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Retos y Batallas: Reto abierto
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| De: Sharingan (Mensaje original) |
Enviado: 29/04/2011 00:08 |
Ante cualquiera...
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**Hábil el caballero dorado denota sus particularidades y dones que le condujeron a ser parte de la casta más importante entre los guerreros de Athena, y ahora se encuentra ante su antiguo maestro quien escucha detalladamente la palabrería de Mú -¿Qué haces Mú?- Cuestiona suavemente con un inconforme tono que pronto continúa -¿Qué crees que haces...de pie frente a mí?- Exclama arrogantemente ignorando los ideales del carnero, mientras su cosmos encendido emplea su fuerza descomunal nuevamente sobre las leyes físicas, mandando una onda psíquica a atreves del viento esperando interceptar el sistema nervioso del joven caballero a través de su poderosa armadura y de su fornido cuerpo intentando destrozarlo con aquel choque piscoquinético e intentando provocar una parálisis física desmoronando sus rígidos músculos para que este obedezca inconscientemente a la orden impetuosa de su ilustrísima -¡Arrodíllate Ahora Mismo!- Dejando en el viento un violento grito de guerra que hace contraste con un relampagueante cosmos que se presenta alrededor del Santo resucitado aún oculto bajo sus vestimentas que parecen no aguantar por mucho más tiempo aquel poder cósmico comenzando a desgarrarse ante la creciente energía que pretende actuar sobre Mú dejando también vestigios de su poder en el escenario de la hermosa noche de estrellas platinas arrastrando el polvo de la arena griega ante su contorno**
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**Mu escucha la pregunta de su maestro y su expresión no cambia hasta que escucha su orden, que trae confusión al rostro de Mu hasta que contra su voluntad, sus músculos comienzan a quebrantarse siguiendo poco a poco la orden dada. Mu intenta detenerse, pero le es imposible hasta que queda con una rodilla sobre el suelo, temblando debido al esfuerzo de liberarse -Maestro...- dice en un susurro cuando cierra sus ojos con fuerza, y trata de repeler la energía de su maestro con la propia, su cosmos aumenta en intensidad y fuerza que influye en sus poderes mentales aumentándolos hasta comenzar poco a poco a ponerse de pie -...tú me enseñaste lo que significa ser un caballero de Atena...- comenta cuando finalmente se encuentra de pie aún temblando por la presión -...por tanto sabes que debemos protegerla...- sigue mientras su mano derecha se levanta poco a poco contra la energía psíquica que lo asechaba -... aún si debemos negarnos a nosotros mismos para lograrlo- finaliza extendiendo por fin la mano derecha hacia delante lanzando una gran descarga psíquica que lo libera y se presenta como una gran onda de viento cortante que se dirige en dirección al resucitado "Me has enseñado bien Maestro, y te lo demostrare" piensa tratando de alcanzar con su poder el cuerpo de su viejo maestro**
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**Un estruendoso estallido suena alrrededor del escenario después de una especie de descarga eléctria que resuena liberando así al joven caballero que soporta la presión psicoquinética del que algunas vez fue conocido como el más sabio y antiguo maestro de Jamir quien no deja ninguna expresion jugar con su seriedad marcada en el rostro que tan solo se ve iluminada por aquella aura magnífica de color violeta en cuanto la ráfaga de viento desgarra toda la prenda mortuoria que cubre al espectro, destrozando sus delgados y maltratados telares dejando ver lo que hay debajo de ella; un cuerpo joven, fornido y estructurado cubierto por un manto sagrado que asemeja a la constelación primera del zodiaco el gran carnero que asciende al cielo con los cuernos apuntados en curba hacia el cielo pero presuminedo un hermoso color tan oscuro como la inmesidad del universo, dejando ver los vestigios cósmicos del poder de antiguo patriarca quien simplemente deja pasar la corriente heólica por sobre su protegido cuerpo soportando el impacto en su armadura negra destruyendo al contácto la presión del aire de tan débil técnica, escoria del movimiento que logró sofocar la potente voluntad del mismo -Mu..¿En verdad vas a desafiarme?- Comenta con manteniendoce sereno y arrogante, viéndole por encima cautivando la escena con un porte magistral**
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**Mu se queda mirando al ropaje de su maestro tras recibir el ataque que lo único que consiguió fue despojarlo del telar que lo cubría -Una armadura sapuri...- menciona Mu sin apartar la mirada de aquella armadura representativa de aquellos que sirven al dios de la muerte y que protege enteramente el cuerpo de su maestro. Mu respira profundamente ante la pregunta de su maestro cerrando sus ojos al mismo tiempo. Su cosmos lleno de vida que parece hacer contraste ante el de su antigua autoridad sigue brillando con intensidad. -¿Cuáles son tus intenciones al haber regresado Maestro?- dice en un tono total de respecto mientras su cosmos cambia incendiándose en gran forma de manera que el suelo a su alrededor comienza a agrietarse debido a la potencia del poder del cordero dorado. -Si tu intención es atentar contra la vida de Atena...- dice abriendo sus ojos, cerrando sus puños con fuerza mientras su cosmos comienza a repeler incluso el aire a su alrededor creando corrientillas que sacuden los alrededores del viejo coliseo -no tengo otro remedio que detenerte- la determinación es tangible en la mirada del santo -Estoy dispuesto a recibir el castigo que venga sobre mi por desafiarte, maestro- finaliza con la esperanza inútil de que su maestro abriera los ojos y desistiera de seguir con esta contienda**
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**Resuena sarcástica y apresurada la respuesta por parte de Shion -Que noble de tu parte Mú...Sacrificarte por tu honor de caballero, de verdad eres digno de portar esa armadura- Menciona con un tono imperioso mientras sus brazos se desprenden de su posición inicial dejándolos colgados a los costados de sus costillas donde una nebulosa cósmica se arremolina en las palmas del antiguo líder del santuario como escoria espacial que derrama su hermoso brillo orbitando la mano del patriarca -Sabes que no puedes vencerme... Y estás consciente de que tu sacrificio será en vano- Afirma con orgullo que contrasta con la luminosidad que materializa un par de esferas purpuras sobresalientes desde sus extremidades cuando nuevamente manipula su posición cruzando sus antebrazos frente a su pecho en forma de una cruz diagonal y finaliza con la amenazante dictadura -Entonces cumpliré tus deseos y te daré muerte como un verdadero caballero- Sentencia en cuanto despliega, con una excelsa coordinación, ambos brazos extendiéndolos hacia los costados dando libertad a aquellas incandescentes saturaciones de energía que toman un camino curvo dirigiéndose hacia Mú, buscando el impacto con este con un engañoso ataque que se origina con una trayectoria semi recta que después comienza a trastornarse en una parábola que debería implorar a los costados del abdomen del santo de Aries**
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**Mu da un paso hacia atrás flexionando un poco las rodillas y posicionando ambos brazos enfrente de si como si fuera a intentar detener el tan poderoso ataque de su maestro. Ambas esferas de energía están a punto de impactar contra Mu pero justo antes de que lo tocasen, Mu se tele transporta escapando de la colisión causada por ambas esferas al chocar entre si y apareciendo en el aire por encima de su maestro a unos tres metros de distancia. -Me entrenaste bien Maestro- dice el santo mientras decenas de pequeñas estrellas doradas comienzan a formarse alrededor del cuerpo del dorado a partir de su cosmos que sigue encendido como una llama bajo las estrellas. Mu separa las piernas, -¡Ah!- exclama mientras flexiona sus brazos tomando impulso y los estira apuntando hacia la dirección de su autoridad provocando que todas las estrellas formadas a su alrededor emprendieran su viaje simulando estrellas fugases con la finalidad de impactar en el área donde se encontraba su maestro. Las estrellas se dirigen a gran velocidad que atravesarán hasta el metal más fuerte, incluyendo el cuerpo de cualquier ser que las tocase y probablemente, el corazón de su maestro.
A pesar de la situación, Mu se siente como en los tiempos antiguos, cuando entrenaba arduamente con su maestro y eso alegraba un poco su corazón, aún cuando sabe que está puede ser su última batalla en esta tierra**
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**Los movimientos del joven santoo de Aries son dignos de un guerreo de casta dorada, sin embargo su estrategia parece no intimidar al sabio anciano que resucitó en un cuerpo joven, con el cual expresa firmemente ante los gritos del caballero -¡Por favor Mu!, No puedes vencerme con ese deplorable nivel- Autoritario dispone Shion, cuando cruza los brazos sincronizados con el lanzamiento de los astros volantes como meteoros que se precipitan hacia su persona en cuanto una especie de polvo estelar rodea la cruz formada con sus antebrazos; tranquilo y confiado deja a sus ojos cubiertos por sus parpados en un instante en el cual su concentración máxima se hace mandataria en su cosmos que, a nivel atómico, manipula con maestría la energía prominente de su cuerpo haciéndola levitar sobre sus palmas en cuanto sus ojos nuevamente son descubiertos abruptamente ante la luz de la noche y el brillo platino de las estrellas, opacadas por el destello contínuo -¡MURO DE CRISTAL!- Exclama, dejando al mismo tiempo sus brazos desplegarse hacia los costados de su pecho, alzándolos igualmente por encima de su cabeza con movimientos a la velocidad de la luz que compiten con aquel ataque, ante el cual, una pantalla casi invisible e indivisible se materializa en un instante sobre las palmas de Shion y se extiende en forma simétrica intentando envolver el cuerpo de su antiguo pupilo en un cubo formado por aquellos vidrios en crecimiento y traslucidos de los cuales el primero recibe el impacto de la escoria cósmica absorbiendo su poder y regresándolo con toda potencia a su lugar de origen acorralando al autor del ataque que también está a punto de ser encorralado en un poliedro hueco que sostiene el poder de reflexión del cristal el que seguramente hará de su interior un infinito choque de cosmos entre sus 6 murallas**
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**Como era de esperarse de su maestro, no se inmuto ante el ataque de Mu el cual fue detenido por el muro de cristal y regresado a su creador. Sabiendo el efecto que el muro de cristal tiene, intenta juntar energía suficiente para tele transportarse fuera de la órbita de su propio ataque, sin embargo, sin la posibilidad de actuar demasiado rápido es alcanzado por algunas de ellas justo en el momento en que desaparece dejando al resto de las estrellas seguir con dirección al cielo como si fueran a unirse con sus hermanas. Mu aparece de nuevo enfrente de su maestro, y en cuanto aparece cae con la rodilla derecha en el suelo, con su mano izquierda apoyada en el suelo, y su mano derecha haciendo presión en la parte derecha de su abdomen, donde una de las estrellas lo había alcanzado atravesando su armadura. Su pierna izquierda también se encontraba lastimada por el mismo ataque.
Respirando cansadamente mira directamente a los ojos de su maestro quien se encuentra ahora rodeado por la protección de cristal. -Cuáles son tus planes ¿Por qué haces esto?- pregunta el caballero mientras intenta recuperar energía y ganar tiempo para poder recuperarse de sus heridas "Tengo que pensar en algo, o moriré aquí y no habré podido hacer nada" piensa mientras lentamente comienza a ponerse de pie ignorando el dolor en sus heridas, esperando la respuesta de su respetable maestro**
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**Un estruendoso choque de energía sucede dentro del cubo de cristal sostenido momentáneamente por el antiguo líder del santuario, quien enseguida ve aparecer frente a su mirar el cuerpo de Mú, con la armadura de Aries fracturada en pequeños puntos que igualmente perforaron la piel de dicho guerrero -Así está mejor Mú- Menciona mientras relaja sus brazos y su concentración rompe con el abrumador cosmos del muro impenetrable desmoronando aquella obra en fragmentos que se destrozan en el suelo como si se tratara de finos vidrios que luego se desvanecen a nivel molecular extinguiendo su rígida estructura y convirtiéndose nuevamente en polvo de estrellas -Arrodillarte frente a mí, solo tenías que hacer eso desde un principio- Alega convencido el sumo sacerdote muerto de Athena que regresó del mundo de la muerte con la encomienda de exterminar la vida de joven divinidad -A pesar de todo...Aún te estimo, por esa misma razón terminaré contigo para que no sufras más- Afirma en cuanto su cosmos nuevamente resurge desde su cuerpo, como un ente divino y lumínico que derrocha su poder soberbio sobre la oscuridad en el santuario elevando una nube de polvo que comienza a soplar desde el centro de aquel poder cósmico, formando ondas con de presión que arrastran la arena ensangrentada mientras los cabellos de Shion danzan contrariamente a la gravedad y su ocupador estira los brazos hacia los lados presumiendo su evidente supremacía -Mis asuntos en el Santuario no son de tu incumbencia- Responde finalmente cuando culmina con decir -Solo relájate y acepta tu castigo- Mientras su mentón desciende hacia el suelo viéndole fijamente a los ojos sin ninguna vacilación en su expresión totalmente decidido a fulminar su existencia, ocultando sus verdaderos sentires que flagelan a su corazón hasta el punto en que su alma propia derrama lágrimas de sangre imperceptibles al ojo humano, ocultas entre la magnificencia del torrente nebuloso que se amotina contorneándole de una manera esplendorosa**
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**El final ha comenzado. Mu puede sentir el poderoso cosmos de su maestro. Y aún cuando sabe que la batalla está a punto de llegar a su fin, sigue pensando en sus palabras. -No puedo rendirme- dice después de un momento, su cosmos se enciende entonces como la luz de una estrella en el universo inmenso. -Tú me enseñaste a no rendirme. Si he de morir, moriré luchando- finaliza imitando el movimiento de su maestro, extendiendo los brazos a los lados mientras toda su cosmo energía crece y crece expandiéndose hacia el firmamento como un brillo dorado que desde las lejanías podía apreciarse como si un pequeño sol hubiera descendido a esta tierra en medio de la noche en contraste con la intensa luz del poder de su maestro. El coliseo comenzaba a agrietarse por todos lados debido al choque de energía de tan poderosos santos. Algunos de los pilares comenzaban a caer ante semejante poder. ¿La tierra estará a punto de presenciar el final de un santo de Atena? Cualquiera que fuera el resultado, sin duda el coliseo guardara en su memoria esta legendaria batalla**
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**Como cuando una estrella permanece radiante de luz ante su inminente explosión, la supernova, Shion se postra frente de su antiguo discípulo arrastrando en su esplendor con toda materia que se encuentra a su paso; aquella fuerza repelente que erosionaba la tierra con un arrastre misterioso ahora viaja en dirección contraria siendo succionada por el poder gravitatorio del más poderoso de los Santos de Athena y de esta era, aquel quien muriera a traición con un cuerpo viejo y desgastado al paso de los años…ahora se regocija con un inmenso poder que solo su vasta experiencia le permite controlar -Mú...te encontrarás con Athena en el Infierno- Dice dejando escaparse de su rostro un gesto de inconformidad, de dolor y agonía que no puede ocultar pese a su ego y su determinación por ocultar la verdad. Atrayendo el viento una corriente se arremolina al rededor de Aries Sapuri que ahora alza la diestra por los cielos apuntando al infinito con ella mientras míticamente la figura de un cordero de oscuro pelaje sobresale de su retaguarda -Con esta técnica...El secreto más poderoso de Aries...Te convertirás en polvo con las estrellas y viajarás al otro mundo- Cuenta al momento que, desde su nebulosa energética, emergen centellas purpuras que se arremolinan ante su mano elevada, creando una órbita que recorren sin cesar una y otra vez como pequeños fragmentos de estrellas fusionándose en un evento cósmico minimizado en escala pero poseedor del mismo material destructivo, polvo estelar tan caliente y ardiente por la revolución a alta velocidad -¡Muere Mú!, ¡REVOLUCIÓN...- Exagerando su grito vocifera dejando un estremecedor eco en el viento cuando este se rompe al exhortar -...ESTELAR!- A completa dejando caer su mano que deja seguir su camino a aquellos pequeños meteoros violetas, ardientes como estrellas que pretenden extinguir la vida del santo del primer Partenón, sosteniendo una precipitación horizontal constante de meteoritos y cometas provenientes del aura exaltada del patriarca asesinado quien además sostiene con el alma perturbada "Mú, esta es la única forma...Por favor, asciende al cielo con tu constelación y cuida a Athena desde ahí..."**
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**En medio de tanto poder, Mu alcanza a distinguir un gesto cercano al dolor por parte de su maestro, algo que provoca una nueva expresión de extrañeza en el rosto del santo dorado. -Maestro...- Y aún así no se detiene y al contrario, parece listo para iniciar su técnica -Que así sea- dice Mu justo en el momento en que el viento se arremolina a su alrededor y la figura del carnero que lo representa aparece a su espalda mientras que al igual que su maestro levanta su mano derecha al cielo y centenares de estrellas luminosas de tonalidades doradas se generan mostrando como un nuevo universo en donde Mu es el centro del todo. -Te veré en el más allá Maestro- comenta Mu sonriendo levemente cuando su energía cósmica brilla intensamente y en coro con su maestro exclama -¡¡Revolución Estelar!!- a gran voz y extendiendo su brazo señalando a su maestro todos los entes brillantes que lo rodean se disparan como una lluvia de meteoros hacia su contrincante. La batalla de estrellas da inicio, chocando entre ellas, provocando explosiones de diferentes tonalidades en el coliseo como dos galaxias que luchan por subsistir.
Sin la posibilidad de seguir observando el resultado de su técnica, el carnero dorado es alcanzado por el ataque de su maestro sintiendo impactos por todo su cuerpo. Como si fuera el momento indicado, unas imágenes llenas de recuerdos donde su maestro es participe aparecen en la mente del santo. Un rastro de lágrimas recorre el rostro del caballero en medio de la colisión. Es tanto el poder que lo rodea por completo dejándolo sin la posibilidad de escapar hasta finalizar con una gran explosión de colores purpuras. -Perdóname... Atena...- Se escucha en un susurro después de un momento, como una plegaria que se lleva el viento justo cuando la armadura de Aries aparece en el centro del coliseo, brillante y llena de vitalidad, y en sus alrededores los restos del cosmos de Mu como polvo de estrellas que se dirige al cielo lentamente como recuerdo de lo que una vez fue una honorable caballero. Mu de Aries finalmente ha desaparecido de esta tierra**
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**Nunca vista una colisión de tales magnitudes en la griega, tan potente que los escalones de aquel coliseo sufren estragos, se agrietan y algunas columnas se derrumban empujadas por las ondas de impacto generadas entre ambas técnicas titánicas. La luz de las estrellas más bellas brilla con la intensidad de mil soles sobre el cuerpo del antiguo patriarca cuyo cosmo es atravesado por la radiación, destrozando en partes su armadura sapuri con aquella lluvia galáctica quebrando partes en el peto, las grebas, las hombreras y en la mayor parte de todo el conjunto metálico de matiz violeta -Aaaagggghhhh- Se escucha disimulado un grito opacado por el estruendo de la explosión mientras el cuerpo de Shion viaja hacia atrás derribado por el impacto del polvo estelar, entre su silueta apenas visible sus cabellos se revolotean en un torrente de cosmos mezclado con fragmentos de Sapuri incinerados y la sangre propia del antiguo salvador de Athena. Así es conducido hasta su descenso violento varias metros atrás donde el polvo se levanta por consecuencia del colapso dejando una nube de tierra que difumina el resultante unos segundos; pero un sonido se escucha después del tétrico vació sonoro que deja el estrago caótico, tosiendo el guerrero de Aries, glorificado en la luz de una nueva vida, levanta lentamente su cuerpo mostrando aún escoria de su armadura que cae entre los huecos que el ataque de su discípulo creó, sangrante del antebrazo derecho con la postura encorvada apenas lejos del suelo -Mú...Tienes razón, nos veremos en el más allá- Dice vislumbrando la escultura de oro con forma de carnero frente de él -Pero aún tengo una misión que cumplir- Agrega volteando su mirada violeta que se pierde por instantes en la inmensidad del cielo donde la constelación de Aries brilla con brevedad excitada, pero aquel brillo pronto es sumido por una opacidad extraña que vierte un sentimiento de tristeza extendiéndose por todo lo ancho de la cúpula celestial. Y así, bajo de ella, el sacerdote se da un momento de reflexión ante el paisaje divino, que pronto terminará para continuar con su condena, con su desgracia**
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Shion de Aries vs Mu de Aries
Muy buena batalla sin duda, con una trama predecible y bien recatada. Algunos puntos a corregir pero fuera de eso, un buen trabajo
Shion de Aries: Buen manejo tanto de la personalidad como de las acciones de Shion, un fallo que encontre en los turnos iniciales es el uso del pasado en suponer una accion que tranquilamente se puede hacer en presente. La extension del texto ha mejorado pero todas maneras no es motivo a confiarse
Mu de Aries: Tienes la idea de la personalidad del personaje que empleas y es bueno ver en sus acciones pero se nota un vacio al momento de ejecutar una tecnica, por ejemplo, no basta con decir "me teletransporto" y listo, sino especificar ese proceso, que se ve o que se siente para realizar esa accion.
Resolviendo en general, el punto fijo de esta batalla es la choque de ambas tecnicas finales que dan por muerte de contexto a Mu, en redaccion y efecto el uso del Stardust Revolution lo lleva Shion y por ende un claro vencedor en el choque que es bien admitido por Mu y eso muestra la caballerosidad de la superioridad en la tecnica en base al realismo.
Felicidades a ambos pero como bien saben solo debe surgir un vencedor y ese es: Shion de Aries sapuri
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Muchas gracias por el veredicto. Y sip, eso del manejo de mis tecnicas tengo que mejorarlo jeje, pero ahy la llevo
Me gusto mucho esta batalla, jeje. Muchas gracias Shion!! Excelente batalla.
Saludos!!
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