*En dicho instante el ateniense se detiene  notándose como con la poca luz que hay en lugar revelan su identidad , sin duda la majestuosa  y distinguida armadura de oro porta aquel joven de rubios cabellos  ,mas aquella armadura es especial ya que solo hay doce de ellas en el zodiaco y son las poderosas siendo entonces que el es el sexto guardián Shaka de Virgo conocido como ,el hombre más cercano a Dios en la mitología hinduista  por lo cual esucha una voz llamarle mas no parece reconocer aquella presencia por lo cual cuestiona  - Soy Shaka de Virgo y usted no debe dar un paso más - las palabras del ateniense son claras y al mismo tiempo da una orden para que el recién llegado no se moviera más libremente por el santuario de la sabiduría - ¿Quien sois y a que mas venido a este lugar? - dirige a una pregunta al joven varón que esta frente del sin duda alguna pocos conocían el camino de acceso al santuario *

*El instinto oportunamente lo había previsto de dicha aparición. “Tal como lo creí…” Y en ese momento refleja gran sorpresa al escuchar el nombre de aquella otra persona presente. – Shaka de Virgo… Debes ser el Santo de la Virgen de ésta época. – Algunos pasos en al dirección de la voz de aquél, permiten obtener a los dos personajes en el mismo horizonte y escenario. – Soy Dohko de Libra. – La voz suena con calma y profundidad en tanto que la mirada chispeante observa con mucha atención a aquel enviado. “Un Santo de Oro, acaso es Guardián de la Entrada del Santuario?”. Dejando que sus pensamientos viajen en esta clase de dudas, los mismos lo llevan al punto álgido de su presencia. – He sido enviado en un portal del tiempo por desde el Siglo XVI. Un espectro de nombre Youma de Mephistopheles es en realidad Kairos, el hermano menor de Cronos y busca venganza, sin embargo en ésta época existe un arma para poder derrotarlo y detener la masacre que está originando en nuestras filas. Debo conseguir dicha arma y por eso debo avanzar hasta lo más alto del Santuario. – Los ojos marrones acompañan la fidelidad de sus palabras, así como la convicción que lo mueve. “Recuerdo que uno de los compromisos más fuertes de un Santo de Oro, es nunca permitir el paso de un extraño… Espero evitar una confrontación con éste Caballero.” Atento a las reacciones del otro, y con postura expectante el Librano aguarda con tenso semblante.*