Es una niña muy soñadora, risueña y positiva, aniñada y sincera.
Es algo enamoradiza también, pero son pequeños crushes momentáneos, esto ella mismo lo sabe, pero no puede evitarlos~!

Se apuntó para convertirse en Windsohn, y aunque es muy débil sigue los entrenamientos, nunca rindiéndose en su fin. Tiene que conseguir sus alas!

Le tiene pavor al agua, especialmente al agua en movimiento, y no sabe nadar, prefiriendo estar más que segura en la orilla y a varios metros alejada del mar. Ah, pero le gusta la lluvia. Oh, si tan solo fuese una lluvia de estrellas~

Le gustan mucho, mucho, demasiado las estrellas. No hay ni una sola noche en la que no se ha pasado horas y horas contemplando el cielo estrellado, con telescopio y mapa de estrellas, o a simple ojo desnudo. Disfruta de ellas sin ser experta en el tema.
Y podría decirse que es una de las mayores razones (si no es la única) por las que quiere ser Windsohn y se esfuerza para serlo. Para volar y volar libremente, y llegar hasta su estrella.
Después de todo -y de eso está segura-, al morir no quiere volver a la tierra. Quiere convertirse en polvo estelar.

Su mascota desde muy joven, Gilder (no es un nombre bonito! como eres lindo te llamaré Giru!), es un ave originaria de algún pequeño nido remoto entre los Cardinales de Fuego y Tierra, siendo su especie un ave de papel. Ah, pero no es extremadamente combustible, y hasta podría decirse que dentro de sí hay una especie de fogatita, que le da energía. Pero sí, no traten de quemarlo al pobre (;_;). Es vegetariano (come papel también) y cada cierto tiempo es usual que regrese a su nido para "mudar de piel", volviendo con pequeños o notorios cambios en su forma.
Es muy liviano a pesar de su apariencia rechonchita, y puede volar largas (aunque no tanto) distancias, pero a poca velocidad. Mitsume suele montarse en él (o mejor dicho aferrarse a él) para volar un poco, pero lo único que logra es mantenerse a flote por un pequeño rato.