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Así como el título del mensaje lo indica, hago petición de batalla al General Marino de Scylla. Ya hablé con él vía messenger, pero hago público el inicio del combate en este medio.
Suerte a mi contricante, y será un placer medir fuerzas ante uno de los vencedores de la guerra pasada en la cual lamentablemente no pude participar.
Yo soy el héroe que posee el puño y la espada para hacer justicia; Siegfried es mi nombre y Alpha es mi estrella.
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** - ¡¿Traición?! - Tales palabras llegan a oídos de Siegfried, quien quieto en sus pensamientos, reacciona con ira ante lo dicho apretando con fuerza sus dientes - ¿Cómo te atreves a llamarnos traidores? Nosotros no tenemos porqué servirle a Poseidón, ¡él nos manipuló a su antojo y pagará por eso! - Asegura con una gran convicción, tomando la mayor atención su armadura la cual expresa una serie de brillos azulados dibujando la escencia de un Dragón sobre su hombro izquierdo y sobre la posición de su yelmo, el mismo que de un segundo al otro permite una extensión en sus laterales, deslizando una especie de franja sobre su mentón y cubriendo con enteridad no sólo su cabeza si no también parte de su rostro, declarándolo listo para el combate - No voy a permitir que se salgan con la suya, generales de Poseidón, no me interesa saber tu nombre, sólo te voy a decir que... - Advierte girando el torso y dejando el pecho de manera paralela hacia el suelo, completamente dispuesto a cumplir con sus palabras - Yo soy el héroe y el dragón, ¡y haré justicia con mi puño y con espada! - Exclama, dándose el suficiente aire para salir despedido de un segundo al otro con un impulso propiamente frenético, siendo tan grande la velocidad que alcanza que incluso su cuerpo es perdido de la escena; reapareciendo a una escasa posición de centímetros delante de Eo con el brazo completamente retrazado y convertida su mano en puño - ¡Toma esto! - Grita ahora, liberando al mismo tiempo su extremidad junto a un desgarrador golpe que se carga de una fuerza propiamente brutal y característica de este guerrero, siendo el combate físico una de sus cualidades, dirigiendo la concentración de su ataque a la zona abdominal de Scylla con la intención de dejarlo sin aire ante el seco impacto y seguidamente, desplazarlo por los aires **
(Por motivos de viaje que explicaré igualmente en la sección general, pido a Eo una disculpa y así mismo un lapso de cinco días para responder, dado que por semana santa, viajaré y no estaré si no hasta el próximo lunes de la semana que viene. Agradeciendo su atención y esperando su comprención, le dejo un saludo)
Yo soy el héroe que posee el puño y la espada para hacer justicia; Siegfried es mi nombre y Alpha es mi estrella. |
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**La posición del General es inmutable, orgulloso de su superioridad militar y de su Dios, le es psoible ver a ojo normal que su oponente le ataca de frente, logra ver con claridad su puño y para responder a este avanza su brazo izquierdo hacia el frente cachando con la palma de su mano el puñetazo de su oponente resistiendo su fuerza e imponiendo la propia del general ante la del guerrero nórdico _-Jajaja, vaya Sigfried, tan impetuoso como un niño, no piensas dos veces en atacar, recuerda que no te enfrentas a un igual, nosotros los Generales Marinos somos superiores y te lo demostraré-_ La fuerza en la mano de Eo no es la de un guerrero y peleador común, como si se tratara de otra persona con fuerza brutal le parece muy facil resistir al oponente, las rodilleras de la escama del general brillan con el mismo resplandor místico de su cosmos, surgiendo una precensia bestial y feral, y generando con su mismo brazo Eo busca un empujón de tremenda fuerza contra Sigfried para intentar lanzarlo lejos y por que no que este se estrelle contra el muro de la arena de peleas.**
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** Sin embargo y de manera distinguida, la paridad de fuerzas es muy grande, a tal punto que ambas energías parecen ser sumamente parejas y sólo un aumento inesperado podría quebrar las fuerzas divididas - ¿Superiores? - Repentinamente, las palabras de Eo repercuten en la mente de Siegfried llenándolo de ahínco y fuerza para comenzar a despertar su cosmos el cual se manifiesta en forma de pequeñas partículas blancas que van uniéndose sobre su humanidad manifestando un aura de tonalidades que realza el mismo color de su armadura - Jaja, ¡jamás serán superiores a nosotros! - exclama, clavando la punta de sus talones en el suelo para no ser despedido por la fuerza del marino, implicando una gran fortaleza en toda su humanidad la cual resiste el impulso y por consecuente, este responde en forma de contra-ataque utilizando su brazo quieto, el izquierdo, para lanzar un nuevo golpe pero esta vez hacia el codo de la extremidad que utilizó el siervo de Poseidón para detener su anterior ataque, teniendo la plena intención de romper el hueso que separa brazo de antebrazo, y destruir por completo toda su extensión - ¡Porque nuestra fuerza recide en nuestro espíritu guerrero! - concluye, esperando el resultado **
Yo soy el héroe que posee el puño y la espada para hacer justicia; Siegfried es mi nombre y Alpha es mi estrella.
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** Y sin encontrar ningún tipo de respuesta defensiva por parte del General, los nudillos del Dios Guerrero se clavan sin piedad alguna en el codo del Marino repercutiendo en su hueso y provocando una completa e irremediable fractura, apta de un dolor insoportable y una tortura completa para el agredido - ¿Qué sucede, Eo?, ¡¿acaso eso fue todo?! - Cuestiona lleno de energía, aprovechando su brazo atrapado para realizar una maniobra de impulso y sujetar con entereza la extremidad rota de la bestia de Poseidón para un segundo más tarde, lanzarlo hacia uno de los pilares del Coliseo, esperando que este se estrelle de manera terrible y que esto genere un dolor más agudo del que ya debería sentir **
Yo soy el héroe que posee el puño y la espada para hacer justicia; Siegfried es mi nombre y Alpha es mi estrella.
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Siendo 13 de mayo y sin haber ninguna respuesta por parte de Scylla, procederé a cerrar el tema para su pronta evaluación...
Saludos
Atte: Camus de Acuario |
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Hey Camus, Io pidió permiso hasta este lunes para ausentarse.
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NO Lo vi Fer, sorry tengo tantas cosas para corregir y ver, que se me debe haber pasado...
Nada pues que posteen y siguen, en 24 horas borro mis mensajes...
Lo siento enserio...
Atte: Camus de Acuario |
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**El brazo izquierdo de Eo cruje con el golpe de Sigfried, el general puede sentir un dolor terrible al tener su brazo roto, su mirada luce borrosa por leves instantes pero de inmediato su rostro de inunda de una rabia terrible al voltear a ver a Sigfried tan orgulloso y jactante _-¡Maldito!-_ Sigfried sostiene la extremidad de Eo para lanzarlo, pero lo úico que encotraría es un peso mayor al que el guerrero puede cargar, como su la masa del General aumentara por el de una poderosa bestia se mantiene inmovil _-¡Apenas estas por conocer el dolor... GRIZZLY SLAP!-_ Menta con toda fuerza mientras su rodilla derecha se alza tan cerca del estómago de Sigfried liberando un tremendo impulso mientras el mismo general se transforma en un bestial oso de gigantesca embergadura. La potencia liberada del golpe es la más titánica que pueda alcanzar cualquier General Marino de Poseidón, tanto así que la misma tierra se abre y las rocas se vuelven escombros cuando salen volando entre la energía explosiva del gran zarpaso de oso.**
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** El General Marino reacciona pese a tener el brazo roto, sin embargo y en condiciones físicas plenas, quién es conocido como el líder de su casta y el más fuerte de entre los del Palacio Valhalla, reacciona abriendo sus ojos con entereza y comenzando a ser rodeado por partículas blancas que en cuestión de segundos envuelven toda su humanidad en un resplandor - ¡Aghhh! - Murmura para liberar un impulso de energía mayor al de Eo, proyectándose un aura que simula una especie de barrera que ante la llegada del zarpaso del Oso, defiende la zona abdominal de Siegfried que aún pese a ese escudo extraño que surge gracias a su armadura y su cosmos, es empujado hacia atrás en tanto que recupera el equilibrio clavando sus talones contra el suelo y frenando por completo la carrera hacia atrás - Debo admitir que ese golpe fue sorprendente y poderoso - Advierte reconociendo la hazaña del enemigo cuando una serie de chispas empiezan a ser desparramadas desde la zona atacada, como si el golpe sencillamente hubiese rebotado sin poder alcanzar su humanidad - Pero debo advertirte que esa clase de ataques no son eficientes conmigo, ¡mi cuerpo es inmortal! - Explica cuando a sus espaldas, la enigmática figura de su antecesor, el héroe de la leyenda llamado Sigfrido, es envuelto en la Sangre del Dragón levantando su espada, y esto es suficiente argumento para explicar lo sucedido: Pese a la energía del gran Scylla y su ataque directo, tanto la armadura como la fuerza de Doble Alfa disponen de una de las llaves más impresionantes y destacadas de todos los tiempos: la inmunidad, suficiente para bloquear cualquier ataque sin que este sea alcanzado ni perjudicado **
Yo soy el héroe que posee el puño y la espada para hacer justicia; Siegfried es mi nombre y Alpha es mi estrella.
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**Tras la separación de ambos entes Eo se muestra evidentemente sorprendido, admirando que su oponente sigue en pié e ileso, cuando un ataque de esa magnitud y a tan corta distancia hubiera destrozado a cualquiera incluso si ese cualquiera fuese otro general marino. El general da un salto ágil cayendo a varios metros mientras en la caída se duele de su brazo fracturado, sosteniéndolo con su extremidad derecha. _-Entonces eso es... Sigfried, no pensé que fuera cierto, eres la leyenda viviente de tu nombre, digno de aplaudir sin duda. Pero tan bravo es el guerrero como su soberbia, tan real su inmortalidad como su punto débil... ¿No?-_ Eo de Scyalla sonríe mirando el rostro de su oponente, sus sentidos una vez mas se fusionan con las bestias latentes dentro de su ardiente cosmos, el brillo misterioso de seis monstruos voraces se hace presente alrededor de Eo, su fogosidad arde nuevamente en su cuerpo mientras el general apunta el dedo a el dios guerrero cuando el polvo y escombros terminan de caer _-La batalla no ha acabado aun, me descuidé y te subestimé, pero como tú eres la reencarnación del héroe legendario, yo soy Eo la reencarnación de la bestia devoradora de héroes, apenas has visto el terrible poder de una bestia, pero como ella quedan cinto con distintos poderes y habilidades que no importa que tan inmortal seas, ellas serán capaces de aniquilarte y estoy seguro de ella-_ Tras de Eo aparece la efigie de la malvada Scyalla, mujer bella que bajo las faldas guarda a sus seis bestias hambrientas.**
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** - General Marino, reconozco que tu espíritu y tu fuerza son excepcionales, aún con un brazo destruído piensas hacerme frente - Murmura, reconociendo el potencial del enemigo cuando su postura se resume a un balance perfecto, aún envuelto en esa aura que transforma su fuerza drásticamente de un rastro defensivo a uno completamente ofensivo - Pero no puedo seguir perdiendo tiempo, ya perdí demasiado dirigiendo mi puño hacia personas inocentes... ¡Es momento de que ahora lo lance hacia Poseidón! - Exclama con total seguridad y convencimiento, mostrando una enorme determinación cuando a sus espaldas, la enigmática figura de Odín hace acto de aparición en el Coliseo cargando su espada Balmung, la arma más sagrada y destacada de los escandinavos - ¡Padre, otórgame el beneficio de tu espada para limpiar el honor de Asgard! - Nuevamente, omnipotente grita cuando su brazo derecho se extiende hacia el frente y su índice señala directo a la humanidad de Eo - ¡Espada de Odín! - Y en reconocimiento a su Señor, desde la punta de su uña se dispara un rayo tan blanco como la nieve, permitiendo un contorno perfecto sobre Scylla al marcar un círculo de diminutas proporciones alrededor de su cuerpo; Justo en ese instante, Siegfried clava su mirada en el enemigo y tras una milésima de segundos, una fuerte explosión se escucha rompiendo el silencio y devastando todo lo que marcó ese redondel; el suelo se levanta al igual que la arena, millones de rocas son desplazadas y el impacto tan extraordinario y detonante, pretende tomar preso a la humanidad de la Bestia, teniendo la plena intención de elevarlo por los aires y en consecuencia de un terrible dolor generado en todo su cuerpo gracias al impulsivo y ferviente golpe, terminar de ser devastado por la enorme cantidad de instrumentos filosos que buscan clavarse en cada parte de su aspecto al ascender junto con el ataque del Norte **
Yo soy el héroe que posee el puño y la espada para hacer justicia; Siegfried es mi nombre y Alpha es mi estrella.
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**Eo se mantiene inmune y sonriente a los alardes de su oponente, no importa que tenga un brazo fracturado, aun teniendo una herida mortal uno de los más fieles generales de Poseidón no se dejaría vencer con tal facilidad, ni sería algo que impidiera sus poderes _-Todos los dioses guerreros como su Dios blasfemo serán castigados por la gracia y gloria de mi señor Poseidón, ni en la muerte descansarán en paz por alzarse en contra de un ser divino-_ Con suma atención Eo focalisa el dedo de su oponente, la circunferencia que comienza a dibujar con este alrededor del marino, no le distrae, pero es evidente que el general esta atrapado en una jaula de barrotes, como un ave, pero aquel no es un ave normal y no esta encerrado por completo. Justo antes de que el circulo se cierre y el suelo comience a desquebrajarse, el general ve su única salida y da un enorme salto, anormal incluso para aquellos con poderes a su nivel, se envuelve en su cosmos celeste y se transforma en una luz ascendente que despliega dos alas de gigantesca envergadura, en el aire se transforma en un águila que sube a los cielos mientras las rocas y escombros dentro del círculo le dan persecución en el aire, sin embargo su velocidad y altura sobrepasa las posibilidades de alcance de la técnica. Como un águila que vuela a más de 1,800m de altura y única entre las bestias, la que puede ver de frente al sol, la silueta del general bestializado se pierde dentro de la circunferencia del brillante astro rey de medio día, buscando con este cegar por instantes al dios guerrero esperando que le siguiera con la mirada.**
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**La brillantez del sol es atrapada en los ojos de Sigfried quien sigue con la mirada la silueta de Eo que se pierde en el sol, sus ojos quedan ciegos y deslumbrados temporalmente. Aquellas milésimas importantes son las que el general tiene planeadas para realizar su movimiento, de los mismos cielos baja la silueta de la bestia Scylla emitiendo en un profundo eco su grito de batalla, invocando el poder y la fuerza de una nueva bestia _-Queen Bee’s Sitiger-_ A la velocidad de la luz su cuerpo destella cuando lanza hacia el frente su puño derecho, el destelo celeste pierde de vista el cuerpo de Eo y de la luz emerge una saeta sutil y veloz acompañada de un zumbido penetrante, la Reina Abeja, la forma contraria al bestial oso, que es directo y brutal, la reina por su parte es sutil, precisa y terrible. Esta se dispara volando en busca del corazón del oponente cegado por la luz para atravesarlo con una lesión mortal, pero sus movimientos son impredecibles y es capaz de responder a evasiones e intentos de defensa del oponente cambiando de dirección poseyendo una conciencia propia.**
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Lo siento Sigfried pero me urge terminar la batalla para hacer mi cambio.
**Absorto en la ceguera que el sol le ha dejado, el zumbido de la Abeja Reina avanza contra Sigfried quien no responde ante el grito de batalla del General Marina de Poseidón. El ataque más sutil y letal de Eo se hace ver en un pequeño as de luz que viaja a la velocidad de la luz, este se acerca a su víctima apuntando al pecho, justamente al corazón donde el ataque se incrusta en un feroz piquete que le atraviesa de un lado a otro el órgano más vital. Ya Sigfried está condenado, la picadura de la Abeja Reina deja tras de sí un paralizante dolor que entumece todos los nervios y lógicamente el cuerpo con el cerebro limitando los accionares de la víctima para dejar que el orificio del aguijón haga su trabajo en una severa hemorragia imparable mientras el mismo corazón siga latiendo y bombeando sangre, lo único que resta esperar es la misma muerte.
Eo de Scylla cae a varios metros a espaldas de Sigfried, apoyándose en una rodilla sostiene su brazo izquierdo y su rostro muestra una marcada dolencia que intenta ocultar con una sonrisa en un rostro que suda frío _-Jajaja, el valiente guerrero sin duda es un digno rival, pero no para las bestias de Scylla... Puedes estar feliz Sigfried de que tus compañeros seguirán viviendo un día más por tu sacrificio, ya que en mi estado deplorable no podré eliminarlos inmediatamente. Nos vemos en el otro mundo bravo guerrero de Asgard-_ El cuerpo de Eo de Scylla se envuelve nuevamente en un manto de luces misteriosas, manchas en el aire de color rosado que le van tragando hasta desaparecer de la arena de batalla, regresando al Santuario de su señor Poseidón**
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Io de Scylla Vs Sigfried de Dubhe Alpha.
Excelente batalla por parte de ambos, buena demostración de conocimientos de sus personajes y de las habilidades que estos poseen.
Es por ello que debido a que la manipulación y la ausencia de sigfried fue determinante para esto el ganador de esta batalla es:
Io de Scylla |
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Primer
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Último
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