pie, aún sin saber bien cómo y corrió en dirección al demonio. Su fuerza no era comparable a la de él, pero si servía, de al menos una distracción de segundos. El sería el postre después de todo ¿no? Kayla estaba ocupada con ellas, y Ezra era rápido. No utilizó ningún poder especial, no en el estado que estaba el poco control que tenía estaba perdido. Podría terminar haciéndose daño a sí mismo. En vez, corrió tan rápido como sus piernas le permitieron y tiró todo su peso contra el Teufel, cayendo ambos. Y golpeó. Golpeó con puntería ciega, sin realmente importarle a donde se dirigían sus puños, o si estos le hacían más que leves molestias al pelirrojo. Sólo sabía que estaba liberando parte de la carga. ‘Y la violencia, ¡Ponme atención Ezra Délire! La violencia siempre termina en auto destrucción. Puedes alargar tu vida carnal unos años, pero decrementas siglos de la vida espiritual’ Una parte de su mente recordó lo que alguna vez le dijo el viejo sacerdote. Pero todo él estaba demasiado roto para importarle esa vida.
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Perdón porque este masivamente largo D: asldkjalksd amé tanto los posts de todaaaaas ;w; <3 son tan inspiradores XDD y no quería dejar a nadie afueraa y...!! ;o; No lo vuelvo a hacer lo juro uwuU EDIT: porque estaba todo desacomodado xDD
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De: Kurumi |
Enviado: 01/02/2011 03:49 |
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Condenado el dia que se me ocurrio pasear por el cardinal de la tierra - Maldijo para sus adentros. Si hubiera querido fuego, no habria venido precisamente aqui - murmuro malhumorada, y al mismo tiempo, preocupada por lo que estaba pasando.
El aterrador paisaje solo le causaba malos recuerdos. El fuego de la superficie... era tan parecido al fuego que habia acabado con todo en su vida...
Sacudio la cabeza y dejo que el viento se llevara sus pensamientos. Ya tendria tiempo para tonterias nostalgicas, ahora, seria mejor que se consentrara en no quedar atrapada bajo escombros ardientes. Si, eso estaria bien por el momento.
Al menos aun recordaba las cosas que habia aprendido durante su entrenamiento. El hecho de que "surcar los tejados", practicamente volando sobre ellos, le resultara facil, hizo que se relajara un poco, y apenas apollando la punta de su pie derecho, ya estaba tomando impulso para cambiar de posicion antes de que el techo se desmoronara bajo sus pies.
Avanzó a gran velocidad y rescato una quinta marioneta de ser aplastada. Habia apagado varias casas, pero el fuego se extendia demasiado rapido como para que eso sirviera de algo...
Yuki que le seguia velozmente, aulló de una forma lastimera y señaló hacia el norte. Fuera lo que fuera que habia oido, no era bueno. Pero por lo visto nada podia ser bueno ese presiso día.
Tomo el impulso necesario con ambos pies, y en un abrir y cerrar de ojos ya se encontraba viajando en esa direccion.
Lllego a un inmenzo árbol, que milagrosamente aun no habia sido totalmente consumido por las llamas. Se agasapo en las sombras y observo la escena. Teufels... - se dijo en un susurro con el desagrado patente en su voz. Ahora sabia de donde provenia el fuego....
Pero aun no sabia que estaba ocurriendo, estaba en desventaja. Tantos años de pensar tacticamente habian dejado su marca. Le habian enseñado a sobrevivir... Con un simple gesto y sin pronunciar palabra, su hermoso fuchs habia dejado la rama en la que se encontraba y dezplasandose a gran velocidad arremetio contra la Teufel que portaba una gran espada negra practicamente deborando la mitad de su muñeca con sus afilados colmillos.
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Sin sentir placer, sin sentir agrado, sin sentir absolutamente nada, Klagen
veía como el Licht se desgarraba como él. Como Ezra sentía la desesperación
de él, todo lo que le habían arrebatado.
Y luego se vino contra él, la Speed de Ezra superándolo con creces, cayendo
al suelo, golpeando fuertemente su espalda y cabeza, y luego el Licht le daba
golpes que sí, demonios, dolían, dolían!, y no deberían doler porque todo se
lo había traspasado al chico sobre él. Dolía, y le hacía daño cercano, teniendo
el Licht más fuerza que él, aún en ese estado.
Y le estaba tocando, o demonios, le estaba tocando, y sintió de nuevo, ese asco,
ese disgusto, oh no, le estaba tocando y porqué no le dejaba? No quería que le
tocara; que se saliera de encima suyo!--Kayla tiene razón, Klagen, eres un Teufel,
contrólate! A Lulú no le sirves así, así no lo encontrarás--
Pero estaba al borde de un ataque de pánico, porque Ezra le estaba tocando y
sentía nuevamente sus emociones, amplificadas, y Ezra le estaba tocando. Abrió
su boca, tratando de respirar, bocanadas de aire, moviendo su cabeza de un lado a otro, y el padre de Hoshi desmoronándose al igual
que la mitad de su ejército. Estaba muy débil -- y el licht le seguía tocando!
"Woof!" Siente una breve lamida en su mejilla, justo después de dejar de sentir el toque, y el peso sobre él. Dante había terminado de
alimentarse, y se encontraba ahora en sus cuatro patas, cabeza gacha, orejas bajas, y dientes revelados; gruñendo amenazadoramente,
completamente enojado.
Su amo estaba peor de como lo había dejado, y peor, este Licht estaba sobre él, tocándole, solo roce piel con piel era suficiente para
lanza a Klagen en un disgusto que usualmente lo dejaba sin apetito y completamente asustado; un Klagen debilitado, y sin Lücheln...
Su amo no se había puesto en pie. Solo estaba ahí, de espalda, mirándo a Dante, ojos brillantes, y cuerpo laxo, moretones ahora
cubriendo su piel. Sentía ganas de vomitar, estaba completamente asqueado. Y solo tenía una necesidad.
Lücheln.
Si todos entendían que había venido por lo suyo, y cuando no se lo entregaron, decidió por la fuerza -- ¿por qué le molestaban? ¿Qué
se entrometían ellos? Se puso en pie, dando media vuelta, sus articulaciones sonando y un evidente temblor en sus extremidades. Dio
un paso, luego otro, en dirección hacia donde creía se encontraba su Lulú, su pequeño. Él lo protegería. Sólo debía encontrarlo primero.
Pasó por un lado del Licht, quien se encontraba caído, un gran mordisco en su brazo izquierdo, sin mirarle. Sólo adelante. No se tomó
la molestia de crear más marionetas, dejando que su ejército siguiera destruyendo lo que a su paso encontraran--Eiko, Hoshi, Ezra.
Les quería ver sufrir, tal como dijo Kayla--verles sufrir, y quemaría a Ezra en el fuego de Dante, partiría por la punta de sus dedos,
mostrándole que nadie puede tocarle excepto Lulú; luego--
Y se desmaya nuevamente, escuchando los gritos de los gemelos a lo lejos, cayendo lentamente, como si su única musculatura útil
fuese la antigravitatoria.
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Perdón la tardanza! Llegaron mis amigos a vacacionar conmigo y no entro a la pc casi nada! Tal vez demore, pero sigan la historia pr favor!
Te ha quedado genial el post mi grey-nette ;__________; todo y largo al igual que el de Suus, y oh están geniales y ya me voooy!!! Y las frases de Mary-pon
y ojalá Yuki entre pronto a morder a Dante xD
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No llegaba a ninguna idea en especifica, ninguna viable al menos, no en el estado en que se encontraba. Moverse un poco mas seria desangrarse o intensificar el dolor al punto de ser agonizante. Viò a Eiko liberarse con tanta facilidad, y la envidiò en cierto modo. Pero por què tanto esfuerzo a sobrevivir? No habia nada para ella en este lugar, nada, y aun asi se esmeraba tanto...
Ver a Ezra caer, retorcerse de dolor y pudo por poco sentir el dolor del demonio. Klagen simplemente lo habia sobrellevado lo mejor que pudo, pero Ezra... Ezra sufria. Queria librarse, moviendo sus brazos sin zafarse de las enredaderas, un gruñido de dolor por ello. 'Estupida niña!!', gritò enfadada a Kayla, respirando agitado a causa del esfuerzo, sintiendo como la sangre comenzaba a escurrirse otra vez por su costado, viendo como de pronto una chica de cabellos aguamarina empujaban a la teufel y la hacia caer al suelo.
Ezra se lanzò sin màs contra Klagen, golpeandolo a ciegas, el demonio intentando respirar y luego su padre se volvio de a poco tierra junto con los otros, creyendo ver una vaga sonrisa en sus labios. Simple imaginaciòn. El fuego tambien se debilito, bajo sus pies se extinguiò casi por completo y las enredaderas por fin la soltaron, cayendo al suelo con el hombro equivocado. Maldijo un poco antes de sentarse, rompiendo una parte de su falda para hacer una venda casual en su hombro, largandose a llorar sin motivo alguno, el rostro sucio por la ropa, mientras intentaba desesperadamente limpiarlas y no dejarse oir... Ah, que penosa imagen. Se puso de pie con lentitud y con ayuda de su Katana, viendo como Klagen caia lentamente, dandose cuenta de los moretones en la piel. Ezra se veia mucho mas debil de lo que parecia, pero con toda esa pena, esa rabia y ese odio, quien no se volvia fuerte? Mirò al chico y sonriò levemente, las lagrimas aun rodando por su cara.
Escuchò grito asustados, histericos a la lejania y llantos de niños. Entre los llantos, muy lejos, pudo distinguir el murmullo de algunas risas y quizas, si su imaginaciòn no le engañaba, sollozos. Suspirò cansada y mirò a Kayla rapidamente, màs tarde le devolveria el favor que le hizo de destrozarla. Y comenzò a caminar, lentamente, entre el fuego, buscando aquellas risas, esperando no equivocarse, sollozando a ratos... Si, sabia lo que era perderlo todo, todo lo que es importante en el mundo para ti, sabia lo que era sentirse abandonado. El lo estaba; el pequeño tambien. Podria ayudarle, esperaba ayudarle, sabiendo que lo mas probable es que se ganò su total odio despues de todo lo que dijo, pero no importaba; tanto dolor nadie deberia sentirlo, y debia llenar su vacio, como si llenara el suyo propio. Un modo de redimirme... Sacò una nueva lagrima de su mejilla y llegò finalmente a un gran arbol, cuyo tronco tenia una abertura como si fuera una puerta, y sus ramas emanaban fuego, sin consumirse por completo. Se dejò caer al suelo sentada, cansada, apoyandose en su katana. 'Si estas ahi, Lucheln, por favor... sale. Si no... devuelvelo...', dijo con lentitud y entre algunos sollozos, dirigiendose al niño o a quien lo tuviera cautivo, llevando una de sus manos a la herida en su estomago, apretandola para intentar calmar la sangre. La vista se le volvia borrosa a ratos...
Debia contestar... y me demore una hora D':! perdon por lo largo, pero estaba esperando avanzar y asdf tamy todo es tu culpa! *le pega* |
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Golpeaba frenéticamente, cada puño acompañado por su propia ración de ira. ¡Y el teufel no se defendía! ¿Porqué no lo hacía? ¿Creía que era un juego? ¡No estaba jugando! Por alguna razón el hecho de que Klagen aceptara cada uno de sus golpes sin poner mucha resistencia le fastidiaba aún más ¡Defiéndete Maldita sea! practicamente le gritó, incapaz de encontrar la razón por la cual quería que el demonio se resistiera. Simplemente se lo atribuyó a las emociones que no le pertenecían, todo era su culpa.Pero en vez de defenderse, el teufel se veía cada vez más al borde de un ataque.
Repentinamente sintió una fuerte punzada en su hombro izquierdo. Y allí estaba Dante, el hellhound que había llegado como de la nada a cumplir lo que Ezra tanto había pedido. Sintió como los colmillos penetraban su piel, desgarrándola. Un grito de dolor se escapó de sus labios mientrar era literalmetne arrancado lejos del cuerpo del demonio. Sintió como la mancha de sangre se extendía en su ropa, y el dolor hacía que fuera difícil pensar. Pero mientras mayor era el dolor físico más se alejaba su mente de sus emociones, a tal punto que cada punzada era casi bienvenida '¿Me habré vuelto masoquista?' Se le ocurrió, pero descartó la idea casi inmediatamente. No, no le gustaba sufrir, pero habían peores sufrimientos. Miró en dirección donde suponía debía estar el caido Teufel, solo para encontrar que no estaba allí, ni tampoco su fiel hellhound. 'He de haber perdido el conocimiento unos instantes..' Pero en esos pequeños instantes la escena había cambiado radicalmente. Kayla se hallaba luchando contra una joven de cabello azul que parecía haber salido de la nada. Eiko estaba libre de toda rama y parecía lista a actuar y buscando a Hoshi con la mirada descubrió que esta también se había liberado. Con la vista algo desenfocada por momentos (ya sea por el humo o por cansancio) alcanzó a divisar a Hoshi recargándose en el tronco de un árbol cercano. Se levantó lentamente, su mano derecha apretando fuertemente la herida de su hombro izquierdo para prevenir demasiada pérdida de sangre. Decidió ir en su dirección; la joven podía reponderle un par de preguntas...
Avanzó lenta y torturosamente por el suelo enlodado, evitando ser percibido por Kayla. Estaba seguro que aún no se había olvodado de la orden de Klagen de deshacerse de todo lo que quedara y fue cuando la vio de nuevo; la joven del cabello azul ¿De dónde podría haber salido? ¿Sabría en qué se metía al ayudarles? Pensó en llamar su atención para..advertirle? Lo que fuera, pero eso llamaría la atención de la teufel también, así que siguió su camino en dirección al árbol. Apenas llegó a el se dejó caer en el tronco hasta llegar al suelo. Respiró hondo varias veces tratando de reprimir un gemido. Hoshi parecía tener sus propias buenas raciones de heridas aquí y allá, siendo la estocada que Kayla le había dado en la cadera la que más le preocupaba. "Me di cuenta que nunca supe tu nombre" le dijo, irónicamente. ------------------------------------------------------------------------------------------------ yo quisiera estar de vacaciones D: estoy en semana de examenes parciales ;__; pero entramos a puente :D diviertete mucho por mi tammy nee!!
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Y caían, y caían y seguían cayendo sin fin. Y ambos teufels gritaban, y lloraban, y gritaban llorando y lloraban gritando, sin percatarse de que aun no estaban estampados contra el suelo. Y la machina reía, y reía, y seguía riendo distorsionadamente, hasta que se percató que aun no estaba cerca del suelo y que seguía cayendo, no obedeciendo a las leyes de caída libre que parece que fuese su única verdad en este instante, buscando y sintiendo que la oposición era de parte de los gemelos.
Sin buscar más aprobación se soltó de ellos, y lo que le hubiera tomado casi medio minuto duro dos... uno... Boom! aterrizó fuerte (aunque no tan fuerte como esperaba), y la tierra crujió levemente bajo sus pies por el impacto, levantando polvo, nublandolo todo. Y la machina seguía intacta.
Sus ojos empezaron a titilar. Ah, otra vez esas alarmas molestando... Arrancó una tira de tela de su vestido y lo ató en su cuello fuertemente con un lazo; sus ojos dejaron de destellar y volvieron a la normalidad... al menos eso las parará por un momento.
Ya cuando la polvadera se asentó pudo distinguir dos cuerpos arrimados a un árbol, ambos mal heridos, pero Rinne apenas se fijó de eso y se acercó a ellos rápidamente, con una sonrisa amplia que no encajaba en el ambiente moribundo de las otras marionetas. "Hola, que hacen?!" les habló sin ceremonia, voz normal aunque con mucho ruido de fondo, acercandoseles tentada a tocar sus heridas abiertas.
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