**Los azulados ojos de la dama proveniente de Siberia quedan fijos en las onduladas formas que toma dicha cadena que al parecer sirvieron de escudo para que su anterior ataque no impactara de lleno en su objetivo, mas al parecer su polvo de diamantes se encontraba esparcido en los alrededores y en las alturas de su antagónica que a su vista se postraba inerte ante sus ojos “hmmm así que no estás del todo indefensa y tienes un par de trucos bajo la manga, pero… serán suficientes para impedir que te congeles en este mismo coliseo” piensa mientras que su cuerpo se re incorpora tomando una postura erguida, orgullosa casi imponente que da un paso atrás pretendiendo con eso tomar distancia entre el arma de la amazona de Andrómeda y su propia humanidad –comprendo- musita al mismo tiempo en que levanta su dedo índice –esa arma que portas no es cualquiera, pero… podrá seguir funcionando aun cuando este congelada- musita con voz calmada y fría a la par de que su cosmo energía seguía fluyendo por cada átomo de su cuerpo materializándose ahora al salir desde ese dedo una gélida energía en forma de círculos que destellaba en su interior como si diminutas partículas de hielos estuviesen en un torrente de energía que les permitía permanecer unidos como formando un gran lazo de hielo el cual pretendían rodear la cadena de la joven al igual que a la humanidad de la amazona de rosada armadura “veamos que puedes hacer con esto” ese pensamiento invade su mente a la par de que sus delicados labios color carmesí susurran –Kyoketsu Ring- dichas palabras son el detonante para que aquellos círculos tomasen mayor velocidad hacia su objetivo, a la par de que el polvo de diamantes que con antelación había lanzado descendía con lentitud impregnándose en cada cosa que estos tocaban…**

.::Cygnus no Angie::.