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*Es el momento en que la noche pierde poco a poco ante la luz marcando ahí el inicio de un nuevo día para el santuario de Athena uno que marcara finalmente la aniquilación y exterminio de cada uno de los santos de la diosa protectora de la tierra y que será de igual forma el inicio del reinado del emperador del inframundo Hades, es ahí donde los escalones apenas iluminados por una naciente luz del sol son lentamente ascendidos por una figura que pese al amanecer aun es cubierto con un manto tan oscuro como la noche misma, su rostro ensombrecido por la postura cabizbaja de su andar apenas muestra una amplia sonrisa, es sin duda un esbirro del Hades que pisa con atrevimiento el sagrado suelo de la eterna enemiga de su señor, -Ahora ya hemos pasado la mitad de este lugar- dice para si mismo el primero en pisar aquel pórtico de la octava casa zodiacal, su andar se detiene y su rostro se eleva un poco revelando su juvenil apariencia y girando apenas un poco este para observar hacia atrás, “ya han caído seis” mantiene en su pensamiento al momento que una tenue aura de un azul tono rodea su imagen adentrándose a la guarida del escorpión dorado, -si consigo la cabeza de Athena el mismo Hades me daría la vida eterna- menciona ampliando su sonrisa llena de ambición mostrando sus verdaderos deseos, los mismos que le habían hecho eliminar a sus propios padres con tal de satisfacer sus ansias de poder y eterna vida mismo impulso que lo conduce e este lugar*

 

Tokusa Hanuman.

*Es la confianza en una vida eterna el deseo oculto de todos los servidores del dios del inframundo, es este también el impulso que los lleva a continuar adelante con su misión sin importar la peligrosidad de la misma y es también el motivo por el cual son capaces de cometer los más horribles actos para la humanidad, es por esto que aquella figura en apariencia frágil del guerrero que viste la sappuri no se inmuta siquiera al estar entre las paredes del templo de escorpión elevando tenuemente su rostro y mostrando una sonrisa firme llena de ambición y odio hacia el guerrero que ahora se atreve a llamarle, su imagen es cubierta de una estela de partículas de tonos azules que provocan un inmediato contraste con la oscuridad del templo y el color de su armadura que provocan que su imagen resalte observando fijamente a su rival, -Quieres pelear- dice con tranquilidad analizando el color de su armadura, el dorado aquel color que ha provocado la envida en el anteriormente, -es un caballero dorado- dicta para sí mismo  negando apenas con la cabeza al momento que la fugaz imagen de su compañero de entrenamiento y el entrañable amigo de su hermana pasa por su mente, -igual que el- menciona lleno de ira notándose en la tensión e sus piernas que se abren para mostrar una firme postura ante su rival, - si te mato probare que Hades y el señor Thanatos me han dado una fuerza que le supera- exclama concentrando su energía de forma más agresiva como respuesta única a su oponente.*

Tokusa Hanuman