** Silencio, lúgubre e inusual silencio, atravesado diafanalmente a veces solo por algún quejido lastimero, oído en la lejanía del lugar, silencio de muerte, solo corrompido por la agonía de los lamentos que conllevan al apocalipsis del alma, el castillo oscuro, parece rodearse aun mas de una energía oscura, proveniente del caos y sufrimiento que lo rodea, en todo aquel lugar de presencia barroca, de adoquinados paneles, y monolíticas paredes, se respira el olor a muerte, pareciera que la vida es imposible en este lugar, donde las penumbras juegan con mas penumbras, donde la luz es solo una parafernalia agónica que apenas se tilda de manchar el lugar con algún resplandor, proveniente de algunas antorchas que con su lumbre solo atinan a hacer mas tétrico el sitio ...

Silencio; silencio que es ahora roto por unos pasos pausados, botines que chocan metalicamente contra las baldosas pétreas; en aquellas penumbras solo se observa brillar una armadura aun mucho mas oscura que la oscuridad que le rodea, con aristas, tan frías, cuales afiladas garfias, que ni siquiera la luna en plenilunio podría turnarse a poseer; los pasos siguen, llevando al portador a aquel pasillo, de donde se desprende una luz; sigue caminando, dejando ir aquel eco que se cuela por todos y cada uno de los recovecos que lo rodean anunciando su llegada, sin interesarle nada, en su mente se abre solo una diatriba [ -- No le fallare mi señor Alone -- ]; pensamiento derivado de la recién platica con aquel poderoso dios que le ha otorgado aquella armadura que porta y garantizado el descanso eterno de su hermano;...

Sea por curiosidad, quizás por observar otra "vida" en aquel recinto, tal vez solo por sentirse atraído por algo que en su momento llego a observar en otros lugares, se detiene en el dintel de la puerta, y observa aquella cabellera rubia que cae sobre la espalda de lo que parece ser una monja, -- ¿Música? -- musita y se pregunta por lo bajo, mientras observa con total tranquilidad la dantesca escena en aquel lugar, cruza los brazos, arrogante ciertamente, solo presta atención para ver que pasara...** 

Atte

Kagaho de Bennu -- El fenix Egipcio

** Aun recostado contra aquel palastro; responde con hegemonía arcana -- Daño ? -- sin inmutarse en nada, prosigue, mientras aquellas grotescas catacumbas se ciernen sobre la oscuridad que las rodea, observa los cuerpos de aquellos putrefactos seres, y como se regodean lo que parece ser algún tipo de enjambre sobre ellos; -- ¿Que entiendes por ser uno de ustedes? -- pregunta con laconismo puro para después responder el mismo la pregunta con la diatriba de quien sabe sus ordenes especiales -- Si te refieres a que si soy un soldado del Sr Hades, si, si lo soy, el mas fiel a sus principios y deseos -- indica con una inflexión en la voz que denota la mayor de las seguridades, así como la convicción férrea de tener muy claros sus objetivos...

-- Ahora bien, si te refieres a ser alguno de la parvada, no, no lo soy.... yo no sirvo a nadie, mas que a mi señor hades -- Los ojos rojizos de aquel sujeto restallan una seguridad, pero mas profundamente una violencia mal contenida, aunque curiosamente, si alguien pudiera ver mas adentro de aquellos escudos cognitivos que se han levantado alrededor de su corazón y espíritu, podría encontrar que su sentir es puro, tranquilo y sin maldad, porque le habría escogido directamente el señor Alone, a el, nadie puede saber los designios de los dioses, mas la violencia que se genera en sus adentros pareciera tapar todos aquellos buenos sentimientos del alado ser, curiosamente, es de los pocos espectros que no han perdido su identidad humana al portar aquella surplice... 

-- Cantas Aleluya en este lugar? -- pregunta mientras se prepara para retirarse de aquel lugar donde no ha encontrado mas que cosas extrañas, mismas que no deben de sorprenderle, pues se encuentra en los confines del submundo, -- Y que daño pueden hacer tus mascotas, si no causar molestias, mas bien, mantenlas alejadas de mi, no sea que les pueda pasar algo -- Indica con soltura, mientras se despega del dintel, y gira sobre sus talones ...**

** Casi dándole la espalda, el de las alas escucha todas y cada una de las frases, mismas que motivan que le observe de reojo con aquella mirada caótica, rojiza, dando vuelta queda completamente de frente a su interlocutor, observando con cierto desdén, y hasta mohin de asco en su cara, al notar la proliferación de aquellos insectos inicuos que le rodean, luego entonces fija aquella ardiente mirada en la faz del necrológico ser, y da unos pasos dentro de la habitación...

No responde nada a la primera pregunta, mas la segunda es respondida con fría y perenne voz, dejando ver directamente su forma y pensamiento -- Ya te he dicho que no sirvo a nadie mas, nada, ni nadie puede manejarme como marioneta, ... -- toma una pausa para continuar -- Como a tu, que por decisión dices respetarlos, mas bien a ti te controlan, como tu controlas a estas que te rodean -- indica refiriéndose a lo que el había comentado sobre aquellas extrañas moscas, ...

Mientras el se encuentra dentro de aquella habitacion, las moscas parecieran querer acercarsele, mas al mismo tiempo parece como si le evitaran, no queriendo acercarse demasiado al cuerpo, que aun podria olor a vivo dentro de aquellas pusilanimes paredes, donde el hedor a muerte, se encierra y hace de su presencia la marca del poder etereo del señor de los muertos **

** Una sonrisa tenebrosa y sombría, se abre en su faz, al tiempo que una energía un tanto oscura, le comienza a cubrir iniciando por sus pies, que comienza convertirse en aquellas flamas oscuras, al principio pequeñas, despues un poco mas grandes, su voz suena atronadora por tercera ocasion -- Te repito, si quieres que sigan vivas tus criaturas, no las acerques a mi -- indica con voz helada, al tiempo que observa aquel remolino de insectos danzando alrededor ...

Luego añade -- en efecto, las criaturas inferiores siempre regresan a su superior -- parafraseando las mismas palabras usadas por el, pero con una intencion totalmente diferente, sus rojizos ojos observan todo la escena que pareciera sacada de los tiempos liricos de Dante, un mundo subrrealista que lo rodea con parsimonia, advirtiendo entonces el cero respeto por la vida que impera en aquel lugar donde ha venido a parar **

** Con una sonrisa, que raya en lo demoníaco, el guerrero de los ojos rojos observa primero a aquella "mujer", después pasea su vista por el lugar, observa a aquellos pobres soldados que comienzan a tomar una arcaica forma, e inverosímil posición de sus manos, piernas, cuellos, como si de alguna "tara" se tratara, con grotesco aspecto, comienzan a dirigirse hacia el, por el otro lado, aquella nube de moscas comienzan a rodearlo, sin embargo, aquel sujeto no se inmuta en lo mas mínimo, ...

-- Un superior que se place en destruir a sus sirvientes inferiores, no merece el calificativo de superior -- Indica con total tranquilidad mientras su cuerpo se comienza a rodear de una aura flamígera, que va creando un sinnúmero de flamas que lo van rodeando, poco a poco su cuerpo es cubierto de aquella energía. envolviendo con grandes matices, el fuego pareciera alumbrar al tiempo que absorbe la poca luz que los rodea ...

-- Te dije que mantuvieras a tus mascotas alejadas de mi!! -- en un momento sus ojos brillan con un dejo de violencia mal contenida, y la mano diestra se extiende, de donde nace una linea de fuego, que pronto se convierte en llamarada, calcinando en ese momento, los cuerpos sin vida que se acercaban a el, las moscas ya se cernían con rapidez, pero al sentir el fuego se alejaban, manteniéndose alejadas, el varón de las llamas vuelve a hablar -- Al menos el instinto les hace pensar, que harás tu, su superior? -- indica con tono lascivo mientras sigue esperando **