Un soldado en pleno frente recibe una carta de su novia. La carta decía lo siguiente:
Querido
Alberto. Ya no puedo continuar con esta relación. La distancia que nos
separa es demasiado grande. Tengo que admitir que te he sido infiel dos
veces desde que te fuiste y creo que ni tu ni yo nos merecemos esto, lo
siento. Por favor devuélveme la foto que te envié. Con amor. María.
El
soldado, muy herido se guarda la carta y acto seguido le pide a todos
sus compañeros que le preste las fotos de sus novias, hermanas, amigas,
tías, primas, etc. Y junto con la foto de María las incluye todas en un sobre. María recibe a vuelta de correo una carta en la que había 57 fotos y una nota que decía:
Querida María. Perdóname, pero no puedo recordar quien demonios eres. Por favor, busca tu foto en el paquete y me devuelves el resto.
MORALEJA: Aún derrotado... ¡ hay que SABER FASTIDIAR AL ENEMIGO !